Nueva política migratoria de EU pega a familias mexicanas de 23 estados
* Destacadas, Mundo jueves 16, Oct 2025- Drástica caída en remesas
- La contracción representa una reducción importante en la capacidad de compra

La caída en el envío de dólares desde Estados Unidos, desde inicios de este año, golpea los ingresos por remesas de dos terceras partes de las entidades federativas de México.
La nueva política migratoria del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con el aumento de redadas contra migrantes e impuestos al dinero que envían a sus familias, golpea los ingresos por remesas de dos terceras partes de las entidades federativas del país.
De acuerdo con cifras del Banco de México (BdeM), en el primer semestre de 2025, al menos 23 estados registran caídas anuales en las transferencias que reciben desde el extranjero, principalmente del país vecino.
Casi la mitad de las entidades afectadas reportan caídas de doble dígito, siendo una de las más pronunciadas la de la Ciudad de México con un desplome de 25.5 por ciento. Las transferencias pasaron de 2 mil 362.4 millones de dólares en los primeros seis meses del año pasado a mil 759 millones en el mismo lapso de 2025.
Sinaloa registró una disminución casi de la misma proporción, 25.6 por ciento, al pasar las remesas de 483.4 millones de dólares a 359.8 millones de una primera mitad de año a otra.
En su segundo mandato presidencial, iniciado en enero de 2025, Donald Trump ha intensificado su agenda antimigratoria con deportaciones masivas a México mediante redadas en grandes ciudades estadunidenses y la firma en julio de la One Big Beautiful Bill, que impone un impuesto de uno por ciento a las remesas al extranjero, el cual se aplicará a partir del 1 de enero.
En los primeros seis meses del año, según los reportes del banco central, las remesas del país reportaron una caída de 5.6 por ciento al pasar de 31 mil 326 millones de dólares a 29 mil 558 millones.
Otros estados fuertemente afectados son Nuevo León, con una caída de 22.1 por ciento, al pasar de 718.7 millones de dólares a 559; Estado de México, con 19.7 puntos porcentuales, al ir de 2 mil 270 millones a mil 823, y Quintana Roo, con 16.9 por ciento, al bajar de 203.5 millones a 169.1.
Por su parte, Sonora pasó de 419.9 millones de dólares a 352.7; Tabasco (14.3 por ciento) bajó de 189.7 millones a 162.4; Colima, con 12.6, pasó de 229.3 a 200 y Coahuila (11.31) descendió de 464.2 millones de dólares a 411.7 millones.
Las entidades menos afectadas son Nayarit, con una caída de 9.4 por ciento; Chihuahua (8.6), Baja California Sur (7), Durango (5.1), Jalisco (5.1), Tamaulipas (4.1), Tlaxcala (3.4), Michoacán (3.2), Querétaro (2.9), Guanajuato (2.4), San Luis Potosí (1.4), Hidalgo (1.1), Aguascalientes (1) y Yucatán, con 0.4 por ciento anual.
La última Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares, publicada hace un par de meses por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, estima que hubo un millón 533 mil hogares que recibieron remesas en México durante 2024, lo que representó 3.9 por ciento de todos los domicilios en el país.
Es decir, uno de cada 25 hogares en México recibió transferencias de dinero desde el extranjero. Esta cifra es menor, tanto en términos absolutos como relativos, a la reportada dos años atrás. En 2022, se contaron un millón 700 millones de viviendas receptoras de remesas, que equivalen a 4.6 por ciento de los hogares a nivel nacional.
Golpe a los hogares
El área de estudios económicos de BBVA señaló en un análisis que la contracción de las remesas “representa una reducción importante en la capacidad de compra de los hogares en México”.
Destacó que en 360 mil hogares del país las remesas representan más de la mitad del ingreso corriente, estimación que ya considera otras fuentes, incluidas las transferencias de programas gubernamentales.
“Para estos hogares, una afectación en el flujo de las remesas tendría graves consecuencias en sus economías”, planteó el banco.
BBVA proyecta que, al concluir este año, el flujo de remesas a México sume 61 mil millones de pesos, una caída de 5.8 por ciento respecto a lo reportado en 2024.
De concretarse la proyección, sería la primera caída anual desde 2013 y, en porcentaje, la más profunda desde 2009, cuando se tuvo la crisis financiera mundial que se originó en Estados Unidos.
En un reporte, Banamex anticipó que las remesas continuarán mostrando atonía en lo que resta del año, respondiendo a las políticas migratorias puestas en marcha en Estados Unidos y a la perspectiva de menor generación de empleos en ese país. Para todo 2025 prevé una caída de 4 por ciento en los envíos.
Analistas de Monex advirtieron que la continuación de las campañas masivas de deportación en EU, así como la inercia de un menor dinamismo del mercado laboral estadunidense, podría acentuar la desaceleración que han exhibido las remesas en el año.
Caída desde 4.3 puntos del PIB
Si continúa la política migratoria de Estados Unidos como hasta ahora y su actividad económica sigue debilitándose es altamente probable que el flujo de remesas a México será equivalente a 3.3% del PIB este año, proyectó el economista senior de BBVA, Juan José Li Ng.
Esta previsión significaría una caída desde 4.3 puntos del PIB que representaron los 64,746 millones de dólares que recibieron los hogares beneficiados en México el año pasado. Consideró que seguramente el 2024 quedará como referente del pico de envíos de remesas desde Estados Unidos.
Aclaró que las estimaciones sobre el flujo de remesas a México dependen del tipo de cambio y de la situación económica en Estados Unidos, que es la que genera los empleos para los migrantes emisores.
Con esas observaciones, anticipa que para los próximos dos años, seguirá moderándose el flujo de remesas y muy probablemente rondará una cifra similar a la que se observará este año.












