El gran dilema, ¿militares o policías?
Guillermina Gómora Ordóñez martes 5, Dic 2017Caleidoscopio
Guillermina Gómora Ordóñez
Llegó al Senado la minuta de la Ley de Seguridad Interior, procedente de la Cámara de Diputados y todo indica que este martes saldrán chispas de las comisiones de Marina, Defensa Nacional, Gobernación y Estudios Legislativos que deberán dictaminar y decidir si la turnan al pleno.
Se trata del penúltimo paso antes de la aprobación definitiva para que se reglamente la participación de las fuerzas armadas en labores de seguridad pública.
Un camino que se antoja largo y sinuoso luego de la polémica que generó su discusión y aprobación en la Cámara baja.
El marco normativo que busca regular la actuación de la las fuerzas armadas contra la inseguridad que tiene postrada a la nación y con la cual se espera lograr la tranquilidad de los mexicanos, enfrenta serios obstáculos que podrían llevar el debate hasta la Suprema Corte de Justicia, como han amagado la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y diversos grupos de la sociedad civil.
Uno de ellos, el colectivo #Seguridadsinguerra, integrado por más de 150 organizaciones, familias de víctimas y académicos, y que desde su plataforma digital convoca a enviar un correo a los 128 senadores para exhortarlos a que “voten en contra de la militarización del país”. Advierten que “La seguridad pública debe estar a cargo de instituciones civiles, no militares”.
En el “Posicionamiento sobre las iniciativas en materia de Seguridad Interior”, el colectivo sostiene: “Seguir dependiendo de las Fuerzas Armadas no va a fortalecer nuestras instituciones de seguridad pública; coadyuvará al desgaste de dos de las instituciones más importantes del país: el Ejército y la Marina; perpetuará la grave crisis institucional por la que atravesamos, y sólo contribuirá a que la Federación y los estados sigan incumpliendo con lo estipulado en la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el SIDEPOL y los acuerdos del Consejo Nacional”.
María Elena Morera, presidenta de Causa en Común, coloca el dedo en la llaga, al denunciar cómo alcaldes y gobernadores evaden su responsabilidad de garantizar la seguridad a los ciudadanos y se tiran a la hamaca, endilgando a las fuerzas armadas y a la Policía Federal su compromiso de mantener la paz social.
Mandatarios cínicos e irresponsables que no asumen el costo político de su negligencia para fortalecer a las policías estatales o municipales, empezando por su depuración, capacitación e incluso mejoras salariales a fin de que no terminen sirviendo a los grupos criminales o del narcotráfico.
Una consecuencia de lo anterior son los preocupantes resultados del Índice de Desarrollo Policial 2017 (INDEPOL), que califica cinco aspectos de las corporaciones policiacas en el país a fin de medir niveles de cumplimiento a la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública y donde en una escala negativa de -100 al 0, donde cero es la máxima calificación, la Carrera Policial se ubica en -23, Certificación -57; Seguridad Social -52; Régimen Disciplinario -46 y Profesionalización-28. Lo que da un promedio nacional del Indepol de -41.
Sin duda, un indicador pavoroso que confirma cómo los grupos policiacos están ausentes, mal preparados, coludidos con el crimen o en tareas que nada tienen que ver con la seguridad.
En 2006, el presidente Felipe Calderón sacó al Ejército de los cuarteles para desempeñar tareas de policía, sin embargo, no se han logrado disminuir los niveles de violencia.
Convendría revisar, entonces, si la nueva norma realmente beneficiará a las Fuerzas Armadas o nos aleja de la posibilidad real de formar a los policías que necesita un México agraviado por la delincuencia y gobernantes corruptos.
VERICUENTOS
Cierran filas en el PRI
En el PRI funcionó la operación cicatriz y durante el registro a la precandidatura del partido a la Presidencia de México, se mostró el músculo en apoyo de José Antonio Meade, incluso el líder de los senadores priístas, Emilio Gamboa, reiteró que Meade abanderará las causas de un partido que propone y enfrenta con soluciones los problemas más sensibles de los mexicanos. ¡Vientos!
Cargada Azteca
Vaya calambre del PRD a su aliado del PAN, Ricardo Anaya; dirigentes del CEN del PRD, encabezados por Alejandra Barrales, gobernadores y dirigentes de las diversas expresiones de ese instituto político, le dieron el espaldarazo al jefe de Gobierno de la CDMX, Miguel Ángel Mancera, y coincidieron en que este último debiera encabezar la candidatura del Frente Ciudadano por México. ¡Órale! Ese apoyo sí se ve.
Candidaturas por puntos
Y mientras se registra la cargada azteca, el Galileo Fernando Belaunzarán, impulsa con otros seguidores del Frente Ciudadano por México, un método “meritocrático” en 3 etapas: entrevista, debates, con focus group y encuestas espejo, para elegir a sus candidatos a cargos de representación popular, incluida la Presidencia de la República. Afirma que este método es creíble. ¿Y la voluntad ciudadana y la apertura democrática? ¡Ups!