La diferencia entre Beltrones y Peña es de imagen
Roberto Vizcaíno lunes 3, Oct 2011Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- Sus propuestas en cuestiones económicas, políticas y sociales son coincidentes
- La diferencia entre ellos no es de propuestas, sino de manejo de medios
- Sus respuestas tienen que ver sustancialmente con la eficientización del poder
Confrontados bajo las mismas interrogantes por el suplemento político Enfoque, del diario Reforma de su edición de ayer domingo, lo que queda claro es que los dos precandidatos presidenciales del PRI, Manlio Fabio Beltrones y Enrique Peña Nieto coinciden en casi un 95 por ciento en las soluciones respecto de los grandes problemas de México, lo que advierte que la gran distancia que le saca el mexiquense al sonorense es sólo en la percepción ciudadana.
Con 14 años menos que Beltrones, quien el 30 agosto cumplió los 59, Peña Nieto, de 45 alcanzados el 20 de julio, apenas difiere del sonorense en unos 3 o 4 puntos de los casi 40 que abordaron para el suplemento.
Eso significa que las enormes preferencias ciudadanas con que cuenta Peña Nieto frente a las muy exiguas de Beltrones, más que en supuestas diferencias en proyectos o capacidades de respuesta de poder o gobierno, se encuentran entre uno y otro en relación a sus carismas.
Obviamente, que el primer razonamiento tiene además que ver con un trabajo de imagen y medios de información. Hoy, la confrontación de este debate por escrito, indica que Peña Nieto fue más habilidoso y visionario que el experimentadísimo Beltrones durante los cinco años anteriores, en su manejo de comunicación con las masas.
Eso no disminuye su capacidad de hacer política y de crear proyectos, sino que muestra una deficiencia del senador para comprender su inserción de hombre público en los medios de comunicación mientras que advierte al de Atlacomulco como un político, que además de ejercer con eficiencia el poder y su cargo de gobernador, logró establecer un fuerte vínculo de imagen con sus conciudadanos, no sólo de su estado, sino de todo el país.
Por lo demás, las respuestas de ambos a las casi 40 preguntas formuladas por Ernesto Núñez en Enfoque, nos indican que en algunos puntos Peña y Beltrones casi responden lo mismo.
Todo por supuesto parte de la idea de que cada uno pudiera llegar a Los Pinos. Una vez instalados ahí, que harían:
¿Regresarían al Ejército a sus cuarteles?
Peña: Sí, pero no de inmediato… sino después de consolidar policías civiles con capacidad de respuesta y luego de establecer un eficiente sistema de inteligencia.
Beltrones: Sí, luego de crear cuerpos de policía eficientes y un sistema de inteligencia que de “tiros” seguros, directos contra los delincuentes.
¿Abrirían una investigación de la guerra de Calderón?
Peña: Sería inevitablemente tema de análisis e investigación.
Beltrones: Nadie estaría por encima de la ley.
¿Comisión de la Verdad?
Peña: Hay desgraciadamente episodios de violación de Derechos Humanos.
Beltrones: Un buen gobierno debe combatir la impunidad.
¿Legalización de las drogas?
Peña: No.
Beltrones: Es un debate no terminado…
¿Pactarían con el crimen organizado?
Peña: No. La ley no se negocia, se aplica.
Beltrones: Significaría la autoderrota del Estado. A la delincuencia no hay que darle tregua.
¿Grupos paramilitares, qué hacer?
Peña: Apoyado en un trabajo de inteligencia, aplicarles la ley.
Beltrones: Con un trabajo de inteligencia, actuar contra ellos.
¿IVA a alimentos y medicinas?
Peña: La respuesta es una reforma hacendaria integral; el régimen ya no responde a la necesidad del Estado; recaudamos poco.
Beltrones: La respuesta es una reforma fiscal integral.
¿Fusionar IMSS e ISSSTE?
Peña: No, hay que fortalecerlos y garantizar un sistema de seguridad social para todos.
Beltrones: Hay que hacer que ambos funcionen al 100 por ciento y luego elevar la calidad de sus servicios.
¿Cuáles sus políticas de gasto para impulsar la economía interna?
Peña: Somos un país que recauda poco y gasta muy mal. Hay que eficientar el gasto, darle apoyo a sectores que tienen más fortaleza.
Beltrones: Hay que invertir en todo lo que genere empleo y lo que genere ahorro.
Fox prometió 7 por ciento de crecimiento y Calderón un millón de empleos… ¿Cuál la oferta de ustedes?
Peña: No hubo ni crecimiento ni empleos… es con crecimiento acelerado y sostenido como se generan más empleos, mayor riqueza y corresponderá al Estado definir los instrumentos para que ocurran las dos cosas.
Beltrones: Yo haría las cosas diferentes… iría al diseño de una política para combatir desigualdad y pobreza.
¿Habría nueva reforma energética?
Peña: Sin duda. El petróleo debe ser la palanca del desarrollo y seguir siendo de los mexicanos.
Beltrones: Sería muy pretencioso hablar de eso. Necesitamos adecuaciones.
¿Concesionarían una tercera cadena de televisión?
Peña: Es muy factible. Hay que favorecer la competencia.
Betrones: ¿Por qué una tercera? Deben ser muchas más…
¿Mantendrían los mismos programas contra la pobreza?
Peña: Sí, pero más eficientes.
Beltrones: Más importante combatir la pobreza con crecimiento económico, pero se deben mantener programas adecuados.
¿Qué harían con Elba Esther?
Peña: El mejoramiento de la educación no depende de ella.
Beltrones: Nadie es indispensable.
¿En contra de la reelección de legisladores y alcaldes?
Peña: En contra.
Beltrones: A favor.
¿En contra de candidaturas independientes?
Peña: A favor.
Beltrones: A favor.
¿Y de la consulta popular?
Peña: A favor.
Beltrones: A favor.
¿De la revocación de mandato?
Peña: En contra.
Beltrones: En contra.
¿Reducción de las cámaras?
Peña: Sí.
Beltrones: Yo lo propuse.
¿Desaparecer plurinominales?
Peña: No todos, hay que garantizar una representación de las minorías.
Beltrones: No todos.
¿Segunda vuelta en la presidencial?
Peña: No.
Beltrones: Mejor gobiernos de coalición.
En fin, hay otras preguntas que ya no ponemos y cuyas respuestas son coincidentes. Entonces, si uno ve el fondo de todo esto, se hace más claro que las preferencias de la mayoría de los mexicanos por Peña Nieto respecto de Beltrones, tiene que ver más con una imagen que con sus propuestas.
Interesante ejercicio que revela la esencia política de los ciudadanos y el enorme impacto que se desprende de los carismas de cada personaje.