Cabaret: Una historia que te hará sonreír y llorar
Espectáculos, Teatro viernes 29, Nov 2024
Se presenta en el Teatro de los Insurgentes
El Teatro de los Insurgentes de la Ciudad de México se ha convertido en el escenario perfecto para una puesta en escena que se ha robado el corazón del público: Cabaret, el musical. Esta obra, protagonizada por la talentosa Itatí Cantoral, ha elevado los estándares de este formato de teatro en México, acompañada también de Flavio Medina y Majo Pérez, quienes ofrecieron algunos detalles en entrevista para DIARIO IMAGEN.
Cabaret es una obra ambientada en Berlín de los años 30, en plena época de decadencia y cambio social. La historia sigue a Sally Bowles, una cantante inglesa interpretada por Itatí Cantoral, quien se encuentra con el escritor estadounidense Cliff Bradshaw en el legendario Kit Kat Club. Bajo la dirección de Mauricio García Lozano, esta producción combina música en vivo, coreografías vibrantes y una narrativa que sigue resonando con el público actual.
Previo a la función especial para celebrar sus 200 representaciones, nos metimos en las entrañas de esta puesta en escena, donde Flavio Medina, que se recientemente se integró al elenco como EMCEE, nos contó “es la primera vez que cumplo 200 funciones dando solo siete, porque llegué apenas a este elenco, pro obviamente estoy contento, emocionado, y sobre todo nervioso, porque cuando acabas de entrar no dimensionas, te da miedo, quieres que todo salga bien. Pero estoy encantado de integrarme, al igual que Itatí, hace 20 años hice la obra con el personaje de Herr Ludwig, y ahora vengo a hacer al maestro de ceremonias EMCEE, que es maravilloso”.
A esto añade que ·es una delicia interpretarlo, porque es un ser, un viajero en el tiempo, porque la obra se desarrolla en 1930 y él es un hombre adelantado a su época, dentro de su discurso está la libertad, el amor, pero también la responsabilidad social y política, es el hilo conductor de la historia, lleva al público de la mano dentro de este cabaret”.
Al desarrollarse la obra en un periodo de postguerra, con la economía en debacle, asegura que, se presta mucho para reflexionar, sobre lo que hemos aprendido y no de la historia “pareciera que no hemos aprendido mucho. Estos cabarets eran lugares para expresar libertad, pero también un lugar donde todos los extranjeros y exiliados acudían para conseguir lo prohibido. La obra te invita a pensar como era esa decadencia, es algo muy potente, actual, por eso es tan importante y el público la recibe muy bien”.
La obra tiene denuncia, contexto político, pero al final es una invitación a vivir “en la obra se dice, hay muchos problemas, pero también una necesidad de seguir amando, siendo libres”, a lo que Ignacio Pereda, que es parte del ensamble y da vida a un prostituto agregó “la gente se podrá identificar con alguno de los personajes, los cabareteros vendemos esta ilusión, este cariños, luz, sexo, y eso es muy actual, la gente sigue pagando la caricia, y eso es bonito si lo haces desde un lugar consciente y sano. Entonces si te da mucho para pensar esta obra”.
El teatro es sanador: Majo Pérez
A su vez Majo Pérez que en esta ocasión alterna interpretando a varios personajes como el propio EMCEE y Sally Bowles, nos platicó “es muy emocionante poder llegar un proyecto tan exitoso como este, haciendo varios personajes, que es algo que ya vengo haciendo desde otras obras como Mentiras, que en su momento me dio muchas satisfacciones también. En esta ocasión voy brincando en el Cabaret de un personaje como EMCEE que es un tanto andrógino, hasta una Sally Bowles, que también es un personaje hermoso”.
Al contar con características muy diferentes, nos relata que “estos personajes tienen cada uno lo suyo, no me ha sido complicado ir alternando, porque de algún modo ya me mentalizo en cada día que me toca interpretar a cada uno, domino el texto y sé perfecto cual es le mensaje de cada quien, Más bien es una experiencia muy rica, porque puedo disfrutar de este Cabaret desde dos ángulos diferentes, por un lado el presentador extrovertido, potente, y por otro Sally que tiene unos agridulces muy marcados”.
Asimismo, asegura que Cabaret y el teatro, las artes en general deben ser sanadoras “en mi caso lo ha sido, creo que es sanador tanto para los que se paran en el escenario, como para los que vienen como espectadores. Siempre te llevas algo, un mensaje, una experiencia y en el caso de Cabaret hay mucho que ver, te vas a reír, vas a cantar, lo vas a disfrutar, pero también te vas a conmover, realmente es una obra muy completa”.
En su caso, loque más disfruta es cantar los icónicos temas del espectáculo “es que son canciones muy hermosas, tienen un buen grado de complejidad y meterlas en esta historia es orgánico, suman a lo que sucede en el escenario, estoy enamorada de cada una de las canciones”.
Durante la charla, pudimos ser testigos del backstage de la obra, donde se vio a una Itatí Cantoral, versátil y emotiva, practicando minutos antes de saltar al escenario para entregar una actuación extraordinaria como Sally Bowles. Posteriormente, su presencia en el escenario fue imponente, y cada número musical es una experiencia inolvidable. La escenografía, el diseño de iluminación y el vestuario crean una atmósfera envolvente que transporta a los espectadores a un auténtico cabaret de los años 30.
Con más de 200 representaciones, la obra no solo destaca por su calidad artística, sino también por su mensaje universal sobre la libertad y la tolerancia en tiempos difíciles. Aunque se sitúa en una época pasada, su relevancia trasciende generaciones, invitando al público a reflexionar sobre el presente y aprender de la intolerancia retrógrada de esa época.
Al finalizar la función especial develaron una placa conmemorativa de la mano de sus padrinos de lujo, la señora Susana Alexander, Claudia Álvarez y Billy Billy Rovzar, quienes coincidieron en que es una obra de primer nivel que el público no se puede perder, y es que, Cabaret ha sido seleccionada en los Premios del Público de Cartelera de Teatro, y ha recibido elogios por su cuidado en los detalles y su capacidad de evolución y renovación en cada función.
La obra sigue deslumbrando al público y reafirmando el Teatro de los Insurgentes como uno de los íconos culturales más importantes de México.