De la campaña a la sociedad dividida
Arturo Ríos Ruiz martes 26, Mar 2019Centro..!
Arturo Ríos Ruiz
- Entre rechiflas, chairos, fifís, partidos y Morena
La división social es un hecho irrebatible y no se inició con el resultado electoral del 1º de julio pasado, el hilo se rompió poco a poco, cuando comenzaron los apodos, primero fue Prian que marcó al grupo enemigo que se hizo común, igual surgieron los chairos y los fifís. El fondo, los morenos contra ricos, esa es la esencia.
Ahí está, chairos contra fifìs, continuó después de la contienda y así está marcada la sociedad; otra particularidad, “Los buenos” contra “Los malos, así se transmite el leguaje en las redes sociales y hasta en la voz del Presidente: “La prensa fifí”, la que lo señala, la “buena”, lo defiende. Lo que haga, está bien, la otra miente.
Este fenómeno ha cundido en la sociedad, compadres, amigos y hasta familiares se han divido, la parte “buena” no acepta críticas, lo interpretan como “ardor” y así lo señalan, “acéptenlo” es otra palabra utilizada, en alusión a que no se admite el triunfo de AMLO.
Para empezar, no hay gobierno en el mundo que sea aceptado en toda su totalidad, todos aciertan y todos fallan y en la mayoría, las faltas son aberrantes. Aquí hay de las dos. Son públicas.
A los “buenos” les hace falta entender que siempre habrá oposición y argumentos ante lo que no está bien en el ejercicio de gobierno, incluso a juicio de los “malos” y muchas veces hasta de todos, pero los “malos” lo justifican.
Todo lo anterior por la rechifla en la inauguración del nuevo estadio de los Diablos Rojos, el equipo de beisbol del adinerado Alfredo Harp Helú que fue co dueño de Banamex y sumamente rico. Entra en el calificativo de fifí.
Se presentó la rechifla, ante del discurso inaugural del Presidente e hizo un espacio para llamar a sus detractores “porra fifí”, marcando la diferencia social que tanto daño hace al país.
El 31 de mayo de 1986, en el evento inaugural del XIII Campeonato Mundial de Fútbol México 1986, el presidente Miguel de La Madrid Hurtado fue abucheado por el público con rechiflas y altisonantes en el estadio Azteca, cuya transmisión fue a nivel mundial. El mandatario, aguantó vara.
Con todo respeto a la investidura presidencial del mandatario, no se le debe olvidar que gobierna para todos, no sólo para los que le aplauden. Hasta para la parte social que para él no son “sabios” y lo demuestran a su manera, estilada en los estadios deportivos, que es el deshago.