“La mujer que brotó de la tierra”, de Maries Ayala
Cultura jueves 27, Jul 2017En la ruta de las letras
Patricia Correa
- El tiempo y el espacio se confunden constantemente en esta novela, editada por Plaza & Janés: ¿son visiones o realidades las que vive Ana?
Maries Ayala, con su particular estilo de narrativa fantástica consigue una vez más que muchas historias confluyan en este maravilloso universo femenino: la de Lydia, la de Lea Mizrachi y la de Yamila. La delgada línea entre sueño y realidad estará siempre presente en esta novela que relata la vida de una familia, la tragedia de una niña musulmana y la capacidad de percepción de la propia protagonista. En entrevista exclusiva para DIARIOIMAGEN, la autora nos dio detalles.
—¿Cómo surge la idea de escribir esta novela?
“Tuve la oportunidad de estar viviendo en Egipto cinco años y fueron tantas las vivencias y emociones, sensaciones, experiencias de todo tipo, que al regresar yo tenía que hacer una historia de todo lo que había vivido, y con una casa antigua, la casa era muy enigmática, muy misteriosa, y de ahí surgieron todas las historias que fui hilando, iniciando con el secreto de la casa de El Cairo, que es el primer libro de esta serie, esta es la secuela, pero se puede leer de manera independiente”
—¿Cómo defines esta novela?
“Como una novela fantástica porque yo estaba tan metida en la historia que por momentos pensaba que estaba viendo algo real, algo muy posible, para que veas hasta qué lugar se van los escritores, y resulta que sí, que alguien que se pone a analizar todo lo que sucede son cosas bastante imposibles, que sin embargo de la manera en que está narrada la historia parecen posibles, muchas cosas mágicas, muchos elementos de corte mágico”.
—¿En “La mujer que brotó de la tierra” se aborda la brujería, la transmigración de cuerpos y los viajes en el tiempo. ¿Son estos temas que te interesan y te apasionan?
“Me apasionan muchísimas cosas, pero creo que funcionaba muy bien meter estos elementos en la historia, porque la protagonista necesitaba elementos de ese tipo, hay una piedra de cuarzo con la cual ella puede ver a su hijo, su hijo que está en el futuro, ve imágenes de su hijo pequeño, ella se ve en un tiempo que no les corresponde y qué hace pues empieza a buscar brujas para salir de ese embrollo, ella está con otra identidad, ella llega de un tiempo con otro nombre, ella en realidad se llama Ana Torres, pero despierta en el cuerpo de Ana Mizrachi, empieza a vivir una doble vida, vive en dos conciencias y tiene que arreglárselas para volver al tiempo real”.
—¿A qué lector va dirigido “La mujer que brotó de la tierra”?
“Es una novela que se puede empezar a leer desde adolescentes hasta todas las edades, no es una novela que tenga un público en particular, o que pueda interesar a un solo segmento, sin embargo, sí tiene algunas metáforas, está escrita donde se juguetea con algunas palabras para que el lector se pueda sentir más interesado, que no sea una prosa meramente significativa, que sienta que hay poesía, se juega con los sueños, y al soñar resuelven cosas, ya que son sueños premonitorios”, concluyó.