Bolsas prohibidas
¬ Salvador Estrada jueves 16, Ene 2020Folclor urbano
Salvador Estrada
Los mercados y las tienditas de la Ciudad de México, fueron durante muchos años los establecimientos donde las mercancías se entregaban a los compradores envueltos en papel periódico.
Las verduras o las frutas se guardaban en un ”cucurucho”, hecho con el papel periódico, cuando la cantidad era un kilo o más, porque en menor cantidad solamente se envolvía en el papel.
¡Ah¡, pero también había papel de estraza, que otros negocios lo utilizaban y que volverán a hacerlo, como las tortillerías, y otros giros que tendrán que recurrir a él en sus ventas.
En los mercados el trato del comprador y del vendedor era muy coloquial: ”¿Qué se va a llevar ‘marchanta’?” “Marchantita,¿qué le vendo? Y esta palabra ya casi no tiene uso en los mercados. Marchante, según el diccionario, es una persona que tiene como oficio comprar y vender.
Bueno, esta acotación es parte histórica de los mercados que viene al caso, porque ahora los “cucuruchos” de papel regresan a los mercados, porque ya está prohibido usar las bolsas de plástico y quien las use para guardar los productos expendidos será multado.
En este siglo, donde todo cambia o está cambiando, se usó la bolsa plástica en lugar del papel periódico para envolver o guardar y para muchos era muy cómoda, pero esas bolsas “están condenadas a desaparecer” porque no se pueden desintegrar tan fácilmente, llevan años y su destino final es “ir al fondo del mar”, a donde se arrojan como basura.
Y en el mar los peces y cetáceos, las confunden con alimentos y se ahogan y ya hay cientos, miles de toneladas de esos productos derivados del petróleo que se están acumulando en el fondo de los océanos.
Por esta razón, ya no deben utilizarse en las compras de diversos productos las bolsas de plásticos chicas, medianas y grandes y quienes las den a sus clientes tendrán que pagar diversas cantidades de dinero.
Las grandes tiendas, donde más se estaban usando las bolsas de plástico ya empezaron a cambiarlas por bolsas de papel, porque si son sorprendidos dando “las bolsas prohibidas” serán sujetos de multa y tendrían que pagar ¡hasta 170 mil pesos¡
Esta multa está “para llorar” y se debe reglamentar el cuánto y el por qué de este castigo porque obviamente es excesivo y no se debe amenazar con ello a los comerciantes y a los grandes almacenes.
Todavía se puede apreciar en los puestos de tacos el uso de las bolsas plásticas y no se les puede multar a los “taqueros” con esa “multa estratosférica”.
Las autoridades deben dar mayor información porque hasta ahora las bolsas permitidas son “las bolsas biodegrabales” y también deben dar a conocer que se debe hacer con tantas y tantas bolsas de plástico que tienen los comerciantes guardadas en sus negocios.