Aprueban diputados la reforma financiera
* Especiales, Nacional miércoles 11, Sep 2013- Con 383 votos a favor, 63 en contra y 14 abstenciones
- Se facilita el otorgamiento de crédito bancario, pero se fortalecen garantías de pago de adeudos

La Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma financiera que viene a facilitar el crédito y a agilizar el sistema de pagos.
Con 383 votos a favor, 63 en contra y 14 abstenciones, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general el proyecto de reforma financiera que establece medidas para facilitar el otorgamiento de créditos bancarios y al mismo tiempo para fortalecer las garantías de pago de los adeudos.
Sin embargo, los legisladores de las diversas bancadas reservaron un total de 190 artículos para su discusión en lo particular, por lo que discusión iba a prolongarse durante varias horas. El dictamen fue avalado por las bancadas del PRI, PAN, PVEM, Nueva Alianza, así como una mayoría del PRD, y modifica 34 ordenamientos legales.
El legislador panista José Isabel Trejo fundamentó el dictamen de la Comisión de Hacienda al sostener que el paquete de reformas en materia financiera promueve un balance adecuando entre las medidas que estimulan el otorgamiento de crédito y aquellas que fomentan un sistema financiero sólido y estable.
Las 13 iniciativas dictaminadas a favor, dijo, prevén atender la demanda social de ampliar el número de sujetos de crédito con tasas de intereses a bajo costo y más accesibles. Adicionalmente, “en la medida en que los proveedores de crédito en el país cuenten con mejor información crediticia de sus acreditados y puedan reducir los costos de administración y recuperación del crédito, indudablemente esto se verá reflejado en créditos más baratos para los usuarios del sistema financiero”.
Al iniciarse la discusión del dictamen, los grupos parlamentarios reconocieron que los cambios legales no recompondrán el sistema financiero nacional, ni se logrará una reducción de las tasas de crédito por decreto, además de que la flexibilización de éste queda atado a un sistema de garantías, mediante el arraigo de deudores, definido con la figura de “radicación de persona”, así como la imposibilidad de que tengan acceso a sus posesiones, mediante la figura de “retención de bienes”.











