Nochixtlán, abuso de poder
Ángel Soriano viernes 20, Oct 2017Desde el portal
Ángel Soriano
Dieciséis meses después de ocurridos los hechos, una vez que Gabino Cué dejó el cargo y ahora disfruta de la gastronomía de los restaurantes de postín de Polanco, la Roma y la Condesa (con viajes relámpago a Oaxaca y eventualmente al extranjero), que los mandos policiacos ocupan otros cargos de más responsabilidad en reconocimiento a los méritos en campaña, el Ombudsman nacional, Luis Raúl González Pérez, emitió la siguiente recomendación, sobre lo ocurrido en Nochixtlán el 16 de junio de 2016:
El operativo para liberar vialidades no fue debidamente diseñado, preparado, coordinado y ejecutado, ni se observaron plenamente los protocolos de actuación, sobre todo por lo que hace al uso legítimo de la fuerza y la necesidad de seleccionar mecanismos y técnicas no violentas antes de utilizar la fuerza contra la población.
Como consecuencia de ello hubo 7 personas fallecidas, 174 pobladores lesionados (149 en Nochixtlán de los cuales 45 fueron por arma de fuego, 9 en Huitzo y 16 en Hacienda Blanca, uno fue por arma de fuego); 171 pobladores fueron afectados físicamente por gas lacrimógeno (84 en Nochixtlán, 25 en Huitzo y 62 en Hacienda Blanca); 108 pobladores fueron afectados psicológicamente (86 en Nochixtlán, 6 en Huitzo y 16 en Hacienda Blanca) y 43 pobladores fueron afectados patrimonialmente (25 en Nochixtlán, 5 en Huitzo y 13 en Hacienda Blanca).
Evidentemente la recolección de testimonios, pruebas y demás, llevó tiempo, en lo que el sentido común señala: hubo abuso de poder con el propósito de amedrentar a la disidencia magisterial, darles su merecido y evitar que se repitieran estos hechos, pero el resultado ha sido adverso: la violencia no puede resolver los graves conflictos sociales en la entidad.
Se requiere talento político y visión de Estado para reivindicar a los oaxaqueños, de lo que hay ausencia.
TURBULENCIAS
Eruviel cambia el escenario
El liderazgo priísta del mexiquense Eruviel Ávila en la capital del país cambia el escenario electoral y sepulta las aspiraciones de muchos perredistas o morenistas que se sentían como seguros sucesores del actual jefe de gobierno de la CDMX, Miguel Ángel Mancera, cuyo destino político también resultó dañado estructuralmente con los sismos del mes de septiembre. Todo parece indicar que Enrique Ochoa, líder nacional priísta, tiene instrucciones de postular a verdaderos gallones a los distintos cargos de elección popular, con el objeto de asegurar carro completo del tricolor para los comicios del 2018. Es evidente que los que se mencionan ahora como punteros, jugarán un papel importante en posiciones en el Congreso de la Unión y en el Poder Judicial, para lo cual se hacen los ajustes necesarios; la liturgia priísta, como tal, funciona otra vez para desencanto de quienes pensaban que la alternancia iba en serio…