Feminicidios, la otra epidemia
Augusto Corro lunes 13, Jul 2020Punto por punto
Augusto Corro
Está muy claro que faltan leyes más severas para castigar a los feminicidas. Las mujeres mexicanas no pueden sacudirse esa acción criminal que pesa sobre ellas. Son variados los factores que se unen para victimizarlas. Uno de ellos es el machismo, otro, la impunidad, casi total. Estos dos elementos son suficientes para que los hombres agredan, ataquen o violen a su esposa, compañera, pareja, etc.
En estas condiciones, será difícil reducir el índice de feminicidios que se registran en las diversas entidades, donde se alternan las cifras de muertes por temporadas, pero los crímenes continúan; por una razón, la conducta del mexicano no cambiará de un día para otro. Esto todo mundo lo sabe, pero, desafortunadamente, nadie quiere atender el problema.
Sólo cuando se trata de feminicidios que impacten a la sociedad se despierta una ola de condenas contra los criminales que luego desaparece. Los funcionarios y políticos aprovechan el hecho para lanzar sus proclamas de repudio y nada más. Los asesinatos contra las mujeres continúan. Y, precisamente, en tiempos de pandemia del coronavirus, los ataques a las mujeres aumentaron.
Si en días tranquilos, sin el problema del Covid-19 no se atendían las llamadas de auxilio de las víctimas, o no se les escuchaba, en el presente, es casi inútil pedir ayuda. En las noticias diarias, no falta el relato de un ataque contra las mujeres, que incluso culpan a grupos de narcotraficantes, por la saña con la que actúan. En crímenes recientes se nota la mano de la delincuencia.
Por ejemplo, cinco mujeres, entre ellas, tres niñas menores de edad y dos mujeres adultas, fueron asesinadas a balazos por sujetos armados que ingresaron a su vivienda en la colonia El Tráfico, en el municipio de Nicolás Romero, en el Estado de México, la semana pasada. Esa historia criminal se repite hasta en los lugares más apartados del territorio nacional.
El viernes pasado se informó que en los últimos días fueron asesinadas cinco mujeres casi una por día, en el área conurbada de Guadalajara, Jalisco. En lo que va del año, en aquella entidad se reportaron 55 asesinatos entre feminicidios y homicidios dolosos. Por otra parte se registraron las miles de agresiones que incluyen ataques de tipo sexual hasta golpes dentro del hogar.
En fin, la cultura machista y el crimen organizado ya predominan en las acciones contra las mujeres, en cualquier sitio de México. No se ve que se pueda controlar a ninguno de los dos tipos de delincuencia. La imagen del macho será difícil erradicarla. Los gobiernos demuestran poco interés para desterrar ese mal de la conducta del mexicano.
Tendrá que transcurrir mucho tiempo para que los mexicanos tengamos otra concepción del trato hacia ellas, sin violencia y sin agresiones. También cabe señalar que la participación de la delincuencia contra las mujeres continuará hasta que termine el narcotráfico. El problema que se agrava porque los asesinatos se cometen con saña y torturas.
PUNTOS SUSPENSIVOS… En México vamos para 35 mil decesos por el coronavirus (Covid-19) y aún no se entiende cual es el papel de los gobiernos municipal, estatal y federal. El domingo en la mañana, el llamado semáforo sanitario no funcionaba. En los estados hay anarquía en la información. Aquí en la capital, luego de ver la cantidad de personas en la vía pública, no se sabe qué color de semáforo es el vigente. Mientras más personas abandonen el confinamiento, mayores serán las posibilidades de contagio. Pocos lo entienden. Así que usted no baje la guardia, esto de la pandemia seguirá por mucho tiempo entre nosotros, hasta que se descubra la vacuna que elimine el virus… En la Ciudad de México, la dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD) capitalino, Nora Arias, denunció que en la mayoría de los 260 centros de salud enfrenta un grave desabasto de medicamentos y vacunas de hasta del 80%, situación que pone en riesgo a personas con diabetes, hipertensión y obesidad…