El mugrero que viene
Alberto Vieyra G. viernes 8, Dic 2017De pe a pa
Alberto Vieyra G.
Qué pecado habremos cometido los mexicanos, que, desde mediados de diciembre del 2017, y hasta el 1 de julio del 2018, seremos bombardeados por una guerra sin cuartel, a cargo de la ponzoñosa partidocracia que nos recetará la escandalosa suma de 50 millones de spots publicitarios que, hasta ahora, no han generado, ni mayor participación de los electores, y menos una mediana credibilidad en las instituciones electorales como el INE y los partidos políticos.
50 millones de spots basura que, a la industria radiofónica del país, le ocasionará pérdidas por más de 90 mil millones de pesos, y el mugrero que nos recetará el INE y la partidocracia estará hasta en la sopa, a razón de 4 spots por cada media hora de spost basura.
A raíz de de las reformas electorales de 2007 y 2014, los partidos disponen durante el periodo de precampañas de 30 minutos diarios en cada una de las dos mil 556 estaciones de radio y televisión del país; 24 minutos durante el periodo de intercampañas y 41 minutos durante el periodo de campañas. Esto es, para vomitarse a mañana, tarde y noche.
Sin embargo, y gracias a esas reformas electorales, el mañoso árbitro electoral, el tan venido a menos INE, obliga a los radiodifusores del país a que transmitan toda esa montaña de basura electoral con cargo a los famosos tiempos del estado, que son utilizados por el gobierno para, bombardear también, a la población, cacareando huevos inexistentes, y sólo porque los medios electrónicos concesionados utilizan el espacio radioeléctrico del país para sus transmisiones con disímbolos contenidos.
El INE acatarra, ya, con un nuevo formato en los debates presidenciales, que dejarán de ser monólogos vacíos que duermen a la gente y no dicen nada, pero no pasará mucho tiempo para que la industria de la radio y la televisión pegue el grito en el cielo, por las pérdidas millonarias.
El INE y los partidos políticos convertidos en lacras sociales, deben saber que, un radiodifusor, tiene que invertir para comprar una antena, un transmisor, consolas, micrófonos, cámaras si se trata de televisión, infraestructura, y un ejército de trabajadores a los que se les debe de pagar, llueva, truene o relampagueé.
Pero, además, los anunciantes, durante los meses que duran los procesos electorales, prefieren no anunciarse en radio y televisión, pues aseguran que sus mensajes publicitarios se pierden entre el mugrero de publicidad electoral que enerva y envenena a los ciudadanos quienes no quieren saber de politicastros corruptos que ultrajan la dignidad del pueblo de México
Estamos ante reformas político electorales autoritarias sin valor informativo ni credibilidad.
¿Usted les cree a los partidos políticos y a sus embusteros y simuladores candidatos? Yo no, tampoco al INE y demás instituciones blandengues electorales.
Ese es justamente el meollo del asunto: credibilidad y confianza. ¿Por qué no la tienen? Porque no se la han ganado, porque la confianza y el respeto se ganan, y lo que vemos y escuchamos es, solamente, lodo, basura, diatribas, injurias del bajo mundo entre unos y otros candidatos que rayan en la incivilidad política y humana.
Hacer política con semejante mugrero es algo muy sencillo. Se trata de ensuciar, de desacreditar, calumniar, confundir a los mexicanos y contaminar el ambiente que respiramos con tal de conseguir el poder al precio que sea.
¿No le parece a usted que ya es hora de que los mexicanos, hartos de ese infame estado de cosas, vayamos poniendo en orden a una clase política que se quedó en la era rupestre?