Cambió el panorama
¬ Armando Rojas Arévalo martes 6, Jul 2010Epistolario
Armando Rojas Arévalo
JOSÉ LUIS: Una cosa era el día 3 y otra es a partir del día 4. Las alianzas funcionaron y nos adelantan que PAN, PRD y demás desarrollarán la misma estrategia en el Estado de México para el 2011 y en la elección presidencial del 2012.
No fue carro completo para el PRI, y aunque rescató las gubernaturas de Tlaxcala, Aguascalientes y Zacatecas, perdió tres importantes bastiones históricos: Puebla, Oaxaca y Sinaloa.
Hay que reconocer que las alianzas lograron un importante triunfo al ganar en los estados donde el PRI tenía ancestral hegemonía y ponen a este partido en un serio dilema para el 2012. Por vía de mientras, desde hace varias semanas ya buscan echarle montón en el 2011 al PRI en el Estado de México, que es la segunda entidad con más votantes en este país, después del Distrito Federal.
Si el PAN y PRD hubieran participado con candidatos propios, los resultados del domingo habría significado una monumental derrota para ellos, pero el matrimonio antinatura y la piratería política les funcionaron.
El PRI debe aprender de esta nueva lección. La primera fue en el 2000, la segunda fue la del día 4. Debe refundarse en serio -pero en serio- y preparar nuevos cuadros y estrategias, porque volvió a usar las mañas porfirianas que lo han caracterizado.
Los comicios del domingo nos enseñaron que la ciudadanía no tuvo miedo de salir a votar, a pesar de la violencia; la votación no fue copiosa (el abstencionismo llegó al 50 por ciento), pero fue superior a la que se esperaba en vista de las circunstancias.
La ciudadanía nos mostró que quiere un cambio verdadero y auténtico. Los resultados en Sinaloa, Oaxaca y Puebla tratan de indicar que el camino de la alternancia es el conveniente.
Los resultados nos muestran un reacomodo de las fuerzas. Sí, el PRI sigue siendo la primera fuerza electoral de México, pero se debe tomar en cuenta que los tres estados en que fue derrotado el padrón global de electores es de 11.5 millones, frente a 3.5 millones de votantes que suman Aguascalientes, Tlaxcala y Zacatecas. O sea, pierde un potencial de 8 millones de electores.
El PAN pierde Aguascalientes y Tlaxcala, en tanto que el PRD deberá dejar el mando de Zacatecas. Empero, los dos ganan en alianza Puebla, Oaxaca y Sinaloa, donde (yo no sé cómo) tienen que conformar gobiernos de dulce, chile y manteca, sin gritos ni sombrerazos.
Mal ha hecho el PAN en arrogarse las victorias del domingo, porque no fue solo. NAVA quiere que la gente crea que las victorias son suyas, cuando todos sabemos que esos triunfos fueron por la coalición. Es más, ninguno de los candidatos triunfadores emergió de ese partido ni del PRD. “MALOVA” en Sinaloa y MORENO VALLE en Puebla fueron pirateados del PRI, y GABINO CUÉ es de Convergencia.
El triunfo de éstos no fue gracias sólo al PAN y el PRD, influyeron otros elementos. Por ejemplo, la profesora ELBA ESTHER GORDILLO apoyó a MORENO VALLE con toda la fuerza y recursos del SNTE, y detrás de GABINO siempre estuvo ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
La jornada hubiera sido desastrosa para el PRI si hubiera perdido Veracruz. Empero, se la van a hacer cansada por las impugnaciones que caerán en cascada contra FIDEL HERRERA BELTRÁN y JAVIER DUARTE. La profesora ELBA ESTHER, maestra en el arte de la perversidad política, va con todo a favor de su ahijado y protegido MIGUEL ÁNGEL YUNES.
Los ganones no fueron solamente PAN y PRD, sino la profe. BEATRIZ PAREDES perdió ante ella, pero, por otra parte, la tendrá como aliada en el Estado de México para el 2011 porque tienen ahí los mismos intereses.
No todo fue malo para el PRI en el pasado superdomingo. Si perdió sus tres baluartes, ganó mayoría en los 14 los congresos locales y casi el 70 por ciento de las mil 309 alcaldías que se disputaron.
Ganó en municipios tan importantes como Tijuana, Mexicali y Ensenada. Ganó las capitales de Aguascalientes y Zacatecas, y con toda seguridad Can cún (Benito Juárez).
Después de los pasados comicios, el mapa político del 2010 es el siguiente:
El PRI tiene Quintana Roo, Estado de México, Campeche, Yucatán, Tabasco, Veracruz, Tlaxcala, Hidalgo, Querétaro, San Luis Potosí, Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila, Chihuahua, Durango, Colima, Nayarit y Zacatecas. Total: 18 estados.
El PAN: Morelos, Jalisco, Guanajuato, Baja California y Sonora. Total: 5.
El PRD: Guerrero, Baja California Sur, Michoacán y Distrito Federal. Total 4.
Chiapas, es un caso especial. El gobernador llegó por la alianza PAN-PRD-Convergencia y demás, en el 2006.
Para la nueva alianza: Puebla, Sinaloa y Oaxaca.
El domingo cambió el panorama. El PRI no tuvo carro completo; las tres victorias históricas de la alianza entre “espurios” y “legítimos” mostraron que el PAN y el PRD no pueden ganar por separado con candidatos propios una elección de barrio.
El modelo prevalecerá, ni duda, en el 2011, y para el 2012, igual.
EBRARD está apuntado como posible candidato de esa alianza, pero no hay que olvidar que ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR no está dispuesto a abandonar la plaza.
Sin embargo, podría ocurrir que, para no generar divisiones ni disputas estériles que echen a perder los propósitos de esa coalición, la balanza se inclinaría por un candidato sin partido, o sea, “ciudadano”. Ni tirios ni troyanos; ni melón ni sandía. Conste.
El único problema que se van a encontrar en el camino se llama MANUEL CAMACHO SOLÍS, el padre de la alianza antinatura, si se enterca en ser el candidato.
DE OTRAS COSAS.- Dos cambios se avecinan. Uno será en el gabinete, y el otro de un gobernador de un estado del sureste. Uno se va a su casa y el otro como embajador.
Podría, también, regresar a su casa DIEGO FERNÁNDEZ DE CEVALLOS.
Al tiempo…
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