Errores y horrores
Alberto Vieyra G. viernes 21, Dic 2018De pe a pa
Alberto Vieyra G.
Primero fue el error de octubre con la cancelación del Aeropuerto de Texcoco que tendrá un costo para las arcas de la nación de más de 100 mil millones de pesos, a pesar de que el gobierno Lópezobradorista anuncia con bombo y platillo haber llegado a una negociación exitosa con los buitres tenedores de bonos en New York, que amenazaban con llevar a México a la banca rota.
¿Cuál fue el fondo de ese acuerdo con la recompra de más de 6 mil millones de dólares a esos buitres que en el 2015 encueraron materialmente a Argentina?
¿Qué dio a cambio el pomposo gobierno de la “Cuarta Transformación” para corregir su metida de pata?
Y está semana, Andrés Manuel López Obrador tuvo que reconocer públicamente un error garrafal en el Presupuesto de Ingresos y Egresos de la Federación para el 2019, les quitó presupuesto a las universidades públicas y a todos los estados del país, lo que motivó una autentica rebelión, a la cual se sumaron artistas y creadores porque el gobierno que pregona una “austeridad republicana” parecida a la de don Benito Juárez, también le mochó la lana al renglón de la cultura.
El señor López Obrador se vería obligado a reconocer que efectivamente hubo un error. ¿De quién fue la metida de pata? ¿Fue del titular de Hacienda, Carlos Urzúa, de sus canchanchanes o del propio señor presidente que autoriza sin ver ni leer?
¡Qué grave y peligroso que ocurran esos errores millonarios para la nación azteca! Evidentemente que son errores que provocan horrores en el pueblo de México. Pero por lo visto los horrores y errores parecen ser el signo del régimen de la “Cuarta Transformación de México”.
Y en otro orden de cosas, hace tres semanas que la tremenda corte declaró la inconstitucionalidad de la peñista ley de seguridad pública, con lo cual literalmente ordena que el Ejército Mexicano y la Armada de México regresen a sus cuarteles, toda vez que la Constitución no les permite realizar labores de policías persiguiendo a mafias criminales.
Ello obligó al régimen de la “Cuarta Transformación” a crear la Guardia Nacional que estará al mando militar de la Secretaría de la Defensa Nacional, es decir, que será la misma gata solo que revolcada y ampliada pues la dichosa Guardia Nacional contará con más de 150 mil elementos y no 50 mil como inicialmente anunció López Obrador.
Ese revolcón a la gata de la seguridad pública a nivel nacional ha generado una monumental polémica, pues se duda que los efectivos de la policía militar, naval y de la Policía Federal puedan hacer frente a un animalote que ha penetrado y cabalga por todo el tejido social de México, lo cierto es que hasta ahora no han podido con el paquete.
Pero llama poderosamente la atención que el señor López Obrador quiera ahora, degradar al Ejército Mexicano para construir viviendas de alta plusvalía en el bosque de Chapultepec y el Aeropuerto de Santa Lucia.
¿De generales a matacuaces? ¿Nuestros Juanes ahora como maistros albañiles de media cuchara, se los imagina usted con sus pantalones de peto y chamarra de mezclilla y su pulque para las largas jornadas?
¿No le parece a usted un bajón en el escalafón? ¿Se imagina usted a los 541 generales, almirantes, coroneles, tenientes, sargentos, cabos y soldados rasos pegando adobes, haciendo castillos, mezcla y construyendo aeropuertos y otras instalaciones a prueba de que el próximo gobierno para el 2024 decida derruirlos en vez de terminar de construirlos como ocurrió con el Aeropuerto de Texcoco?
¿A quién le habría copiado semejante idiota el señor presidente, será a la bestia Trumpiana del norte que vocifera todos los días que el muro lo construirá el ejército gringo? En fin, son los signos del régimen de la “Cuarta Trasformación de México”.