Evo Morales y el asilo
José Antonio López Sosa jueves 14, Nov 2019Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Uno de los hechos más controvertidos de esta administración será sin lugar a dudas, el haberle otorgado asilo político a Evo Morales, quizás no por el hecho en sí, sino por la polarización que vivimos. Hay varios hechos que debemos tomar en cuenta para entender la coyuntura.
Evo Morales cumplía con su mandato constitucional, si bien es cierto que la última elección —donde se supone que gobernaría otro período a partir de enero— estuvo plagada de irregularidades, su período concluía en enero próximo.
Sí, Morales pretendía perpetuarse en el poder luego de haber modificado la legislación que no le permitía reelegirse indefinidamente.
Ahora bien, el asilo que México le otorga es en función al hecho, que la milicia le pidió la renuncia, interrumpiendo a todas luces, el orden constitucional en Bolivia. Darle asilo a Evo Morales no significa estar de acuerdo con su política, su ideología o el hecho de haberse querido reelegir indefinidamente en su país. La tradición del asilo en México data de hace más de un siglo y forma parte de nuestra política exterior, independientemente del partido que gobierne.
La Bolivia de Evo Morales tuvo crecimiento económico, reducción de la pobreza e indicadores bastante positivos, evidentemente ello no justifica la intención de reelegirse indefinidamente, pero por la coyuntura latinoamericana, solemos creer que son lo mismo Bolivia, Venezuela y Cuba, como si sus sistemas, resultados y estándares de vida fuesen los mismos, tremendo error.
En México, la comunidad venezolana en su mayoría se ha manifestado contra la decisión de la cancillería mexicana, suponen —erróneamente de nuevo— que ello significa un apoyo no solo al régimen de Evo —y no a la persona— sino al de Maduro también. Olvidan que Venezuela es el segundo país con más solicitudes de refugio aceptada, en el entendido que huye la gente de la dictadura de Maduro, si el gobierno mexicano —como suponen— estuviese del lado de Maduro, ¿recibirían a tantos venezolanos a través de la COMAR?.
Lo que ocurrió en Bolivia desde que interviene el ejército para deponer a un presidente es un golpe de estado claro, no hay vuelta de hoja.
El que México haya otorgado asilo a Evo Morales no supone un apoyo a su pensamiento político, es un gesto que México ha tenido históricamente.
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