Alarma por el aumento de consumo de alcohol en mujeres
Quintana Roo miércoles 18, Jun 2025- Grupo AA lanza llamado urgente
- Registran incremento de 45 por ciento especialmente en la zona norte del estado
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Por redacción DIARIOIMAGEN
Cancún.- El consumo problemático de alcohol entre mujeres en Quintana Roo ha registrado un alarmante incremento del 45%, especialmente en la zona norte del estado, según alertó la Central Mexicana de Alcohólicos Anónimos (AA). La organización, con presencia activa en centros penitenciarios y comunidades vulnerables, advierte que esta tendencia no solo refleja una crisis de salud pública, sino también un vínculo directo con el aumento de delitos cometidos bajo el influjo del alcohol.
Roger E., delegado de AA en la zona norte del estado, explicó que el perfil de las nuevas integrantes de los grupos de recuperación ha cambiado drásticamente en los últimos años. “Estamos viendo cada vez más mujeres jóvenes, muchas entre los 18 y 30 años, que llegan a nuestros grupos tras haber tocado fondo, incluso con antecedentes penales”, señaló.
Este fenómeno ha llevado a que Quintana Roo se ubique entre los estados con mayor índice de alcoholismo femenino a nivel nacional, una situación que preocupa tanto por su impacto en la salud como por sus implicaciones sociales y familiares.
De acuerdo con datos compartidos por AA y respaldados por la Fiscalía estatal, el 70% de los delitos cometidos en Quintana Roo están relacionados con el consumo de alcohol y drogas. En los centros penitenciarios del estado, existen actualmente 11 grupos de AA con más de 250 personas privadas de la libertad, muchas de ellas mujeres, que siguen el programa de los 12 pasos bajo el lema “Un día a la vez”.
Los delitos más comunes asociados al alcoholismo incluyen abuso sexual, robo a casa habitación y asaltos a transeúntes, lo que evidencia la urgencia de atender esta problemática desde una perspectiva integral.
Ante este panorama, AA anunció el lanzamiento de una campaña intensiva de sensibilización y prevención, dirigida especialmente a mujeres jóvenes. La iniciativa incluirá charlas en escuelas, difusión en redes sociales y colaboración con instituciones de salud y justicia.
“Queremos romper el estigma y abrir espacios seguros para que más mujeres se acerquen a pedir ayuda. El alcoholismo no discrimina, pero la recuperación tampoco”, enfatizó Roger E.
Cómo prevenirlo, detectarlo y actuar a tiempo
El alcoholismo es una enfermedad crónica y progresiva que afecta a millones de personas en México y el mundo. Aunque socialmente aceptado, el consumo excesivo de alcohol puede derivar en graves consecuencias físicas, emocionales y sociales. Especialistas en salud mental y adicciones coinciden en que la prevención, la detección temprana y la intervención oportuna son claves para evitar que el consumo se convierta en dependencia.
La prevención comienza mucho antes del primer trago. De acuerdo con el centro Monte Fénix y expertos en psicología clínica, estas son algunas estrategias efectivas:
– Educación temprana: Hablar abiertamente sobre los riesgos del alcohol desde la adolescencia, sin tabúes ni moralismos.
– Fomentar habilidades emocionales: Enseñar a gestionar el estrés, la frustración y la presión social sin recurrir a sustancias.
– Ambientes protectores: Crear entornos familiares y escolares donde el consumo no sea normalizado ni incentivado.
– Límites claros: Establecer normas sobre el consumo responsable y evitar el acceso temprano al alcohol.
– Modelos positivos: Los adultos deben ser coherentes entre lo que dicen y lo que hacen respecto al consumo.
El alcoholismo no siempre se manifiesta con embriaguez evidente. Muchas personas funcionales pueden estar desarrollando una dependencia sin saberlo. Algunos signos de alerta incluyen:
– Necesidad creciente de beber para relajarse o socializar.
– Incapacidad para detenerse una vez que se empieza a beber.
– Episodios de pérdida de memoria o lagunas mentales tras beber.
– Descuidos en el trabajo, la escuela o las relaciones personales.
– Negación del problema o irritabilidad cuando se cuestiona el consumo.
– Síntomas físicos como temblores, sudoración o ansiedad al dejar de beber.
Si tú o alguien cercano presenta señales de dependencia, es fundamental actuar sin estigmas ni juicios. El alcoholismo no es una debilidad moral, sino una enfermedad que puede tratarse con éxito. La clave está en romper el silencio, buscar apoyo y actuar a tiempo. Como señalan los expertos de Intastur, “más vale prevenir que curar”.
