Arranca la temporada alta de cruceros en la isla de Cozumel
Quintana Roo martes 21, Ene 2025

Más de 120 mil turistas de cruceros llegarán a Cozumel en la semana cuatro de 2025, periodo que comprende del 20 al 26 enero.
El mejor día es el miércoles, con más de 33 mil visitantes
Más de 120 mil turistas de cruceros llegarán a Cozumel en la semana cuatro de 2025, periodo que comprende del 20 al 26 enero, cuando 34 hoteles flotantes atraquen en los tres muelles internacionales de cruceros con los que cuenta el destino.
El presidente municipal José Luis Chacón Méndez resaltó que, gracias al trabajo conjunto, Cozumel sigue destacando como un destino turístico favorito. “Es un orgullo mantenernos a la cabeza con la llegada de cruceros y un gusto recibir a los turistas. Continuaremos impulsando el turismo para beneficiar directamente a las familias de nuestra comunidad”, afirmó.
De acuerdo con el programa de arribos que hace público cada semana la Administración Portuaria Integral de Quintana Roo (Apiqroo), el lunes 20 de enero cinco buques vacacionales llegaron a la Isla de las Golondrinas a 19 mil 833 huéspedes.
Las cifras se calculan en base a la capacidad máxima de las embarcaciones para alojar a sus clientes. Para el martes 21 la cuenta sube a 22 mil 689 turistas internacionales alojados en siete navíos que harán escala en la ruta por el caribe occidental.
Para el miércoles 22, que será la mejor fecha de la semana, nueve cruceros con capacidad para 33 mil 415 visitantes atracarán en los tres muelles internacionales, que en conjunto pueden albergar a siete buques.
Dos de las nueve embarcaciones que llegan ese día permanecerán fondeadas en la rada de Cozumel y transportarán a los visitantes en tenders a tierra firme. Un tender es una embarcación auxiliar usada para transportar pasajeros o suministros entre un barco grande y la costa. También se le conoce como lancha auxiliar o bote auxiliar.
El 23 de enero llegan menos barcos, cuatro en total, por lo que el estimado de visitantes en ese nicho de mercado se calcula en 13 mil 734. El viernes 24 hay un repunte en la llegada de turistas que entrarán a la ínsula por las bandas de los muelles al recibir cinco islas flotantes con 19 mil 146 almas.
Ya en el cierre de la semana que corresponde al sábado 25, dos transatlánticos están programados con seis mil 136 personas. Otras dos embarcaciones atracarán en los muelles del sur con cinco mil 181 viajeros el domingo 26 de enero, con lo que se cerrará la semana.
Recomiendan a visitantes de Cancún contratar en el AIC sólo servicios acreditados
El Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC) ha sido escenario de múltiples denuncias recientes debido a los abusos y el acoso por parte de taxistas locales que imponen tarifas excesivas a los turistas. Esta problemática ha generado un impacto negativo en la imagen del destino turístico del Caribe mexicano, afectando no sólo la reputación del aeropuerto, sino también la experiencia de miles de visitantes que llegan para disfrutar de sus vacaciones.
Es por ello que el delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en Quintana Roo, Israel Malacón Osuna, hizo un llamado a los usuarios a optar por servicios ofrecidos por proveedores debidamente acreditados y con tarifas visibles al interior del aeropuerto, pues sólo de esta manera se pueden comenzar a frenar los abusos por parte de taxistas y otros prestadores.
“Esta recomendación también aplica para quienes contraten servicios a través de plataformas digitales, ya sea de transporte, hospedaje u otros. Es fundamental verificar que los proveedores sean reales, estén debidamente acreditados y cuenten con registro ante las autoridades tributarias” aseveró.
En este escenario, afirma que la Profeco tiene representación en la mesa de seguridad y en el comité de operaciones y horarios del aeropuerto y aunque la dependencia no regula las tarifas de los taxis, sí puede atender las quejas de usuarios y supervisar que los proveedores formales tengan precios visibles para facilitar la elección de los consumidores, a fin de que no sufran ningún tipo de engaño.
“La Profeco no puede intervenir cuando los servicios contratados no son ofrecidos por proveedores acreditados y registrados. Por ello, en casos de cobros excesivos, como los denunciados en redes sociales, los usuarios pueden quedar en un estado de indefensión si el proveedor no está formalmente establecido. Podemos proceder únicamente si se trata de un proveedor debidamente instalado dentro del aeropuerto; de lo contrario, es complicado garantizar los derechos del consumidor”, dijo Malacón Osuna.
Del mismo modo, el delegado recomienda a los usuarios revisar cuidadosamente las transacciones realizadas a través de plataformas digitales para evitar contratiempos o fraudes, ya que no siempre se tiene la certeza de que el proveedor exista o esté debidamente acreditado.
Cabe destacar que, los turistas han reportado ser víctimas de cobros desmesurados por trayectos cortos, con tarifas que van desde los 1,800 pesos mexicanos por carreras de apenas unos minutos dentro de la ciudad. A través de múltiples denuncias en redes sociales, se ha evidenciado un monopolio ejercido por taxistas locales, quienes en ocasiones actúan con violencia para impedir la operación de plataformas de transporte como Uber.
Estas situaciones han llevado a diversas autoridades y asociaciones como la Asociación de Relaciones Públicas del Caribe Mexicano a exigir una regulación más estricta y sanciones contra aquellos que cometan abusos. Ante la gravedad de estos hechos, se han propuesto soluciones que incluyen fortalecer las campañas de promoción que destacan los aspectos positivos del destino y trabajar en conjunto con empresas honestas.
Además de los abusos por parte de los taxistas, los turistas también han reportado acoso por parte de agentes federales y transportistas no regulados al intentar estacionarse o esperar en el aeropuerto. En algunos casos, la falta de coordinación entre las autoridades de migración y transporte ha contribuido a la disminución en el flujo de viajeros, impactando significativamente la economía local.
Suben tarifas eléctricas en Q. Roo
La alta tarifa eléctrica en diversas partes del país, especialmente en Quintana Roo, ha generado gran preocupación entre los ciudadanos. La combinación de malas instalaciones eléctricas y bajos subsidios gubernamentales se ha identificado como la principal causa de este fenómeno.
Uno de los principales factores que contribuyen a las altas tarifas eléctricas es la ineficiencia de las instalaciones eléctricas. Según el director de la Expo Eléctrica, James Salazar Figueroa, hasta un 70% del consumo eléctrico de equipos de aire acondicionado y refrigeración puede ser ineficiente debido a instalaciones poco adecuadas. Esto provoca que el costo de la energía sea mayor, especialmente en regiones con climas cálidos, como el Caribe mexicano, donde el aire acondicionado es una necesidad casi todo el año.
Para revertir la situación, en el caso de los hoteles, actualmente están utilizando cada vez más paneles fotovoltaicos e integrando baterías que puedan almacenar la energía para su uso durante la noche. “Desde hace un año, en la isla de Cozumel se instalaron turbinas para aprovechar la energía de las olas del mar y abastecer el alumbrado público del municipio, lo cual ha tenido bastante éxito”, dijo.
Agregó que, con 10 mil kilómetros de litorales en todo el país, Quintana Roo tiene un gran potencial en este tema; “esta tecnología no sólo es para industrias, ya que también está presente en la automatización de casas de interés social, lo cual permite ahorrar energía al apagar de forma automática luces y otros aparatos eléctricos en desuso. Cada vez son más casas en las zonas urbanas con paneles solares. Además, los nuevos proyectos de desarrollo inmobiliario e industrial ya están incluyendo generación de energía limpia”, aseveró.
Finalmente, dijo que otro factor determinante en el incremento de las tarifas eléctricas es la disminución de los subsidios. En los últimos años, el gobierno federal ha reducido significativamente los subsidios a la energía eléctrica en algunas regiones, lo que ha resultado en un aumento directo en las facturas de electricidad de los consumidores. Durante las temporadas de altas temperaturas este problema se agrava aún más debido a la mayor demanda.











