El balance de Mancera
Ramón Zurita Sahagún viernes 13, Sep 2013De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Miguel Ángel Mancera llega a su Primer Informe de Gobierno con una carga pesada, que le significa la confianza depositada por la ciudadanía en julio del año pasado.
La votación alcanzada por el ex procurador de Justicia del Distrito Federal fue histórica, desde que se decidió elegir a la máxima autoridad de la capital del país.
Mancera despertó simpatías en un electorado ávido de rostros nuevos en la política, por lo que pronto fue visto como una carta fuerte de la izquierda para el futuro.
En poco menos de diez meses de gobierno, Mancera decepcionó en algunos círculos, por sus posicionamientos y falta de acción en los terrenos en que ha sido requerido.
Del cielo, el jefe de gobierno capitalino cayó al limbo, en el que se encuentra alejado de los problemas cotidianos y sumido en un búnker del que no quiere salir.
Mucho ha cambiado la percepción ciudadana acerca de su jefe de gobierno, al que ven distante y sin reacción ante los principales problemas que aquejan a la población.
Su equipo de colaboradores dista mucho de ser efectivo y tampoco se muestra disposición alguna para actuar en contra de quienes afectaron o se beneficiaron con los recursos públicos.
En las primeras semanas del gobierno de Mancera surgieron una serie de hoyos financieros que, aparentemente, se quedaron en el olvido, sin actuar en contra de los responsables de esos abusos.
La inseguridad se hace palpable en la ciudad de México, aunque se trata de disfrazar u ocultar.
El asunto del Heaven mostró que el crimen organizado sí se encuentra en la capital del país, aunque se niegue.
Son muchos los asuntos que tiene pendiente el jefe de gobierno, pero Miguel Ángel Mancera hace caso omiso de muchos de los compromisos contraídos durante su campaña y que le redituaron votos al por mayor.
Hoy se ve a la distancia muy lejana, esa efervescencia que despertaba el candidato de la izquierda y que borró del mapa electoral a la priísta Beatriz Paredes y a la candidata de Acción Nacional, Isabel Miranda de Wallace.
Sin embargo, no se considera que le sea difícil a Mancera superar el escollo de su Primer Informe de Gobierno, ya que en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal se cuenta con una mayoría de diputados surgidos de los partidos de izquierda y la oposición tiene pocas cartas que puedan ponerlo en un brete.
VA DE NUEVO
Siguen las movilizaciones en el Distrito Federal en el diálogo de sordos que protagonizan integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y el gobierno, al que se sumó ya el Sindicato Mexicano de Electricistas.
Los profesores consiguieron ya sentarse a dialogar con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, luego de la trifulca en que participaron el miércoles con granaderos del Distrito Federal.
Pero mientras lo hacían los dirigentes, los agremiados continuaron con sus desplazamientos por diversas zonas de la ciudad, marchando por las principales vías de la capital del país, mientras sus aliados del SME se plantaban frente al Senado de la República.
Los maestros siguen pidiendo una reunión con el presidente Peña Nieto, así como la derogación de los artículos 3 y 73, como parte de su negociación.
De acuerdo con lo expresado, se muestran dispuestos a permanecer en su plantón del Zócalo, lo que implicaría la suspensión del tradición al desfile militar del 16 de septiembre o reubicar el mismo hacia otra zona de la ciudad.
La logística del desfile y de la noche del Grito de Independencia lo hace difícil de realizar en otra parte de la ciudad, por lo que hay algunos que ven como alternativa recurrir al sitio original del mismo, en Dolores, Hidalgo, Guanajuato.
En estas circunstancias, los tiempos se acortan y las negociaciones se vuelven más ríspidas.
Sin embargo, no es lo único, ya que en unos días el jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, deberá rendir su Primer Informe de Gobierno en la Asamblea Legislativa del DF.
Es un sitio cercano al lugar en que los maestros mantienen su plantón, por lo que su desplazamiento a la zona es sumamente sencillo, la distancia a recorrer es menos de un kilómetro.
La situación se complica, luego del anuncio del jefe de gobierno de que, al fin, el gobierno del Distrito Federal la policía actuará con responsabilidad para proteger a la ciudadanía.
Pocos son los que confían en que Mancera pueda hacerlo, ya que durante el tiempo que llevan los plantones y movilizaciones de la CNTE, sus policías se han mantenido al margen de bloqueos, sin atender a los reclamos de la población.
Los diputados y senadores fueron obligados a abandonar sus respectivas sedes, luego de que en un primer intento por introducirse a la Cámara de Diputados, los profesores se enfrentaron con los guardias de seguridad de esa parte del Poder Legislativo.
Más adelante, el tradicional Maratón de la Ciudad de México tuvo que cambiar de punto de partida, ya que el Zócalo se mantiene en poder de los militantes de la CNTE.
Ante la indiferencia de las autoridades capitalinas, los maestros han bloqueado Periférico, Circuito Interior, vías de acceso al aeropuerto de la ciudad de México, Reforma, Insurgentes y otras calles y avenidas, cortando el tránsito y afectando a decenas de miles de personas.
Los plantones de la CNTE se han prolongado demasiado y mientras ellos están dispuestos a llevarlos hasta alcanzar sus metas, desde el gobierno no dan señales de encontrar un arreglo que beneficie a ambas partes.











