El México de AMLO
Freddy Sánchez martes 6, Dic 2022Precios y desprecios
Freddy Sánchez
Un gran mérito (demérito dicen sus críticos), tiene en su haber el presidente Andrés Manuel López Obrador: La unificación de un México que lo admira, respeta y “glorifica”.
En contraste con ese otro país, integrado por los que no lo quieren porque no esperan nada bueno de él y por lo mismo no lo respetan.
En ese sentido, Andrés Manuel recientemente deploró que se ofenda la figura presidencial.
Algo, obviamente, lamentable que suceda, pero no es exclusivo de hoy.
Díaz Ordaz y Echeverría “se llevaron a la tumba” la repulsa social como “siniestros ejecutores” de la matanza estudiantil del 68.
En el caso de López Portillo, hasta la fecha catalogado por sus malquerientes como un “nefasto populista”, entre los agravios que recibió fue el escupitajo de una señora. Algo menos rudo que la “famosa pedrada” universitaria contra LEA, pero igualmente oprobioso.
De la Madrid, al que se le atribuye el gran fiasco de la “renovación Moral de la Sociedad”, además suele ser considerado como “el campeón de las devaluaciones del peso”.
Carlos Salinas de Gortari (“el padre de la corrupción moderna”, según Andrés Manuel), junto con Zedillo, Fox, Calderón y Peña, en esta administración gubernamental y las pasadas han recibido calificativos de reproche y desprecio una y otra vez, en particular, desde el Palacio Nacional.
Así las cosas, podría decirse que ofender y criticar al Presidente en turno y los ex presidentes se convirtió en una especie de deporte nacional.
Aunque, justo es decir que para el jefe del Ejecutivo si bien no todo son loas y expresiones de apoyo (ante las cuantiosas maledicencias en su contra de un sinnúmero de habitantes de México), “el coro” de las alabanzas suena fuerte y claro.
Ahora que tratándose de comparar cuántos están de un lado y del otro entre los que aman y los que odian al Presidente, las cuentas oficiales como “botón de muerta” se apoyan en lo que sucedió en las dos marchas ciudadanas recientes.
Una para defender al INE y la otra en apoyo a AMLO. Ésta última numéricamente superior por lo que la otra recibió el menosprecio del Secretario de Gobernación, Adán Augusto López, considerándola “una caricatura”, en tanto que el Presidente la calificó de un “striptís del conservadurismo”.
Así que frente a las interpretaciones que cada quien le quiera dar a lo que se habla para alabar o denigrar al presidente y a sus opositores y críticos existen hechos que no pueden ser ignorados. Eh aquí varios ejemplos: Para darle a Andrés Manuel la presidencia acudieron a las urnas 30 millones de personas que lo hicieron ganar, en las elecciones intermedias Morena tuvo 20 millones y lo que se convirtió en una ratificación y no revocación del mandato del jefe del ejecutivo reunió a 15 millones de “amlovers”.
O sea que el millón doscientos mil de la marcha reciente en solidaridad al gobierno de la “Cuarta Transformación” es un número muy por debajo de lo que se espera que represente la concurrencia en las urnas cuando llegue el momento de elegir al sucesor del “dueño” de Palacio Nacional.
En ese aspecto, es de mencionar que el Presidente habrá de contar con el apoyo de 27 millones de personas que reciben beneficios de los programas sociales que otorga su gobierno a una parte del país. Algo que, por supuesto, los opositores no ignoran ni pueden subestimar, sino por el contrario contar con que Morena para continuar en la presidencia, tendrá el más amplio apoyo de ese grupo de habitantes que aprueba a López Obrador, incondicionalmente.
De tal suerte que los que están hartos de su gobierno y lo repudian, en 2024 se tendrán que “ver las caras” con los que han dicho y reiterado que “es un honor estar con López Obrador”. O sea: el México de AMLO.