Seguridad pública ¿a consulta?
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 18, Dic 2017Como veo, doy
Jorge Luis Galicia Palacios
- Redignificar la función policial, el propósito
- Se reconoce que en la seguridad hay problemas de fondo
Además de los 3 mil 216 cargos de elección popular que en todo el país se elegirán en 2018, todo indica que la jornada electoral tendrá también la particularidad de que por primera vez, de manera simultánea, los electores serán consultados para opinar en torno al modelo actual de seguridad pública.
Por considerar que se trata de un asunto de trascendencia nacional, la Cámara de Diputados avaló un dictamen que propone una consulta popular relativa al modelo actual de seguridad pública, y en ella consideran “que el diseño vigente de seguridad pública tiene problemas de fondo que impactan negativamente en la población, por lo que resulta necesario consultar a la ciudadanía, a fin de definir si desea un cambio en dicho modelo”.
Aunque con la negativa de legisladores del PAN, PRD y Morena, todo indica que, a menos que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) decida revertir lo aprobado en el legislativo, la pregunta que podría acompañar a las boletas electorales en 2018, sería: ¿Estás de acuerdo en que nuestro país tenga 32 policías profesionales, una por cada estado, en lugar de las más de mil 800 policías municipales que, de acuerdo a distintos estudios, están mal capacitadas, mal equipadas y mal coordinadas?
Con argumentos de que es inconstitucional, corresponderá a la SCJN determinar la constitucionalidad de la misma y en caso de que la consulta sea avalada la pregunta referida tendrá que ir acompañada por los recuadros “SÍ” y “NO” para ser marcados por los electores.
Cabe señalar que la consulta popular es una figura en el orden legal que fue aprobada con la Reforma Política de 2014 y se enmarca en un nuevo escenario de participación política para la ciudadanía mexicana, por lo que ahora los promotores de este ejercicio deberán cumplir una serie de requisitos como el hecho del 40% de votos de padrón electoral para que sus resultados sean vinculatorios, es decir requiere de ese apoyo para que la autoridad competente acate dichos resolutivos.
La Ley Federal de Consulta Popular excluye del ejercicio de consulta popular cualquier propuesta para restringir derechos humanos; la materia electoral; los ingresos y gastos del Estado; la seguridad nacional, y la organización y disciplina de las Fuerzas Armadas, y esta figura de consulta popular está limitada a una cada tres años, en concurrencia con las elecciones federales organizadas por el INE.
Es precisamente por el término seguridad nacional, por el que los opositores a la consulta argumentan que no procede y sería la SCJN quien determine lo procedente.
El documento aprobado refiere que la experiencia ha demostrado que el actual esquema es insuficiente para combatir la inseguridad, pues a pesar de haber probado con diferentes políticas públicas, como aumentar la asignación de recursos económicos, modernizar el equipamiento policial e implementar agencias de investigación, entre otras más, no han bastado para disminuir la incidencia delictiva en el país.
Esa situación pone en riesgo el estado de derecho y la vida democrática del país -señala la propuesta- por lo que es necesario “redignificar” la función policial, así como mejorar la eficacia operativa y despliegue geográfico de las corporaciones, aumentando la confianza ciudadana en sus instituciones policiales, colocando al ciudadano como el principal usuario de un servicio público de calidad.
La propuesta estima que realizar la consulta es una acción congruente con los nuevos enfoques de seguridad pública democrática, impulsados por el Estado, en corresponsabilidad con la sociedad. Además, es una posible solución a los problemas que aún persisten en las instituciones policiales
Asegura que negar este derecho legítimo a la población, resultaría una decisión contraria a la democracia que actualmente sustenta al Estado. Asimismo, significaría un retroceso para la preservación del orden y gobernabilidad.
Es probable que la consulta pudiera no prosperar, lo que sé es un hecho es que, en el marco de una mayor participación ciudadana, desde ahora los electores debemos ir familiarizándonos con esta fórmula que, no hay duda, ya forma parte de nuestra vida democrática.
Así qué ya saben queridos lectores, ¿están ustedes de acuerdo en que se haga una consulta con tales características? Cualquiera que sea su respuesta no se angustie, ya que como muchas otras cosas, será la Suprema Corte de Justicia de la Nación quien tenga la última palabra en este delicado tema.
VA MI RESTO.- No es la primera vez que, en el marco de la reforma política de 2014, se plantea un ejercicio de este tipo para un proceso electoral. En las elecciones intermedias de 2015, los partidos de Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), hicieron un planteamiento de mayor participación ciudadana. Los blanquiazules promoverán una consulta popular para elevar el salario mínimo en todo el país, en tanto que los del sol azteca pretenden derogar la Reforma Energética mediante ese ejercicio. Ninguna propuesta prosperó.
Así las cosas, en el caso de la pregunta en materia de seguridad pública, lo que decidan en el poder judicial será trascendente, porque una consulta de este no debe generar expectativas que después no se puedan cumplir, y hasta ahí porque como veo, doy.