Monreal, al fin “corcholata”
Armando Ríos Ruiz viernes 20, Ene 2023Perfil de México
Armando Ríos Ruiz
Cuando el Presidente decidió destapar a sus favoritos para sucederlo, se aseguró de no mencionar al senador Ricardo Monreal, pero sí a Claudia Sheinbaum y a Marcelo Ebrard. Se entendió que a la primera, por haberle guardado siempre una lealtad a toda prueba, desde el principio de su carrera, aunque éste sea el único mérito con que cuenta, pues no hay otro. Por ejemplo, el de una capacidad sobrada para manejar los cargos que ha desempeñado.
A Marcelo Ebrard, por ser un político dueño de una gran sensibilidad, obediente, capaz y también leal. Cuando era el jefe de la policía capitalina y su patrón, jefe de Gobierno, hubo un hecho en San Juan Ixtayopan, Tláhuac, en donde una multitud capturó a tres agentes de la Policía Federal Preventiva que, no obstante haberse identificado como tales, fueron acusados de fotografiar niños.
En realidad, investigaban una escuela en donde, se supo, entrenaban a guerrilleros, con conocimiento de las autoridades. Los agentes, que trabajaban encubiertos, como se conoció, fueron golpeados con puños, pies y palos hasta dejarlos inconscientes. Después fueron quemados vivos. Uno de ellos, que hoy vive en España, logró salvar la vida. También se conoció que entonces, Marcelo pidió instrucciones para intervenir, pero la respuesta fue en sentido contrario.
En las elecciones de 2012, Marcelo se disciplinó al resultado de la competencia entre él y el tabasqueño. Aceptó que fuera éste con las siguientes palabras: “Soy leal. Podría ir a las internas. Pero ¿dónde queda la congruencia? Sería un suicidio para la izquierda. El camino está antes que el deseo.” Por otro lado, se dijo también que se dejó convencer.
Posteriormente, hay quien pensó que el actual primer mandatario ya le pagó, al rescatarlo de su ostracismo en Francia, luego de todos los problemas que se acarreó con la construcción de la Línea 12 del Metro. Primero permitió que hiciera campaña a su favor en Estados Unidos y después lo incorporó a su gabinete, como secretario de Relaciones Exteriores. Por lo tanto, se acabó la deuda política que hubiera quedado pendiente.
La llegada del súper amigo del Presidente, Adán Augusto López Hernández, a la secretaría de Gobernación, en lugar de la señora Olga Sánchez Cordero, suscitó inmediatamente expectativas sobre el futuro político del ex gobernador de Tabasco, toda vez que se supo de una amistad bastante estrecha entre ambos, que lo colocaba también como un aspirante con muchos derechos.
El senador Monreal continuaba sin ser tomado en cuenta, aunque alardeaba que estaría en la boleta, ya sea como candidato de Morena o de la oposición. Para muchos, jugó demasiado mal un juego que se supone conoce bastante. Y ahora parece presumir que finalmente, el gran elector lo acaba de tomar en cuenta como uno más de su séquito, para pelear por la sucesión.
El Presidente pudo incorporarlo desde el principio. Pero dejó ver que no lo animaba esa situación. Al final de este ejercicio sólo será uno el verdadero candidato. Esto ha hecho pensar a politólogos que la intención real es contender para la jefatura de gobierno de la CDMX, ya que el amor del Presidente está en otro lugar.
El senador dice que es fundador de Morena −como lo fue del PRI− y está obligado a permanecer en ese partido, como no lo estuvo para continuar en el Revolucionario Institucional, cuando se decidió que no sería candidato al gobierno de Zacatecas. Pero son salidas de tono, debido a que en la oposición no hubiera prosperado su prurito de ser su candidato. Hay muchos que le llevan delantera y que tienen todo el derecho de suspirar, con más fuerza que él.
Repite que conoce al Ejecutivo, a quien ha acompañado hace 26 años y hace notar que hasta podría convencerlo de que es merecedor de su dedo. Sin embargo, a estas alturas todo mundo sabe que el corazón del mandatario aún está con Claudia. Aunque seguramente, esperará el desarrollo de los acontecimientos en torno a las preferencias de los votantes, para dictar una solución definitiva Y parece que quien sigue es Marcelo.