Falso nacionalismo
Alberto Vieyra G. lunes 20, Sep 2021De pe a pa
Alberto Vieyra G.
Pareciera que el discurso pronunciado por Andrés Manuel López Obrador durante el desfile militar del pasado 16 de septiembre se lo hizo la siempre lépera Paquita la del Barrio, pero, no, sino que al parecer la perorata le fue encargada al burócrata que cobra como director del Fondo de Cultura Económica, Paco Ignacio Taibo II, quien incluyó un dato histórico que debió fascinar a su jefe, experto en el arte de la victimización y del falso nacionalismo. En el discurso, AMLO revelaría 32 motes que el vulgo de aquella época aplicaba al Padre de la Patria, Miguel Gregorio Antonio Ignacio Hidalgo y Costilla Gallaga Mandarte y Villaseñor. Los motes en cuestión son:
Endurecida alma, escolástico sombrío, monstruo, taimado, corazón fementido, rencoroso, padre de gentes feroces, Cura Sila, entrañas sin entrañas, villano, hipócrita, refinado, tiráno de tu tierra, pachá, lo-cura, imprudentísimo bachiller, caco, malo, malísimo, perversísimo, ignorantísimo bachiller Costilla, excelentísimo pícaro, homicida, execrable majadero, badulaque, borriquísimo, primogénito de Satanás, malditísimo ladrón, liberticida, insecto venenoso, energúmeno, archiloco americano y le faltó uno, zorro.
¿Qué nos dice semejante maravillosa pieza oratoria de AMLO?
El cura Hidalgo no era chairo, era un poderoso miembro de la alta sociedad conocida como mestizo, hijo de españoles e indígenas, pero AMLO lo hace pasar como la víctima de un sistema político aplastante que imperaba en aquella época. AMLO es experto en la victimización y partidario de que los héroes deben ser de un trasnochado nacionalismo de la era priísta impecables y pulcros. No, eso es imposible. Los héroes son personas de carne y hueso, cuyas vidas están llenas de luces y sombras. Todos los seres humanos, con excepción de Jesucristo tenemos 7 defectos y a los héroes se les tiene que presentar con todas sus virtudes y todos sus defectos. No se les puede victimizar porque ello provoca el divisionismo de los pueblos. AMLO nos habla de un falso y perverso nacionalismo divisionista.
¿Por qué no habló AMLO del odio que los españoles propinaron al cura Hidalgo quien, en la Alhóndiga de Granaditas en Guanajuato, ordenó que fueran asesinados decenas de hispanófilos ricos, lo que le valió que le hicieran una historia negra?
Cuando menos tres escritores le hicieron esa estela negra al cura: el primero de ellos sería Lucas Alamán, quien tenía 17 años cuando ocurrieron los sucesos en Guanajuato. La madre de éste había pedido en una carta al cura que le perdonará la vida a un hacendado español, lo cual no ocurrió y daría lugar a que Lucas Alamán en su libro sobre la historia de México se comiera vivo a el libertador. También otro autor guanajuatense escribiría un libro negro sobre el cura que solamente existe en los acervos de la Universidad de Tamaulipas. Y el último gran odiador del cura Hidalgo es Paco Ignacio Taibo II en uno de sus libros sobre el cura Hidalgo, el autor de la perorata de AMLO El próximo 27 de septiembre se cumplirán dos siglos de la entrada triunfal del Ejército Trigarante a la Ciudad de México y la consumación de la Independencia nacional a cargo de Vicente Guerrero Saldaña y Agustín de Iturbide. Es casi seguro, que AMLO recurrirá nuevamente a la victimización de otro de los héroes. Desdeñará el papel de Agustín de Iturbide y le dará todo el crédito a Vicente Guerrero, de quien sus detractores han dicho que era un hombre inculto, mal hablado y que ni siquiera sabía firmar y escribir. Falso de toda falsedad, Guerrero era un masón con una extraordinaria sabiduría, pero a Vicente Guerrero ya lo victimizó, en la era priísta, Luis Echeverría Álvarez.
Iturbide resulta ser el gran héroe, pero solamente para la Iglesia católica y la derecha fifí española. Así que nuevos discursos de victimización de los héroes para dividir a México nos esperan a cargo de AMLO.