La “basura” espacial
Luis Muñoz lunes 13, Jun 2011Segunda vuelta
Luis Muñoz
Hace una semana se llevó a cabo en Madrid, España, la Conferencia Europea sobre Vigilancia Espacial, a la que acudieron 180 expertos de diversas naciones. Es un asunto que preocupa a todos porque, como dijo un experto: “El espacio es un bien común”.
El propósito de la reunión, que se celebró del 7 al 9 de junio de este 2011, es porque los satélites están amenazados por más de 700,000 fragmentos de basura espacial y para evitar una colisión es necesario conocer y monitorizar su posición con ayuda de radares y telescopios.
Por ello, el sistema de Conocimiento del Medio Espacial (SSA) de la ESA está diseñando un mecanismo capaz de clasificar los desechos y de alertar a los operadores cuando sea necesario realizar una maniobra de evasión. Este programa, que actualmente se encuentra en su fase preliminar, tiene como objetivo desarrollar e implementar un sistema de alerta temprana en tres áreas: colisiones en órbita, impacto de objetos naturales contra la Tierra y meteorología espacial.
En 2010 ya se hablaba de que la Agencia Espacial Europea desarrollaría un nuevo sistema radar para mejorar la seguridad de las misiones espaciales, dentro del programa de Conocimiento del Medio Espacial. Este radar será capaz de detectar objetos en órbita terrestre que puedan suponer un peligro para los satélites. Gracias a esta nueva tecnología, la exploración del espacio será más segura.
La Agencia Espacial Europea y la compañía española Indra Espacio S.A. firmaron un contrato para el diseño del futuro radar de vigilancia del programa SSA y para el desarrollo de un prototipo funcional. El contrato marca un hito en el Programa Preparatorio del sistema SSA (SSA-PP). El contrato contempla una inversión de 4.7 millones de Euros y garantizará el liderazgo tecnológico de la industria espacial europea.
Además de la gestión del proyecto, Indra Espacio será responsable del diseño y del desarrollo del transmisor del radar. La construcción del receptor se subcontratará al Instituto Fraunhofer de Física de Alta Frecuencia y de Tecnología Radar, con sede en Wachtberg, Alemania.
El radar generará información precisa y actualizada sobre la posición de los objetos en órbita terrestre. El sistema también utilizará varios telescopios ópticos y una red de centros de procesado de datos para poder estudiar en detalle las diferentes regiones del entorno de nuestro Planeta.
Si bien la tecnología radar es muy efectiva para observar objetos en órbita baja o en órbitas de alta elipticidad, los sistemas ópticos presentan mejores prestaciones para la vigilancia de las órbitas medias o geoestacionarias.
El Programa Preparatorio del sistema SSA fue aprobado en la reunión del Consejo Ministerial de la ESA en Noviembre de 2008. A través del programa SSA, la ESA desarrollará la capacidad de analizar y evaluar riesgos en el entorno de la Tierra, derivados de la colisión entre objetos en órbita, de la meteorología espacial o de la proximidad de un objeto natural cuya órbita atraviese la de la Tierra.
Se sabe, no de ahora, sino de hace tiempo, que los deshechos espaciales que orbitan nuestro planeta se han convertido en un problema latente. La basura extraterrestre puede causar daños a las misiones espaciales tripuladas o no tripuladas, los satélites o incluso a laEstación Espacial Internacional.
¿Cómo acabar con este problema? Con el pasar del tiempo ha habido algunas propuestas, pero esta es de las mejores: la agencia espacial japonesa se ha aliado con un productor de redes de pesca para crear una red espacial de alta tecnología que capture todo el material inútil que orbita nuestro planeta.
La colaboración se dará entre la JAXA (Japan’s Aerospace Exploration Agency) y la compañía Nitto Seimo Co, responsable de la primera red ultra-resistente sin nudos. Lo que pretenden crear es una red hecha de hilo especial de 1mm de espesor, capaz de resistir cambios extremos de temperatura y grandes fuerzas.
La red será lanzada junto con un satélite y cuando sea desplegada cubrirá varios kilómetros de espacio. Después comenzará a orbitar la Tierra recolectando partes de motores, herramientas y satélites abandonados.
Ya ha habido proyectos parecidos, por ejemplo DARPA (la Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados de Defensa)había pensado en lanzar cientos de vehículos espaciales no tripulados equipados con redes. Estos harían que la basura entrara en nuestra atmósfera, quemándose o cayendo sobre el Pacífico sur, sin hacer daño a nadie.
Se espera que la red japonesa sea mucho más grande que las propuestas por DARPA y que —a diferencia de estas— sólo se pueda usar una vez. El sistema no necesitará combustible una vez que esté en el espacio, ya que después de recolectar la basura entrará de nuevo a la atmósfera, quemando la red y todo lo que haya recolectado. Hasta el momento, la mayoría de las propuestas para deshacerse de la basura espacial apuntan a que reingrese a la atmósfera. Mucha gente aboga por la reutilización del deshecho espacial, pero las dificultades de reciclarlo en el espacio o de traerlo de vuelta a la Tierra sin que se dañe son muchas.
Las iniciativas para la limpieza del espacio cercano parecen muy buenas pero la proliferación de nuevas agencias espaciales y de muchos proyectos de exploración fuera del planeta hacen preguntarse ¿qué se está haciendo para ya no crear más basura espacial?
¿QUIÉN GENERA ESA BASURA?
Según se desprende de uno de los informes de la Oficina del Programa de la NASA de Restos Orbitales (NASA Orbital Debris Program Office), la basura espacial aumentó casi un 20% en 2009, con respecto a los niveles del año anterior. Hoy en día,
hay más de 700,000 fragmentos de escombros orbitando alrededor de la Tierra, desde cohetes y lanzadores hasta restos de estos aparatos.
Hace dos años sólo se hablaba de 15, 090 cuerpos espaciales. Y la NASA citaba a Rusia como el país que mayor cantidad de basura desecha al espacio, con un total de 5,653 objetos; seguida de Estados Unidos con 4,812, y de China con 3,144.
Mientras, la Agencia Espacial Europea (ESA) es la entidad con menos basura espacial, con tan sólo con 85 cuerpos, de los que concretamente 41 proceden de explosiones y 44 son cohetes, cuerpos y demás escombros.
Después, hay países que independientemente de la agencia espacial a la que pertenezcan, también envían y “tiran a la órbita terrestre” aparatos espaciales. Así, sería el caso de los 469 de Francia, los 187 que tiene Japón, o los 171 de la India.
Trimestralmente, la NASA mide el volumen de objetos que orbitan alrededor de la Tierra. De esta forma, durante el primer semestre de 2009, desde el 1 de enero hasta el 31 de marzo, rondaban alrededor de la Tierra 13,897 objetos. Posteriormente, hasta el 30 de junio esta cifra aumentó a los 14,863 y finalmente, de julio a septiembre hasta los 14,967, alcanzando así los 15,090 a finales de diciembre.
El año pasado por estas fechas, la NASA detectó por primera vez un estancamiento en el aumento de basura espacial, con respecto a los niveles del año anterior, con un total de 12,581 objetos artificiales insertados en la órbita terrestre.
MÉXICO Y SUS 7 SATÉLITES
México, que ya cuenta con su Agencia Espacial, de reciente creación y que opera con un presupuesto de 10 millones de pesos, tiene en órbita 7 satélites, seis para fines de telecomunicaciones fabricados por firmas satelitales internacionales, que conforman los sistemas Morelos, Solidaridad y Satmex y uno para fines de investigación fabricado por la Universidad Nacional Autónoma de México.