Elecciones michoacanas
Augusto Corro jueves 26, Mar 2015Punto por punto
Augusto Corro
En junio próximo los michoacanos elegirán a un nuevo gobernador en una entidad golpeada por la violencia desde hace tiempo.
Michoacán ya lleva varios años de ser flagelado por la violencia y los escándalos políticos derivados de la presencia del narco en la entidad.
La población michoacana se encuentra urgida de un mandatario estatal que les regrese la tranquilidad y la paz que les arrebataron los cárteles de la droga.
Los michoacanos tienen el derecho de vivir sin el terror de las balaceras, las extorsiones, secuestros y asesinatos.
Ojalá que en los comicios del 7 de junio próximo, la población vote por el aspirante idóneo, aquél que se esmere por la reconstrucción de Michoacán. Se lo merece.
Cinco son los candidatos que participarán en los comicios del próximo 7 de junio: Luisa María Calderón, del Partido Acción Nacional (PAN); Silvano Aureoles Conejo, del Partido de la Revolución Democrática (PRD); Ascención Orihuela, “Chon”, por el Partido Revolucionario Institucional (PRI); Luis Manuel Antúnez Oviedo, por Movimiento Ciudadano, y María de Luz Núñez Ramos, del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Entre estos políticos se encuentra el ganador. Luisa María Calderón y Silvano Aureoles Conejo ya participaron en elección anterior y perdieron ante el priísta, de triste memoria, Fausto Vallejo.
La clase política michoacana se desprestigió considerablemente en los últimos años, debido a su vinculación con el crimen organizado.
Como señalamos antes, gobernadores y presidentes municipales fueron tentados por la delincuencia. No pudieron escapar de sus redes y finalmente renunciaron a sus cargos.
Así ocurrió con Jesús Reyna, mandatario estatal interino, y Fausto Vallejo, cuyo hijo se encargaba de las “relaciones públicas” con los señores del narco.
En los dos casos señalados, los vínculos de los políticos se estrecharon con el líder de “Los Caballeros Templarios”, Servando Gómez, “La Tuta”, ahora tras las rejas. El desprestigio de la clase política fue total, porque de una u otra manera buscaron algún nexo o el apoyo de la delincuencia organizada.
En la denominada “tutoteca” son innumerables las videograbaciones de “La Tuta” con diferentes políticos, entre ellos los presidentes municipales, funcionarios de medio pelo, líderes, etc. Algunos de estos en la cárcel.
La narcopolítica tuvo sus años de auge, ante la impotencia de las autoridades federales para evitar esas asociaciones delincuenciales.
El propio Felipe Calderón no pudo llevar la paz a Michoacán. Su falta de una estrategia en la guerra contra la delincuencia organizada propició una violencia más encarnizada. Ni siquiera logró, a pesar de económico y político que manejaba, que su hermana Luisa María ganara la gubernatura.
LUISA MARÍA
En el presente, los dos hermanos se encuentran empeñados en ganar las elecciones, pero los michoacanos saben que con los hermanos Calderón no existe ninguna posibilidad de erradicar completamente la violencia.
Con su guerra fallida contra la narcodelincuencia, Calderón dejó un país con un saldo de miles de muertos, desaparecidos, huérfanos, etc. El tejido social hecho trizas, cuya reestructuración se llevará años en lograrlo. Luisa María aspira al triunfo, pero su hermano, el ex mandatario, no es un apoyo que le garantice el triunfo. Sin embargo, Felipe estuvo presente. El resultado de este gesto fraternal se conocerá en junio.
Por cierto, “La Tuta” dijo en noviembre de 2013, en un video, que Luisa María, pidió ayuda a “Los Caballeros Templarios” para su primera campaña a la gubernatura michoacana. Obvio, la mencionada panista se deslindó de la acusación.
SILVANO AUREOLES CONEJO
El diputado con licencia, Silvano Aureoles Conejo, el aspirante del PRD al gobierno de Michoacán, ya compitió en la elección anterior. También perdió frente a (in)Fausto Vallejo. Este candidato perredista buscará recuperar el prestigio del partido del sol azteca que se perdió con los gobiernos encabezados por Lázaro Cárdenas Batel y por Leonel Godoy “El Chino”, debido al auge de la narcodelioncuencia primero con “La Familia Michoacana” y luego con “Los Caballeros Templarios”.
Fueron sexenios de terror con la presencia de los gobernantes perredistas incapaces de conseguir la paz y tranquilidad deseadas. Los michoacanos vivieron épocas complejas en un estado sin ley.
Aureoles Conejo intenta llegar al gobierno estatal bajo la sombra de gobernadores ineptos como Lázarito y “El Chino”.
EL PRIÍSTA “CHON”
El candidato priísta a la gubernatura es Ascención Orihuela “Chon”, senador con licencia. ¿Cree este congresista gris que tiene alguna posibilidad de ganar la candidatura? Si lo logra se tratará de una odisea.
Aún están frescos los errores de los políticos tricolores en el gobierno michoacano. La mayor de las fallas fue la cercanía de los funcionarios públicos, principalmente los tricolores, con la delincuencia organizada.
Cabe señalar que en agosto de 2014, “La Tuta” apareció en un video “repartiendo” la herencia de supuestos parientes de “Chon”.
Se tiene la impresión que con la participación de este candidato priísta se trató de llenar un expediente, porque sus posibilidades de triunfo son escasas, más bien nulas.
De los otros candidatos, Luis Manuel Oviedo, de Movimiento Ciudadano, y María de la Luz Núñez Ramos, su derrota en la justa electoral ya está asegurada.