Robo y fraude, riesgos del impuesto a remesas de migrantes
Mundo martes 27, May 2025
- Afectaciones a migrantes y a sus familias en México
- Expertos ven la intromisión de organizaciones criminales

El gravamen a remesas es “discriminatorio” y posiblemente llevará a indocumentados a rutas no convencionales y riesgosas para enviar dólares a sus familiares, señalan especialistas.
Pese a una rebaja de 5 a 3.5 por ciento del impuesto a las remesas de migrantes, ante la presión de varios grupos que hizo efecto en la negociación del monto en el Congreso estadounidense, el gobierno de Donald Trump prevé recaudar unos 22,000 millones de dólares de 2026 a 2034, una recaudación anual promedio de 2,700 millones de dólares.
De aprobarse el proyecto en los términos en que está el Senado estadounidense, la población migrante indocumentada estaría pagando 35 dólares por cada 1,000 dólares que envíen a sus familias.
Esta cifra, señalan expertos, podría reducirse significativamente por varios motivos. Uno de estos es que los usuarios buscarían otros métodos o servicios paralelos, como las criptomonedas o recurrir a rutas riesgosas para el envío de dinero a sus países de origen, dejándolos expuestos a fraudes y robos.
El gravamen impactaría directamente a los inmigrantes indocumentados y a los no ciudadanos, pues la medida incluida en la proyecto de ley con los planes de Donald Trump aprobado la semana pasada en la Cámara de Representantes y que ahora evaluará el Senado excluye únicamente a los ciudadanos y nacionales.
Gerardo Esquivel, ex subgobernador del Banco de México (Banxico), opina que la medida es “discriminatoria” y posiblemente llevará a los inmigrantes indocumentados a rutas no convencionales y riesgosas para enviar las remesas a sus familiares. Una de esas vías podría ser la de regresar al envío de dinero en efectivo a través de terceras personas, declaró.
También “pueden ser víctimas, por supuesto, de fraudes, de gente que les diga, ‘si tú lo envías por aquí no pagas el gravamen’, y que simplemente sea un fraude”, dijo el también académico del prestigioso Colegio de México (Colmex). “Pueden recurrir al envío de dinero en efectivo corriendo el riesgo de perderlo o que se lo roben”, agregó.
Desde que fue planteada la propuesta de gravar las remesas, analistas y expertos advirtieron sobre el impacto que una medida así tendría en los envíos de dinero y sobre los riesgos de que los inmigrantes recurran a canales irregulares para enviar recursos.
Los números que reflejan su magnitud
Año con año, la llegada de remesas ha roto récords en México, aunque recientemente ha dado indicios de una desaceleración, de acuerdo con datos de Banxico, el banco central. En 2024, por ejemplo, México recibió 64,746 millones de dólares por ese concepto y, entre enero y marzo de este año, las remesas acumulan 14,268.9 millones de dólares, un 1.3% más que el mismo periodo de 2024.
En el plano global, la región de Latinoamérica y el Caribe es una de las principales receptoras de remesas, de acuerdo con datos del Banco Mundial. En su reporte de 2023 sobre las remesas, el organismo indicó que la región recibió 155,000 millones de dólares por ese concepto, siendo México el principal receptor.
Para Esquivel, sin embargo, el impuesto a las remesas, de quedar como está en la ley avalada en Estado Unidos, no resultaría en un impacto en la macroeconomía en el caso mexicano, sino en un golpe a los hogares que dependen directamente de los envíos.
“No creo que tenga ese tipo de choques negativos, sino más bien insisto que será a nivel de hogar, a nivel distributivo creo que será el impacto más importante”, dijo el también académico de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“Que se le cobre a unos personas y a otros no, ésa es una cosa discriminatoria, aunque no sean ciudadanos estadounidenses, es claramente una flagrante violación en términos de discriminación”, consideró.
“Vulnerables al crimen y robos”: expertos
Gabriela Siller, directora de la institución financiera mexicana Banco Base, coincidió en que “existe el riesgo” de que los inmigrantes indocumentados recurran a rutas irregulares para enviar las remesas para evitar el pago del impuesto que está ahora en discusión. Dijo que probablemente los inmigrantes buscarán la ayuda de amigos o familiares exentos del pago de ese potencial gravamen en Estados Unidos, para que sean ellos quienes envíen las remesas, que para el caso mexicano rondan en promedio los 400 dólares al mes.
Ante las trabas que se buscan imponer al envío de remesas, otra ruta que podría buscar los inmigrantes, dijo Siller, sería el envío de dinero en efectivo, que implica más riesgos. “También tratarán de enviarlo con familiares que viajen a México”, dijo. “Obviamente está la inseguridad de que el dinero realmente llegue a quien se tenía como destino final”.
“Si se viaja por carretera, pues ahí hay una mayor inseguridad, sobre todo por la inseguridad pública que hay en México en la frontera, que puedan robar con mucha facilidad”, recordó.











