Mujeres presas encuentran esperanza en el arte de tejer
Quintana Roo lunes 7, Jul 2025- Tejiendo segundas oportunidades
- Lanzan iniciativa para brindar segundas oportunidades reclusas en Q. Roo

El impacto del programa no se limita a las mujeres privadas de la libertad. También alcanza a sus familias, especialmente a sus hijos e hijas.
Por redacción DIARIOIMAGEN
Chetumal.- En un esfuerzo por transformar el sistema penitenciario en un espacio de dignificación y esperanza, el gobierno de Quintana Roo ha lanzado el programa “Mujer, Reintégrate”, una iniciativa que busca brindar segundas oportunidades a mujeres privadas de la libertad en los Ceresos de Cancún y Chetumal. A través del arte del crochet, estas mujeres no sólo tejen artesanías, sino también nuevas posibilidades de vida.
La firma del convenio, reunió a diversas instituciones: la Secretaría de las Mujeres (Semujeres), la Secretaría de Seguridad Ciudadana, el Sistema DIF estatal y la organización civil La Cana, reconocida por su trabajo en reinserción social femenina.
El programa capacita a las internas en técnicas de crochet para la elaboración de productos artesanales. Estas piezas, una vez que cumplen con estándares de calidad, son comercializadas, y las ganancias se entregan directamente a las creadoras. La formación dura entre tres y cuatro meses y contempla también atención psicológica y desarrollo personal.
Hasta ahora, 35 mujeres han concluido exitosamente el primer ciclo de capacitación en el penal de Cancún, y se espera que más de 250 mujeres participen en las siguientes etapas.
La asociación civil La Cana, liderada por mujeres comprometidas con la justicia social, se encarga de implementar los talleres y acompañar a las internas en su proceso de reintegración. Su enfoque va más allá de la capacitación técnica: promueve la autoestima, la independencia económica y la reconstrucción de vínculos familiares.
“Transformar la vida de cualquier ser humano es una responsabilidad colectiva. Este programa no solo reduce la reincidencia, también devuelve la esperanza”, afirmó Wendy Balcázar, directora de Políticas Públicas de La Cana.
El impacto del programa no se limita a las mujeres privadas de la libertad. También alcanza a sus familias, especialmente a sus hijos e hijas, quienes se benefician emocional y económicamente de la estabilidad que sus madres comienzan a recuperar.
La presidenta honoraria del DIF, Verónica Lezama Espinosa, subrayó la importancia de acompañar estos procesos con sensibilidad y compromiso “No se trata solo de capacitación, sino de reconstruir vidas, de decirles que no están solas”.
“Mujer, Reintégrate” es más que un programa: es un acto de justicia restaurativa, una apuesta por la resiliencia y una muestra de que, incluso tras los barrotes, es posible volver a empezar.











