Activistas políticos cínicos
Augusto Corro miércoles 18, Abr 2018Punto por punto
Augusto Corro
Sin autoridad moral los ex presidentes Vicente Fox y Felipe Calderón decidieron convertirse en activistas políticos en esta temporada electoral.
Cada uno, a su manera, defiende sus intereses. Claro, hacen bien. Mal harían no aprovechar su condición de cínicos, sin autoridad moral, en un México desmemoriado. O generoso.
En el caso de Fox es de pena ajena pues ataca a todo a todo aquel que se le ponga enfrente: desde López Obrador hasta Trump. El defensor de la legalización de la mariguana llegó al poder apoyado por el PAN.
Luego cambió su estrategia política y traicionó a la candidata panista Josefina Vázquez Mota para pronunciarse a favor de Enrique Peña Nieto.
En el presente, su gallo para la grande es elcandidato priista José Antonio Meade Kuribreña. Fox es, pues, como una veleta movida por el viento. Sus puntos de vista políticos no influyen en el ánimo de nadie.
Su capital político que lo llevó a Los Pinos terminó hecho polvo. No hizo el cambio esperado por los mexicanos. Marta Sahagún, la verdadera autoridad detrás de Fox, no tuvo la capacidad necesaria para gobernar un país tan conflictivo como México.
Eso sí, llegaron pobres a la presidencia de la República, peros los hijos de la “señora presidenta” tuvieron la oportunidad de volverse ricos.
Fox donde se pare es recibido con desprecio. No falta el ciudadano que le reclama sobre su deshonesta actitud de recibir una pensión vitalicia inmerecida. En la misma situación de cinismo se encuentra el exmandatario Felipe Calderón Hinojosa que apoya a su esposa Margarita Zavala de Calderón, candidata presidencial independiente.
El michoacano es uno de los principales factores de divisionismo en el Partido Acción Nacional (PAN). Su incontenible ambición por el poder echó a pelear a la cúpula blanquiazul. Los resultados ya los conocemos.
Por un lado los seguidores del “joven maravilla”, Ricardo Anaya, y por otro lado los “calderonistas” que deben ser muy pocos en las filas del blanquiazul.
El conflicto político se agudizó a tal grado que Margarita renunció al partido donde militó muchos años, porque no la tomaban en cuenta. Ni siquiera le permitieron ser diputada plurinominal. Ante esas condiciones, la señora Calderón es ahora una flamante candidata presidencial independiente.
Claro, el impresentable Felipe Calderón, que ya saboreó las mieles del poder, quiere que su esposa gane el 1 de julio para que la familia regrese al paraíso de Los Pinos.
Como ven, en la contienda electoral hay dos candidatos de formación panista: Anaya, que pugna por el triunfo igual que la señora de Calderón. Se podría decir que en el escenario político hay dos panistas presidenciables, ¿quién es el bueno?
El exmandatario Calderón declaró que Ricardo Anaya es quien debería declinar a favor de Margarita Zavala ya que es la única que puede seguir creciendo (políticamente). ¿Si usted fuera panista por quién votaría?
No olvide que Margarita Zavala de Calderón estuvo seis años en Los Pinos al lado de su esposo Felipe que inició la guerra fallida contra la delincuencia organizada que sembró de miles de cadáveres, desaparecidos, huérfanos y viudas en todo el territorio mexicano.
A propósito del divisionismo en el PAN, ¿algún día se conocerá el número de blanquiazules que abandonaron a su partido debido a los pleitos internos gracias a Calderón?
Adiós esperado
Los perredistas morelenses se encuentran muy tristes. El candidato morenista, Cuauhtémoc Blanco se perfila para ganar la gubernatura de Morelos. La familia del mandatario estatal, Graco Ramírez, ya hace maletas para emprender la retirada o fuga. Las actividades del perredista casi son nulas. Se concreta a resolver lo fácil e inmediato.
El desgobierno de Graco Ramírez llenó de optimismo a la sociedad morelense. Sus promesas de campaña no dejaban duda alguna de que sería un buen mandatario.
Pero no pasó mucho tiempo y cayó en el error de los perredistas, que tiene al partido en la lona, alejarse de la gente. El gobernador se olvidó de sus compromisos y la entidad se encuentra en los principales lugares de inseguridad. A su ineptitud para combatir la delincuencia, se sumó el nepotismo. A su hijo adoptivo, Rodrigo Gayosso lo hizo líder estatal del PRD, y después candidato a la gubernatura, sin esperanzas de ganar.
Ante la probabilidad de la victoria de Cuauhtémoc Blanco el perredista Graco tendrá que rendir cuentas de su nefasto paso por el gobierno estatal. Se auguran vientos de tempestad en Morelos.