Miguel Ángel Mancera Espinosa dice que no habrá impunidad
* Especiales, Cd. de México martes 15, Ene 2013- El jefe del GDF señala que los homicidios registrados el fin de semana fue por riñas, intento de asalto y otras situaciones
El jefe del gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, afirmó ayer que no habrá impunidad en los casos de los 22 asesinatos registrados durante el pasado fin de semana y dijo que la seguridad en la ciudad de México está garantizada.
Entrevistado después de hacer entrega de 39 unidades policiacas a diversos sectores de la delegación Iztapalapa, el mandatario dijo que de acuerdo con los reportes que ha recibido derivado de las primeras investigaciones, las causas en su mayoría tienen que ver con riñas o conflictos previos que existían entre una o más personas, además de intentos de asalto u otras situaciones.
“Es decir, la seguridad en todos los órdenes de la ciudad está garantizada. Hay un trabajo que ya están realizando obviamente las áreas de investigación, de procuración de justicia, la instrucción que he dado muy clara, es que no haya impunidad”.
“Creo que siempre estos temas son para ocuparnos, no podemos de ninguna manera dejar de estar pendientes, la ciudad de México siempre está alerta en los temas de seguridad”ó.
En tanto, el procurador de Justicia del Distrito Federal, Rodolfo Ríos, comentó que este fin de semana fue “atípico e inusual” por el incremento de homicidios dolosos, ya que en promedio se contabilizan en la ciudad hasta dos casos diarios y durante los últimos tres días la cifra creció hasta 22.
De ellos, sólo dos, los ocurridos en Iztacalco y Tláhuac tienen visos de tratarse de ejecuciones.
“Sí, son varios homicidios, es muy lamentable este fin de semana, pero no son hechos que puedan estar enlazados entre sí, sino las circunstancias en los que se cometen los mismos es completamente distinta”.
Durante la misma conferencia de prensa, el funcionario informó que en el caso de las ejecuciones, hay comunicación con las autoridades del Estado de México, ya que se presume que uno de los muertos era miembro de una corporación policiaca.