El tabaquismo en México tiene persistente presencia en adultos
* Especiales jueves 9, Oct 2025- Impacto a la salud y a la economía
- El aumento de impuestos para su venta busca reducir su consumo

El 27% de los encuestados se identifican como fumadores activos, mientras que el 22% son exfumadores y el 51% nunca ha fumado.
Según la Encuesta Global de Tabaquismo en Adultos (GATS) México, realizada por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), el consumo de tabaco sigue siendo un problema de salud pública significativo. Esta tercera edición de la encuesta, que también se llevó a cabo en 2009 y 2015, ofrece datos representativos a nivel nacional sobre personas mayores de 15 años en zonas urbanas y rurales.
Prevalencia actual: El 27% de los encuestados se identifican como fumadores activos, mientras que el 22% son exfumadores y el 51% nunca ha fumado.
Gasto semanal: Una tercera parte de los fumadores gasta más de 200 pesos semanales en productos de tabaco, y otro 23% destina entre 100 y 200 pesos.
Impacto económico: Los costos por pérdida de productividad atribuibles al tabaquismo superan los 50 mil millones de pesos al año, además de 20 mil millones en atención médica, afectando principalmente a mujeres.
La encuesta también mide la exposición al humo de segunda mano, el uso de nuevos productos como cigarrillos electrónicos y tabaco calentado (HTP), y la frecuencia de intentos de abandono del hábito. Estos datos son clave para diseñar políticas públicas efectivas.
En abril de 2025, la organización Salud Justa Mx presentó los resultados de la Encuesta Nacional sobre percepción de impuestos al tabaco, revelando un amplio respaldo social a esta medida.
-Aprobación general: El 79% de los encuestados aprueba el aumento en el impuesto al tabaco. Incluso entre los fumadores, el 64% está de acuerdo con la medida.
-Impuesto específico: El 68% apoya un gravamen de tres pesos por cigarrillo, lo que representa un incremento significativo en el precio final.
-Destino de los recursos: El 33% de los participantes considera que los ingresos por impuestos deberían destinarse al sector salud, seguido por educación (16%), obras públicas (12%) y atención a la pobreza (10%).
Expertos como Luz Myriam Reynales Shigematsu del INSP destacan que los impuestos al tabaco son una herramienta costo-efectiva para reducir el inicio del consumo entre jóvenes, disminuir la prevalencia entre adultos y evitar recaídas en exfumadores.
México avanza en la vigilancia y control del tabaquismo con herramientas como la GATS y políticas fiscales que buscan desalentar el consumo. Aunque el hábito persiste en una parte considerable de la población, el respaldo social a medidas como el aumento de impuestos refleja una creciente conciencia sobre los daños del tabaco y la necesidad de proteger la salud pública.
En abril de 2025, la organización Salud Justa Mx presentó los resultados de la Encuesta Nacional sobre percepción de impuestos al tabaco, revelando un amplio respaldo social a esta medida.












