Migración, tragedia humana
Augusto Corro martes 1, Sep 2015Punto por punto
Augusto Corro
El problema migratorio “es una tragedia humana que requiere de una determinada respuesta política colectiva”.
En esos términos se expresó la semana pasada Ban Ki-moon, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Solo que al líder mundial le faltó agregar que se trata de una tarea que debe atenderse urgentemente.
Ya no hay tiempo para esperar la buena voluntad de los gobiernos para abrir las fronteras a los migrantes que huyen de sus lugares de origen empujados por el hambre y todo tipo de violencia, incluidas las guerras.
El conflicto migratorio se globalizó de ahí que Ban Ki-moon se refirió a una respuesta política colectiva al problema.
Sin embargo, parece que en los países europeos no quieren o no pueden enfrentar y frenar esa crisis migratoria que produce miles de muertos.
En este año 2,500 migrantes murieron o desaparecieron en su intento de cruzar de Africa a Europa.
Cada vez se hacen más familiares las fotografías de la odisea de los indocumentados que navegan en naves frágiles en el Mediterráneo con todas las posibilidades de zozobrar y morir.
O las escenas desgarradoras de los ilegales, con todo y familia, sometidos por las policías italianas, griegas, españolas, etc.
En nuestro hemisferio, Estados Unidos tiene sus propios problemas migratorios cuyos temas, son manipulados por Donald Trump, el aspirante a la candidatura republicana en las próximas elecciones presidenciales.
También se expresó muy mal de los inmigrantes mexicanos que “traen (a EU) drogas, crimen, son violadores y, supongo que algunos, son buenas personas”.
Con ese discurso racista, el político de moda inició su campaña y después agregó que en caso de llegar al poder, deportará a once millones de inmigrantes que residen en su país.
De plano, el aspirante republicano no escuchó el discurso de Ban Ki-moon, quien declaró lo siguiente, en torno a la problemática migratoria:
“Apelo a todos los gobiernos involucrados para proveer de respuestas completas, expandir los canales de migración segura y legal, y actuar con humanidad, compasión y de acuerdo con sus obligaciones internacionales”.
La pregunta obligada:
¿Alguien responderá positivamente al planteamiento de Ban Ki-moon?
Que a nadie se le olvide que urgen soluciones inmediatas, pues el conflicto migratorio crece, incontenible, en varias regiones del mundo.
GUATEMALA Y SUS PRESIDENTES
En los últimos tiempos, Guatemala estuvo gobernada por hombres inclinados a la delincuencia.
Por ejemplo, el ex dictador, Efraín Ríos Montt, con cargos por genocidio durante su gobierno.
El ex mandatario, luego de que su abogado argumentó que padece una enfermedad mental, será juzgado hasta el 11 de enero de 2016.
Con esa magnanimidad del juez, Ríos Montt logró eludir un juicio oral y público.
El otro delincuente es el ex presidente Alfonso Portillo. Estuvo en la cárcel en Estados Unidos por el delito de lavado de dinero.
En una temporada radicó en México, concretamente en Chilpancingo, Guerrero. El 23 de agosto de 1982 mató a balazos a Gustavo Cabrera Encarnación y Arturo Visoso, ambos universitarios al finalizar un baile.
Portillo huyó de la justicia mexicana. Luego fue mandatario en el vecino país.
En el momento actual, el presidente Otto Pérez Miranda es acusado por el delito de corrupción por la Fiscalía.
Los guatemaltecos exigen su renuncia al cargo en vísperas de las elecciones presidenciales el próximo domingo 6 de septiembre.
La semana pasada la Contraloría General de Cuentas de Guatemala recomendó a Pérez Miranda renunciar al cargo para “evitar consecuencias insospechadas”, ante la acusación en su contra de dirigir una banda de defraudación aduanera, denominada La línea.
El mencionado fraude en las aduanas y otros casos de corrupción mantiene al gobierno guatemalteco en una crisis institucional que provocó la salida de varios funcionarios del gabinete.