La pobreza no se mueve
¬ Juan Manuel Magaña lunes 22, Sep 2014Política Spot
Juan Manuel Magaña
Esta vez le tocó a la política contra la pobreza pasar por la revisión de los legisladores y, de entrada, no resistió la menor crítica.
El gobierno tuvo que reconocer ante comisiones de la Cámara de Diputados, con motivo de la glosa del Segundo Informe de gobierno, que el número de pobres se mantiene igual a como lo dejaron los gobiernos panistas, es decir, 53.3 millones.
Entonces, esa política social fue objeto de críticas de diputados del PAN, PRD, Movimiento Ciudadano y el Partido del Trabajo, por la falta de resultados de la Cruzada Nacional contra el Hambre y de Prospera, así como por el uso electoral que se sigue dando a los programas sociales.
Como si no supieran cuánto Vicente Fox y Felipe Calderón pervirtieron también esta cuestión, legisladores del PAN lamentaron que el gobierno federal maquilla cifras de la cruzada contra el hambre e impulsa cambios cosméticos con Prospera.
La panista Martha Leticia Sosa acusó que se dan cifra triunfalistas que difícilmente concuerdan con la realidad, y puso en duda que los 3.1 millones de mexicanos que, se asegura, ya comen mejor al ser atendidos por la cruzada, ya eran parte de otros programas.
También dijo que ese esquema, como la transformación de Oportunidades a Prospera, parece ser simple cambio cosmético para solo aglutinar programas sociales ya existentes.
En el caso de Prospera el gobierno reconoció que es insuficiente una transferencia económica para romper el círculo intergeneracional de la pobreza, por lo cual se hace un replanteamiento.
Pero Leticia López Landero, otra panista, insistió que conforme al diseño de la Cruzada Nacional contra el Hambre, al parecer únicamente se trata de focalizar 70 programas existentes con probables fines electorales en municipios densamente poblados.
La legisladora subrayó la falta de interés gubernamental por atender comunidades indígenas y se recordó la desafortunada declaración de que Oportunidades ya no atenderá familias con más de tres hijos.
El perredista Carlos de Jesús Alejandro cuestionó la falta de atención del gobierno para las 183 comunidades de 13 municipios de La Montaña alta de Guerrero que fueron afectados hace un año por las tormentas “Ingrid” y “Manuel”. ¿Por qué tanta indolencia? ¿Por qué las tardías respuestas? ¿Por qué tanta apatía y desidia?, fueron las interrogantes.
A su vez el diputado Arturo López Cándido, del PT, criticó que aunque la Cruzada Nacional contra el hambre tiene un presupuesto de aproximadamente 200 mil millones de pesos para este año, durante los primeros dos años del actual gobierno no se han logrado los avances que se propusieron.
Ciertamente, dentro de la numeralia desplegada como si se tratara de los grandes resultados de otro año de trabajo, se destacó que “en desarrollo social hay más de 3 millones de beneficiados con la Cruzada Nacional contra el Hambre, es decir, cero hambre a partir de una alimentación y nutrición adecuada de los mexicanos en extrema pobreza y con carencia alimentaria severa”.
Pero ahora, por fin, se llegó al dato duro, oficial, de que el número de pobres se mantiene igual a como lo dejaron los gobiernos panistas, es decir, 53.3 millones.
Aquí dijimos hace unas semanas que muchas cifras se pueden subrayar para tratar de explicar a este país, pero que en realidad, todo se reduce a que dos o tres temas son los dominantes en la expectativa nacional: economía, violencia e inseguridad, y la pobreza que distingue al país. En esas tres variables, México ha medido su avance, pero más bien involución en los últimos 30 años. Y, por lo visto, ahí no se ha “movido a México”.