Fieles esperan más de 5 horas para ver el cuerpo del Papa Francisco
* Destacadas, Mundo viernes 25, Abr 2025- Último adiós cargado de fe, gratitud y esperanza
- El luto vaticano acabará el domingo 4 de mayo para seguir con el cónclave
En un ambiente de profundo respeto, oración y emoción, miles de fieles esperan en filas de hasta cinco horas para despedirse del papa Francisco en la Basílica de San Pedro, por lo que se decidió que permaneciera abierta de forma ininterrumpida hasta este viernes por la noche, con cierres breves únicamente para labores de limpieza.
Para acceder a la capilla ardiente, las personas deben pasar controles similares a los de los aeropuertos, con escáneres de rayos X y detectores de metales. Además, efectivos de la policía y del ejército custodian los alrededores. El gobierno italiano, en coordinación con el Vaticano, ha desplegado un operativo de seguridad con más de 4,000 elementos policiales y ha establecido una zona de exclusión aérea sobre Roma.
El funeral está programado para celebrarse el sábado 26 de abril y se espera la asistencia de más de 200,000 personas, incluyendo dignatarios internacionales.
Cumplidas 24 horas desde la apertura de la iglesia más grande del mundo, el Vaticano indicó que más de 61,000 fieles han presentado sus respetos al primer pontífice latinoamericano.
La capilla ardiente se mantendrá hasta el viernes de noche, previo a un funeral de Estado que contará con la asistencia de presidentes como Donald Trump, Javier Milei y Lula da Silva, así como el rey Felipe VI de España y el secretario general de la ONU, António Guterres.
Despedida que ha unido a millones de creyentes
El legado del Papa Francisco trasciende fronteras y credos, y su despedida ha unido a millones de creyentes en un último adiós cargado de fe, gratitud y esperanza.
El gobierno italiano prevé la participación de entre 150 y 170 delegaciones extranjeras en el servicio y reforzó la seguridad de la capital de Italia, con cierre de vías y estrictos controles.
El entierro de Jorge Mario Bergoglio será el sábado en la basílica de Santa María la Mayor de Roma, el primero de un pontífice fuera del Vaticano desde León XIII en 1903.
El jesuita argentino dispuso un servicio sin lujos, en línea con su pontificado. Y exigió que sus restos no fueran colocados en un catafalco, a diferencia de sus antecesores.
Tras fijar la fecha del funeral, los cardenales decidieron el miércoles que los tradicionales nueve días de duelo en el Vaticano tras la muerte de un pontífice -novendiales- comenzarán este sábado.
El primer día de ese periodo de luto será ya el de su funeral y después será enterrado en la basílica romana de Santa María La Mayor. Esta celebración se repetirá diariamente y estará abierta a quien quiera rezar por el alma del pontífice argentino.
Una vez superado este periodo de nueve días, podrá convocarse el cónclave para elegir un sucesor, en un plazo que no puede superar los 20 días desde la muerte del Papa, por lo que su inicio será entre el 5 y el 10 de mayo.
El luto vaticano acabará el 4 de mayo
Las “novendiales”, el periodo tradicional de nueve días de luto que siguen a la muerte de un Papa, terminarán el próximo 4 de mayo, según confirmó este miércoles la Santa Sede, y después de ese día se convocará el cónclave.
El maestro de ceremonias vaticano, el arzobispo Diego Ravelli, explicó en un comunicado que la primera misa en recuerdo de Francisco tendrá lugar el 26 de abril a las 10.00 horas locales (8.20 GMT) en la basílica de San Pedro.
Y la novena y última tendrá lugar el 4 de mayo a las 17.00 horas locales (15.00 GMT) en el mismo lugar, presidida por el cardenal Dominique Mamberti.
Las ‘Novendiales’ (del latín ‘novem diem’, nueve días) seguirán al funeral del papa Francisco, fallecido el pasado lunes a los 88 años a causa de un ictus y cuyo féretro será expuesto hasta ese día en la basílica vaticana para su despedida por miles de fieles.
Por eso, el primer día de ese periodo de luto será ya el de su funeral y después será enterrado en la basílica romana de Santa María La Mayor.
Esta celebración se repetirá diariamente y estará abierta a quien quiera rezar por el alma del pontífice argentino.
Una vez superado este periodo de nueve días podrá convocarse el cónclave para elegir un sucesor, en un plazo que no puede superar los 20 días desde la muerte del papa, por lo que su inicio se prevé entre el 5 y el 10 de mayo.
Además, las honras de las ‘novendiales’ exigen la participación de los cardenales, que oficiarán el rito, como el decano Giovanni Battista Re, que presidirá el funeral, o el actual secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, entre otros.
El cónclave
Un total de 133 cardenales, con una media de 70 años y nombrados en su mayoría por el papa Francisco, se reunirán en cónclave para elegir al próximo pontífice. La representación europea aún domina, pero menos que en la última elección.
Como el límite de edad para ser convocado al Cónclave es de 80 años, 117 cardenales no participarán en la elección del próximo líder de la Iglesia Católica, prevista para principios de mayo.
Entre los cardenales electores, los del viejo continente serán los más numerosos en la Capilla Sixtina, con 53 representantes, es decir, el 39%.
En 2013, durante el cónclave que condujo a la elección del papa Francisco, 60 de los 115 cardenales eran europeos, es decir el 52%.
Tras los cardenales europeos le siguen este año los de Asia (23), América del Sur y Central (21), África (18), América del Norte (16) y Oceanía (4), según la Santa Sede.
Italia volverá a ser el país más representado en las deliberaciones, con 17 participantes, aunque este número es inferior a los 28 de 2013.
Estados Unidos (10) y Brasil (7) completan el podio de países con más cardenales participantes en el cónclave. Francia y España cuentan con cinco cada uno.
Argentina, el país natal de Francisco, tendrá cuatro representantes, al igual que Canadá, India, Polonia y Portugal.
Costa de Marfil, con dos cardenales electores, será el único país africano que contará con más de un cardenal en el cónclave.
A la lista de 70 países representados se sumará Jerusalén, una ciudad representada por el patriarca latino de la Ciudad Santa, Pierbattista Pizzaballa, que el lunes cumplió 60 años. La edad media exacta del cónclave es de 70 años y 4 meses.
Su decano es actualmente Carlos Osoro Sierra, nombrado arzobispo de Madrid en 2014 por el papa Francisco. Cumplirá 80 años el 16 de mayo.
El benjamín del cónclave es el arzobispo de Melbourne (Australia), Mykola Bychok, de 45 años, 2 meses y 69 días, elevado a la púrpura cardenalicia en diciembre. De los 135 cardenales convocados al cónclave, 108 fueron nombrados por el papa Francisco, Benedicto XVI nombró a 22 y Juan Pablo II a cinco.
Cardenales mexicanos elegibles
Los únicos dos cardenales mexicanos que podrían llegar a ser votados y que podrán votar por el nuevo papa de la Iglesia, serán Carlos Aguiar Retes, nacido el 9 de enero de 1950, y Francisco Robles Ortega, nacido el 2 de marzo de 1949.
Aguiar Retes, actual arzobispo primado de México, inició su formación en el Seminario de Tepic y continuó sus estudios de Teología en instituciones de Estados Unidos y México, posteriormente, fue ordenado sacerdote en 1973 y, en 2016, el papa Francisco lo nombró cardenal. En 2017, asumió su cargo actual, liderando una de las arquidiócesis más importantes del mundo, detalló la propia circunscripción eclesiástica.
Robles Ortega es arzobispo de Guadalajara desde 2012. Su nombramiento fue realizado por el Papa Benedicto XVI en 2011, consolidando su posición como una figura clave en la Iglesia mexicana, además, ha sido un defensor de los valores tradicionales y ha trabajado en diversas iniciativas pastorales para fortalecer la fe en su arquidiócesis.











