Chiquitolina
Alberto Vieyra G. martes 17, Jul 2018De pe a pa
Alberto Vieyra G.
El ingenioso Roberto Gómez Bolaños, quien terminó sus días convertido en panista, popularizo allá por los años 70´s del siglo pasado, el término chiquitolina, en una serie cómica de televisión, en las que con tomarse una pastillita, con un mazo y sus antenitas de vinil como poderosas armas, solía resolver misteriosos episodios de la vida real.
¿Por qué hago historia?
Mire usted: Sin mazo y sin antenas paradiabólicas o de vinil, ya saben quién… pretende darle chiquitolina al gobierno de la República, mandando a volar a aviadores, burócratas de confianza, reduciendo secretarías de Estado, bajándoles a la mitad los sueldos a más de 26 mil zánganos en la administración pública que viven de nuestros impuestos, tumbándoles las millonarias pensiones a los ex presidentes o reduciéndoselas a pensiones del ISSSTE o de personas de la tercera edad; vendiendo el avión presidencial; mandando a la rechintola al Estado Mayor Presidencial, que en 1994 fue incapaz de evitar el “Colosidio”; descentralizar al gobierno federal e imponer una republicana austeridad, en la que se desterrará los cafecitos, las tertulias, los chupes y hasta el golf que suelen practicar algunos funcionarios popof a la hora que deben trabajar.
¿Qué le parece el México de la chiquitolina? ¿Suena bien, verdad?
Sólo que, como Santo Tomás, habrá que esperar si los integrantes de los poderes Legislativo y Judicial se someten al supremo poder presidencial, que por lo visto concentrará “superpoderes”.
Por lo pronto, el señor López Obrador ya les leyó la cartilla a los legisladores del partido suyo, suyito y de su propiedad, que por lo visto, no tendrán ninguna autonomía como Poder Legislativo.
Entre las propuestas de Andrés Manuel López Obrador, figura el proyecto de reforma para terminar con fueros y privilegios, lo cual incluye modificar el artículo 108 de la Constitución para agregar que puede ser juzgado el presidente en funciones por delitos de violación a las libertades electorales y por corrupción.
¿Ya se dio cuenta del nacimiento del PRIMOR? Bueno, pues la propuesta de quitar el fuero al presidente de la República fue del PRI, pero según las antenitas del “Chapulín colorado”, la SCJN la paró en el Senado y como quién dice, le puso el balón a AMLO, sólo para que chute a gol.
¡Eso es PRIMOR!
En la docena de reformas legislativas que propondrá al Congreso, figuran, además, reformar la ley para considerar delitos graves –sin derecho a libertad bajo fianza– la corrupción, el robo de combustibles y el fraude electoral en cualquiera de sus modalidades, revertir el reciente decreto de privatización del agua; modificar o revocar leyes de la reforma educativa, establecer en el artículo tercero de la Constitución el derecho a la educación pública y gratuita en todos los niveles escolares. Asimismo, establecer en la ley el mecanismo de consulta para la revocación de mandato, y quitar candados para la aplicación de todos los procedimientos de consulta ciudadana que deberán tener carácter vinculatorio, con el propósito de hacer valer la democracia participativa.
Me llama poderosamente la atención el término “democracia participativa”, empleado por AMLO, ¿qué quiere decir ese término? que mandara a la rechintola la actual “democracia representativa” para dar paso a la “democracia participativa”, que practicaban los sabios mayas y en la que el punto medular, que los gobernantes que no aprendieran a escuchar al pueblo se iban a su casa y por supuesto del poder.
¿La chiquitolina de López Obrador resolverá también, el injusto reparto de la riqueza? ¿Los poderosos dueños del dinero estarán dispuestos a tomar chiquitolina?