“La estética del crimen” celebrará maratónica Navidad
Espectáculos martes 19, Dic 2017- La puesta en escena se presentará diariamente a partir del 25 de diciembre al 6 de enero en el Teatro Fernando Soler
- En exclusiva para DIARIO IMAGEN, parte del elenco convivió en un brindis en el que también se dieron tiempo de platicarnos sobre su experiencia al ser partícipes de esta obra, que ya casi alcanza las 300 representaciones en México
Arturo Arellano
“La estética del crimen” es una divertida puesta en escena que si bien cuenta con una historia de más de 30 años en Estados Unidos, aún continúa divirtiendo y asombrando al público cautivo del teatro, ya que su formato no es convencional, pues el elenco rompe la cuarta pared en todo momento y es justamente el público quien termina por resolver el misterio que aquí se plantea: el asesinato de la célebre artista Isabel Pratt. Tal ha sido el éxito de esta obra en México que han decidido cerrar el año con una serie maratónica de presentaciones en el Teatro Fernando Soler del 25 de diciembre al 6 de enero
En exclusiva para DIARIO IMAGEN, parte del elenco convivió en un brindis en el que también se dieron tiempo de platicarnos sobre su experiencia al ser partícipes de esta obram que ya casi alcanza las 300 representaciones en México.
Carlos Rangel quien da vida a “Tony Deschamps”, señaló que “es un verdadero éxito y estamos felices de ello, hay gente que ha repetido ver la obra hasta 20 veces y es que el texto es tan abierto que permite que ninguna obra sea igual la anterior, el hecho de que el desenlace de la obra lo decida el mismo público hace que cada vez tengamos un final distinto, un asesino diferente”. Describe: “nosotros hacemos un planteamiento, que es la anécdota de la obra, el asesinato de la pianista Isabel Pratt, que vive un piso arriba del salón de belleza Tony´s de Polanco, del que mi personaje es el dueño. La pianista es una viejita que se la pasa toque y toque, ya tiene hartos a todos, en el momento del asesinato, todos los presentes son sospechosos, llega la policía y se hace la recreación de los hechos junto con el público, todo se vuelve interactivo”.
Añade que siendo un asesinato de donde se parte para el desarrollo de esta entretenida y cómica historia “se toma con mucho cuidado, es algo lastimoso hablar de asesinatos, sobre todo en la actualidad que es algo desafortunadamente tan presente. Sin embargo, la obra está tan bien escrita que aunque estamos todo tiempo alrededor de un asesinato, son situaciones sumamente cómicas, porque no nos burlamos de la muerte, sino de las circunstancias que rodean esa muerte y no las circunstancias de la asesinada, sino a los presuntos asesinos, eso es lo divertido. De modo, que lo que se pretende con la obra es denunciar al culpable”.
Destacó por otra parte el trabajo de sus compañeros Omar Medina y Mario Alberto Monroy, a quienes refirió como los maestros de la improvisación en México y quienes dan vida a la pareja de policías a quienes se les asigna el caso de este asesinato y que con sus medios tratarán de desenmascarar al asesino. El segundo de ellos también en entrevista recordó que “para elegir a los actores que interpretarían esta obra hubo un proceso de audiciones hace más de un año y a mi parecer con todos le dieron en el clavo, yo invitaría a la gente a que no se pierda esta obra con el elenco original que arrancó esta aventura, porque para 2018 se vienen cambios, yo no digo que los actores que vendrán no serán buenos, pero sí vale la pena ver el montaje con esta familia, que sigue junta luego de un año y casi 300 representaciones”.
Sobre su personaje detalló “sabemos que lastimosamente en México un policía no te inspira confianza, de modo que tomamos un poco de eso para los personajes y en mi caso lo que hice fue humanizarlo, porque en la versión original de Paul Pörter, son dos detectives, pero hace 12 años que se hizo la adaptación en México de Alberto Lomnitz y Ricardo Esquerra y se hizo de estos detectives, dos policías de crucero, ni siquiera uniformados con habilidad para resolver una situación de esta índole, ellos son dos personajes que circunstancialmente, por estar cerca del lugar de los hechos tienen esta necesidad de resolver las cosas”.
Añade: “desafortunadamente las experiencias con los policías en México son en su mayoría negativas, pero en mi caso construí mi personaje con diferentes inspiraciones, como un policía que dejaba su puesto por ponerse a jugar futbol con nosotros en la cuadra cuando yo era niño. Pero mis personajes nunca son una sola persona, es como una mezcla, en este caso esta ese policía de mi cuadra, otro que observé mucho sobre la calle de Alfonso Reyes y la verdad es un personaje muy callado, de modo que casi todo lo construye en su mente, de manera que me puse a ver comparsas de cómicos mexicanos, particularmente Pardavé o Marcelo con Tin-Tan”. En ese mismo tenor, Omar Medina refirió que “toda la intención de estos personajes es hacer las cosas bien, pero el toque cómico esá en cuanto se dan las cosas mal. Sabemos que en su mayoría los policías son corruptos, pero estos personajes son muy divertidos en el sentido de que tratan de no serlo, dicen ‘no’ a la mordida y eso los hace muy entrañables.
Define a los policías como “un estereotipo, pero Alberto y yo los hemos abordado desde una perspectiva relativamente realista, de modo que nuestro trabajo es que a pesar de ser estereotipos también tengan una personalidad muy bien definida. Con la posibilidad de seguir jugando función tras función y la pasamos muy bien. Eso se ve reflejado en el escenario, tomando en cuenta que es una comedia con tanta interacción es imprescindible que hagamos muy buen equipo”.
Nos contaron también un ejemplo claro de lo bien que funciona la obra es por ejemplo “cuando un señor nos gritaba desde la última fila, y nos acusaba a los policías, sino hubiera sido por Michelle no se habría calmado, porque a nosotros no nos respetaba como autoridad. El señor se subió al escenario y nos reclamaba muy intenso, él como de 60 años, pero de esos que se ven corriosos, que todavía salen a correr todos los días. Pero eso es lo maravilloso de la obra, que la gente se mete y se emociona”.
Finalmente, Michelle Rodríguez, que da vida a Bárbara, asistente de Tony Deschamps, nos contó “mi experiencia personal, ha sido gratificante, porque he podido compartir con gente muy talentosa y amable. En tanto la comedia de esta obra sucede porque hay diferentes puntos de vista, no sólo de los personajes sino de todo el público, pues si bien se toca un tema agresivo que es el asesinato de una persona, todas las situaciones en torno, son chistosas, en este imaginario del mexicano, donde los policías no saben qué hacer, la gente se lava las manos, cada personaje tiene un rol bien definido”.
Siendo la comedia el mejor vehículo para llevar un mensaje, Michelle refiere que “‘La estética del crimen’ tiene muchos mensajes, empezando por los policías de la obra, todos somos conscientes de que no saben hacer nada y no van a poder. Ahí ponemos a la gente a pensar ‘yo qué haría como testigo’. La gente se pone en ese lugar, uno a uno, en la obra y está padre, creo que si todos hacemos ese ejercicio en casa, preguntarnos qué haríamos y ponernos en los zapatos del otro siempre entenderemos la postura del de enfrente y podríamos llegar a una mejor solución”.
Refiere que “a la hora de la votación para definir al culpable, nos damos cuenta de que la gente vota, luego vota dos veces o votan por todos, cuando se les pide que sólo pueden votar una vez, ahí se ve que tan participativos y responsables somos también. Sin embargo la comedia nos salva”.
Así, “La estética del cirmen” ofrecerá funciones diarias del 25 de diciembre al 6 de enero, incluso el 1 de enero.