La diabetes tipo II en niños, difícil de diagnosticar
Salud martes 5, Mar 2013Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- El infarto es la primera causa de muerte en las mujeres
- Mejora la técnica que se emplea para la rehabilitación
La diabetes tipo II en la población infantil, derivada de la obesidad, es muy difícil de diagnosticar de forma temprana ya que, en comparación con los síntomas que registran los adultos, como sed constante, pérdida continua de orina y disminución de peso, la enfermedad -en su inicio-, no manifiesta ninguna señal, afirma Raúl Calzada León, jefe del Servicio de Endocrinología del Instituto Nacional de Pediatría de la Secretaría de Salud. Ante la falta de síntomas, es necesario que a todo niño con obesidad se le realicen exámenes de niveles de glucosa, pero no en ayunas, sino dos horas después de ingerir los alimentos. Otra señal es cuando tienen una pigmentación oscura en zonas específicas como cuello, axilas, rodillas, codos e ingle, la cual se le conoce como “acantosis nigricans” y se presenta en el 99% de los niños con obesidad. Se recomienda que todo niño en tales circunstancias se someta a pruebas de glucosa y de insulina, lo que permitirá conocer las variaciones de azúcar en sangre y determinar si desarrolló la enfermedad. Lo más importante de un diagnóstico oportuno es controlar la enfermedad para evitar complicaciones. Un niño con diabetes tipo II atendido por un equipo multidisciplinario de especialistas, puede lograr el control del padecimiento a través de un programa de alimentación y de actividad física, adecuado a su edad y a sus necesidades energéticas, incluso, en muchos casos sin medicamento.
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Estadísticas del Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez, indican que en nuestro país el infarto es la primera causa de muerte entre las mujeres mayores de 50 años de edad. El sistema cardiovascular de las mujeres es más susceptible al verse afectado por estrés, aspectos hormonales, al exceso de grasas saturadas y, a determinadas toxinas como el tabaco. Mujeres que fuman y tienen una menopausia prematura aumentan entre dos y tres veces el riesgo de presentar una enfermedad cardiovascular, de acuerdo con estudios a nivel internacional. En el climaterio, los niveles de colesterol deben estar más controlados, porque es en este periodo cuando la producción de estrógenos, que ejercen un papel protector en la salud vascular de la mujer, disminuye. Cerca de los 40 años, las mujeres comienzan a presentar alteraciones menstruales debido a que van perdiendo su capacidad de sintetizar y producir estrógenos. Al llegar la menopausia se produce un descenso en los niveles de estrógenos y la mujer queda expuesta a un riesgo mayor de enfermedades cardiovasculares provocando ataques al corazón o cerebrales. Las mujeres tienen 73% más posibilidades de morir tras un primer infarto que los hombres, por ello se realizan campañas como Salvemos el Corazón de las Mujeres, a fin de concientizar sobre la importancia de acudir al médico a un chequeo cardiovascular antes de los 35 años y, a partir de ese momento, realizarlo periódicamente.
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En su tesis de doctorado, Mario-Ibrahín Gutiérrez Velasco, del Departamento de Ingeniería Eléctrica del Cinvestav, plantea mejoras a la técnica para la rehabilitación y también diseñó un equipo de fisioterapia por ultrasonido que funcionará en investigación y como un equipo comercial de rehabilitación muscular. El equipo ya fue probado en pacientes que pertenecen al Instituto Nacional de Rehabilitación. El investigador señaló que esta terapia usa la energía ultrasónica para producir cambios en los tejidos mediante sus efectos mecánicos y térmicos, se puede aplicar para dolores musculares ligeros y hasta fracturas de hueso o daños musculares severos. La tecnología ultrasónica contenida en este instrumento ayuda a sanar el músculo dañado con choques de calor y una presión sobre él, lo cual propiciará que las fibras musculares recuperen su elasticidad, y en caso de fractura, ayudará a que el hueso suelde en un menor tiempo.
