La contabilidad electrónica es ya una realidad
Finanzas lunes 22, Sep 2014- Pese a amparos interpuestos
Cancún, septiembre 2014.- Así como las facturas electrónicas llegaron para quedarse y están madurando, con la contabilidad electrónica ocurrirá lo mismo en el mediano plazo de acuerdo a expertos.
No obstante los alrededor de 530 amparos interpuestos contra está última en Quintana Roo, y las consecuencias inmediatas que ha tenido la reforma fiscal en la economía nacional, los cambios derivados si redundarán en el crecimiento esperado para el país.
Tal es la afirmación del presidente de la Asociación Nacional de Ejecutivos Fiscales (ANEFAC), capitulo Cancún, Héctor Correa, al presentarse ante la prensa como delegado de los ejecutivos de finanzas.
El experto no negó como claramente se ve la intención reguladora y ordenadora de la reforma en cada una de sus determinaciones.
Que en el camino se vean algunos efectos adversos también le resulta lógico pero perfectible, y en este sentido pondera la disposición del SAT para escuchar las opiniones calificadas de colegios y asociaciones civiles.
Con el aporte de los directamente involucrados es que, dijo, se han logrado triunfos como el de aplazar la entrega de contabilidad electrónica y se podrían precisar algunos como en el tema de los RIF.
Puntualizó que muchos de los cierres de empresas familiares que ha habido se dieron tras conocer que estaban obligados a otorgar Seguro Social a sus empleados, aun si fueran sus familiares directos.
“Un negocio establecido, como los que podemos encontrar en cada esquina de cualquier calle, difícilmente percibe ingresos para cumplir con ese requerimiento por lo que ya se propone darlos de alta con menos responsabilidades”, comentó.
En su opinión, era, sin embargo, necesario desaparecer a los Repecos e integrarlos al RIF pues en ese régimen había quienes solo pagan una cuota fija cada bimestre con ingresos mensuales promedio de 2, 500 pesos y otros que con las mismas responsabilidades percibían hasta 150 mil.
Al experto le resulta justo que la reforma equilibre las cosas para que mientras unos emitan recibos de nómina otros puedan facturar y cada uno pague lo correspondiente según sus ingresos.