Planean periodo extraordinario para aprobar la reforma electoral
Miguel Ángel Rivera, Opinión jueves 11, Dic 2025
CLASE POLITICA Miguel Ángel Rivera
El pasado 10 de diciembre, la Cámara de Diputados federal clausuró sus trabajos correspondientes al año 2025, con la suposición de que regresarían para reanudar actividades hasta el primer día de febrero del año venidero, pero pronto, al menos una parte de ellos recibieron la noticia de que tendrán que volver mucho antes.
La mala noticia acerca del recorte de sus vacaciones provino de su pastor, el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), el ex gobernador de Zacatecas Ricardo Monreal Ávila.
En conferencia de prensa, el coordinador de la mayoría “morena” reveló que es posible que, antes de terminar el año, el Ejecutivo, encabezado por la presidenta (con A) Claudia Sheinbaum Pardo, remita a la Cámara el anunciado proyecto de reforma electoral, con lo cual se debería realizar en enero un periodo extraordinario de sesiones para revisar esa iniciativa y eventualmente tramitarla primero en comisiones y luego ante el pleno, por lo cual los diputados, y eventualmente los senadores, deberán acortar su asueto, aunque sea brevemente para la mayoría, pues sólo unos cuantos tendrán que “revisar” las propuestas del gobierno federal y darles cauce hacia los plenos de las dos cámaras del Congreso de la Unión, en donde las mayorías sólo deberán sesionar un par de días para dar su voto positivo, pues en las filas del oficialismo resulta impensable que surjan manifestaciones de inconformidad.
En sus declaraciones, durante la conferencia de prensa, Monreal precisó que la iniciativa estaría lista en breve porque “están próximos a presentar el resultado y las conclusiones la Comisión Presidencial para la Reforma Electoral y estamos a la espera para que nosotros empecemos a procesar esas iniciativas que se presenten, quizás en los próximos días, quizás en la primera semana de enero”.
El pastor de la mayoría reveló haber conversado con algunos de los miembros de esa Comisión Presidencial, quienes le aseguraron haber concluido sus trabajos, por lo cual estarían en condiciones de tener lista iniciativa que sería puesta a la consideración de la Comisión Permanente del Congreso para empezar el análisis a la brevedad, pues se considera que diciembre es un buen momento para revisar y, con calma, analizar. Claro, los consultados serían muy pocos, quienes a cambio del posible lucimiento personal de dar cauce a una de las principales propuestas de la llamada Cuarta Transformación tendrán que “sacrificar” unos días de descanso.
El coordinador de la mayoría de diputados federales aclaró que en el diálogo que ha tenido con integrantes de la Comisión Presidencial de Reforma Electoral se le comunicó que todavía no estaban listos para enviar la iniciativa y que están en los últimos detalles redactando normas y ellos verían la posibilidad de después del 25 de diciembre hacer el intento o en la primera semana de enero.
“Depende de eso si convocamos o no a periodo extraordinario”, precisó Monreal, quien descartó la posibilidad de un periodo extraordinario que no sea para dar cauce a la mencionada reforma electoral. Precisó que los otros asuntos considerados pendientes no tienen el mismo peso que la reforma electoral, por lo que no es necesario adelantar fechas y es posible esperar hasta el periodo ordinario de sesiones a iniciarse en la mencionada fecha del 1 de febrero.
Indicó que, en su calidad de presidente de la Jucopo, va a esperar que llegue la iniciativa de reforma electoral, algunos de sus puntos, ya hechos públicos, consisten en reducir e inclusive eliminar de los llamados diputados y senadores de partido o plurinominales y el recorte (también posible desaparición) de la entrega de dinero público a los partidos, así como eliminar los organismos electorales de los estados, ya sean los tribunales o los organismos públicos electorales, conocidos popularmente como Oples.
Monreal señaló que “son temas que se han deliberado estos meses, pero no tenemos certeza qué es lo que nos llegará como iniciativa presidencial o como conclusión de las mesas que llevaron a cabo y que encabezaron los miembros de la Comisión Presidencial. Sé que están a punto de enviarnos ese documento y entonces una vez que llegue vamos a fijar nuestra posición”, añadió.
Lo cierto es que la reforma es la eliminación de plurinominales, esos que llegan por el sacrosanto dedo de los jefes del PRI y del PAN , que no son elegidos por el pueblo de México , pero que se usan para contrarrestar la voluntad del pueblo mexicano, como diciendo: “los mexicanos no saben elegir, mejor pongamos los nuestros”…
Y la otra parte es disminuir los apoyos multimillonarios que se les da a los partidos, pues es dinero perdido y dinero que ellos no trabajan, quitándoles a los mexicanos de sus bolsas …
Así que los aspectos principales de la anunciada reforma electoral se conocen desde hace tiempo, pues los primeros indicios aparecieron desde el sexenio del caudillo de la llamada Cuarta Transformación, el ex presidente Andrés Manuel López Obrador, y aunque los foros convocados, supuestamente para conocer y eventualmente adoptar otras visiones, lo cierto es que no se han registrado modificaciones notables.
De hecho, los partidos de oposición y muchos organismos no gubernamentales han descalificado los trabajos de la comisión presidencial encargada de la consulta, la cual se puso a cargo del experimentado militante de izquierda Pablo Gómez Álvarez, quien no se ha distinguido precisamente por ser un defensor de los principios democráticos.
Desde antes, el coordinador de la mayoría oficialista en la Cámara de Diputados, el mencionado Monreal se ha singularizado por su defensa de la reforma electoral impulsada desde Palacio Nacional por la discípula y sucesora del caudillo de Macuspana.
En declaraciones anteriores, Monreal aseguró que esa reforma representa el primer proyecto que no resulte de una negociación directa entre las dirigencias de los partidos políticos y el gobierno federal, como solía ocurrir durante el período neoliberal, (desde José López Portillo hasta Enrique Peña Nieto). Lo que Monreal olvidó mencionar es que en esa etapa, él estaba en el otro extremo, al lado de los ahora condenados por la llamada Cuarta Transformación, calificados de conservadores y neoliberales.
Pero así como Monreal ha elegido cambiar de rumbo, hay otros personajes y asociaciones que mantienen la vigilancia sobre la llamada Cuarta Transformación, por considerar que su propuesta de reforma electoral no abona al fortalecimiento de la democracia, sino que pretende consolidar el poder de la 4T sobre los tres poderes de la República: Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
Por ejemplo, organizaciones a las que se presenta como vinculadas al empresario Claudio X. González Guajardo, uno de los “enemigos” más señalados por el actual régimen, al margen de la comisión presidencial, presentaron ante el Congreso de la Unión una “iniciativa ciudadana” en materia electoral, planteada como un contrapeso a la reforma impulsada por la presidenta Sheinbaum.
Estas agrupaciones, conocidas bajo el nombre “Salvemos la Democracia”, entregaron su propuesta respaldada por 188 mil 355 firmas, lo cual supera el mínimo legal requerido.
Estas organizaciones pretenden que su propuesta sea discutida a inicios de febrero de 2026, en paralelo con la presentación de la reforma electoral elaborada por la 4T en diálogo con distintos grupos sociales. Pero como se puede concluir, a partir de los referidos comentarios del coordinador “moreno”, dejar la discusión para esas fechas resultaría inútil, pues la propuesta del oficialismo será aprobada antes, durante el periodo extraordinario.
La iniciativa atribuida a Claudio X. y organizaciones afines se concentra en cinco ejes: “árbitro justo”, “cancha pareja”, “cero trampas”, “fuera delincuencia organizada” y “no al chapulineo ni sobrerrepresentación”.
Lo de “árbitro justo” ya no es posible, pues lo que queda del Instituto Nacional Electoral (INE), encabezado por Guadalupe Taddei, responde invariablemente a los propósitos de la 4T, lo mismo que el Tribunal en la materia. Precisamente dichos organismos dieron validez a la artificial sobrerrepresentación legislativa con la cual Morena y satélites han impuesto todas las reformas que les favorecen y le aseguran su control.











