Se niegan a dialogar con Norma Piña. “Alito”: consulta a la cúpula
Eleazar Flores miércoles 10, Jul 2024Espacio Electoral
Eleazar Flores
QUÉ RARO-. Tanto el mandatario Andrés Manuel López Obrador como su sucesora, Claudia Sheinbaum, se negaron a hablar con la presidenta de la Suprema Corte, Norma Piña, no obstante que la jurista argumentó su petición con razonamientos sólidos y fundados.
Confirmándose la óptica mediática en el sentido de que Sheinbaum será una copia al carbón de quien le quedan dos largos meses y diez días de gestión, ayer coincidieron, una vez más, en la negativa al diálogo con Norma Lucía Piña Hernández, paso que sería positivo a juicio de especialistas del derecho, dentro y fuera de las instancias académica y oficial.
Con palabras más, palabras menos, y lenguajes distintivos del tabasqueño y su sucesora, lo que cuenta es que literalmente le CERRARON LA PUERTA a la presidenta de uno de los TRES PODERES del país, excluido desde hace un año, seis meses y diez días para asistir -como eran los protocolos cívicos de antaño-, a los eventos cívicos, lo que se ignora, pero nadie cuestiona al padre de la cuarta transformación, tan amante del diálogo.
Y como la doble negativa presidencial, vendrán más coincidencias entre él y ella, al tiempo.
LAS BASES NI LO CONOCÍAN-. Cuando se cree que quien grita más tiene la razón no es así y eso es lo que hizo (M)ALITO el domingo en su 24 asamblea nacional, evento tan desaseado que su esbirro Manuel Añorve empujó a la Secretaria General Viggiano, quitándole el segundo lugar del presídium. Incluso el campechano tuvo que llamarla para no abandonar el lugar.
Esta vigésima cuarta asamblea nacional tricolor fue muy diferente a LA 14 —así la identificaron—, celebrada en Querétaro con Luis Donaldo Colosio como presidente y que como borracho, en transición a cantinero, me responsabilizó el jefe ¿CUBRIR BIEN EH? el evento, advirtió y… a cumplir.
Pero el tema es el papel ¿PROTAGÓNICO? del campechano, quien habrá que reconocerle su militancia juvenil y madura en el tricolor estatal, pasando de la CNOP al MJR hasta llegar a la presidencia nacional, pero en su candidatura a gobernador las bases quedaron fuera.
Su candidatura a la gubernatura de Campeche NO FUE CONSULTADA A LAS BASES, fue una auténtica CONSULTA A LA CÚPULA -o imposición como le guste-, que hace nueve años la encabezaba, al típico lenguaje de entonces, el PRIMER PRIISTA DEL PAÍS, un tal Enrique Peña Nieto, originario de Atlacomulco, cuyo capital político y de su partido se encuentran donde usted ya sabe.
Pues el tal (M)Alito —destacado empresarios de medios en su entidad— en su larga carrera partidista, aprendida con Roberto Madrazo y desaprendida con Beatriz Paredes, en cuyas presidencias colaboró, parece ser que podrá disfrutar más que del cargo, de las millonarias prerrogativas por casi dos lustros.











