Playas libres de contaminantes y listas para recibir a miles de turistas
Quintana Roo domingo 27, Jul 2025DERECHO DE REPLICA José Luis Montañez

La Cofepris ha confirmado que todas las playas públicas de Quintana Roo son aptas para actividades recreativas.
- La Cofepris confirma que son aptas para actividades recreativas
En vísperas del periodo vacacional de verano 2025, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha confirmado que todas las playas públicas de Quintana Roo son aptas para actividades recreativas, tras superar los estándares de calidad bacteriológica establecidos por las autoridades sanitarias.
Durante las semanas previas al arranque de la temporada alta, Cofepris, en coordinación con la Secretaría de Salud estatal y la Red Nacional de Laboratorios de Salud Pública, realizó un muestreo en 29 puntos costeros del estado. El objetivo fue detectar la presencia de enterococos, bacterias indicadoras de contaminación fecal, y determinar si las playas representan un riesgo para la salud.
Los resultados fueron alentadores: ninguna playa de Quintana Roo rebasó el límite permitido de 200 enterococos por cada 100 mililitros de agua, lo que garantiza condiciones seguras para nadar y disfrutar del mar.
Las playas evaluadas y aprobadas incluyen:
– Cancún: Delfines, Marlín, Tortugas, Langosta, Las Perlas y El Niño.
– Puerto Morelos: Toda la franja costera.
– Cozumel: Las Casitas, Centro, Dzul-Ha, Chankanaab, Rastas, Bonita, Caletita, San Martín I y II, y Chen Río.
– Isla Mujeres: Playa Centro y Playa Norte.
– Riviera Maya: Chunzubul, Porto Real, Muelle Fiscal, Lancheros, Punta Esmeralda I y II, Paamul.
– Mahahual (Othón P. Blanco): Zonas frente al restaurante Tequila, Minisúper Carolina, El Faro y Hotel 40 Cañones.
– Tulum: Zamas, Maya 1, 2 y 3, y Xcacel.
Mientras Quintana Roo celebra estos resultados, otras playas del país enfrentan retos sanitarios. Sitios como Playa Tijuana (Baja California), Playa El Real (Colima), y varias playas de Acapulco, Puerto Vallarta, Michoacán y Oaxaca fueron declaradas no aptas para uso recreativo por exceder los niveles permitidos de contaminación.
La Cofepris exhortó a la ciudadanía y al sector turístico a mantener la limpieza de los arenales, subrayando que la conservación de estos espacios naturales es una responsabilidad compartida. Factores como drenajes pluviales, escorrentías, asentamientos irregulares y falta de infraestructura de saneamiento pueden afectar la calidad del agua si no se atienden de forma integral.
Pez diablo: Alerta ecológica en Ramonal
En una jornada comunitaria que revela la magnitud de una amenaza ambiental silenciosa, habitantes de la comunidad de Ramonal, en el municipio de Othón P. Blanco, lograron capturar hasta 500 ejemplares de pez diablo (Hypostomus plecostomus) en apenas 48 horas, encendiendo las alarmas sobre la expansión acelerada de esta especie invasora en cuerpos de agua dulce del sur de Quintana Roo.
El pez diablo, originario de Sudamérica y popularizado como mascota en acuarios, ha colonizado desde 2013 zonas como el río Hondo, la bahía de Chetumal, Calderitas, Laguna Guerrero, Bacalar y recientemente cuerpos de agua cercanos a Felipe Carrillo Puerto. Su capacidad de adaptación y reproducción lo convierte en una amenaza directa para especies nativas como la bocona, la cabezona y la pinta, cuya presencia ha disminuido drásticamente.
Según investigadores de El Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), este pez excava túneles que erosionan riberas, remueve sedimentos, deteriora la calidad del agua y compite por alimento y espacio, interrumpiendo los ciclos reproductivos de otras especies.
Joana Cab, pobladora de Ramonal y participante activa en las brigadas de captura, relató que ante la falta de un esquema oficial de aprovechamiento, los ejemplares son sacrificados y enterrados para usarlos como abono. “Empezamos a notar que las especies nativas ya no se capturan como antes. Pedimos más apoyo porque nuestros recursos no alcanzan para sostener las brigadas”, expresó.
Además, hizo un llamado urgente a la población para evitar liberar estos peces en cuerpos de agua tras criarlos en peceras, una práctica que ha contribuido a su propagación.
Ante el avance imparable del pez diablo, se ha conformado un grupo especializado con participación del Instituto de Biodiversidad y Áreas Naturales Protegidas de Quintana Roo (Ibanqroo), el Instituto Tecnológico de Chetumal (ITCH), la Universidad de Quintana Roo (UQROO), y autoridades municipales de Othón P. Blanco, Bacalar y Felipe Carrillo Puerto.
Las acciones incluyen:
– Capturas dirigidas y monitoreos nocturnos en zonas críticas como Cocalitos y Buenavista.
– Estudios genéticos para rastrear el origen y vías de introducción.
– Educación ambiental en comunidades ribereñas.
– Campañas de pesca intensiva y regulación del manejo de ejemplares capturados.
Expertos advierten que, sin una estrategia más agresiva y respaldo oficial, el sur de Quintana Roo podría enfrentar un colapso ecológico similar al de otras regiones del país, donde el pez diablo representa hasta el 90 % de las capturas pesqueras.
La captura de 500 ejemplares en solo dos días en Ramonal no solo evidencia la rapidez de la invasión, sino también la urgencia de reforzar las acciones de contención. La comunidad, aunque comprometida, necesita apoyo institucional para evitar que esta especie siga desplazando la biodiversidad local y alterando los ecosistemas acuáticos del Caribe mexicano.
La Profepa intensifica clausuras en Holbox
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ha clausurado de manera total y temporal dos desarrollos inmobiliarios en la isla de Holbox, tras detectar afectaciones directas al ecosistema de manglar y obras sin autorización ambiental. Las acciones se enmarcan en una estrategia más amplia para frenar el crecimiento descontrolado en zonas de alta sensibilidad ecológica dentro del Área de Protección de Flora y Fauna Yum Balam.
Durante operativos realizados los días 16 y 17 de julio, inspectores de Profepa identificaron irregularidades en dos predios:
Punta Ciricote: Se observaron caminos abiertos entre vegetación de manglar, zonas desprovistas de flora y señalamientos para la lotificación del terreno.
Calle Pedro Joaquín Coldwell: Se detectó la construcción de una bodega temporal, maquinaria pesada, herramientas y 46 pilotes de concreto, lo que sugiere la intención de cimentar edificaciones sin permisos.
Ambos predios se encuentran dentro de Yum Balam, por lo que cualquier obra requiere autorización previa en materia de impacto ambiental emitida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). Al no presentar dicha documentación, se procedió a la clausura.
Holbox, conocida por su biodiversidad y atractivo turístico, enfrenta una creciente presión inmobiliaria. Los manglares, además de ser hábitat de especies endémicas, actúan como barreras naturales contra huracanes y reguladores del clima. La destrucción de estos ecosistemas pone en riesgo no solo la biodiversidad, sino también la seguridad ambiental de la región.
Profepa recordó que las autorizaciones ambientales son obligatorias para cualquier desarrollo en ecosistemas costeros, y su omisión puede derivar en sanciones administrativas y legales.
Estas clausuras se suman a las realizadas en junio en Puerto Morelos, donde siete desarrollos fueron suspendidos por carecer de permisos o exceder la superficie autorizada. Además, Profepa ha ejecutado operativos especiales en Campeche, Yucatán y Quintana Roo, clausurando predios que afectaron más de 2,600 hectáreas de selvas, manglares y zonas costeras.
Con estas acciones, Profepa reafirma su compromiso con la protección del patrimonio natural de Holbox y exhorta a los desarrolladores a cumplir con la normatividad ambiental antes de iniciar cualquier proyecto. La vigilancia continuará en otras zonas costeras del estado, donde el crecimiento turístico debe equilibrarse con la conservación ecológica.
Cámaras de videovigilancia y sistemas GPS en taxis de Cancún
- Refuerzan seguridad ante ola de violencia
En respuesta a los recientes hechos de violencia que han sacudido al gremio de taxistas en Quintana Roo, el Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo” anunció la implementación de un programa de seguridad que contempla la instalación de cámaras de videovigilancia y sistemas GPS en las unidades de transporte público de Cancún.
Rubén Carrillo Buenfil, secretario general del sindicato, calificó como “preocupante” la situación de inseguridad que afecta no solo a los taxistas, sino a toda la sociedad. En su declaración, subrayó que los homicidios de alto impacto, como los ocurridos recientemente en Playa del Carmen y Lázaro Cárdenas del Río, evidencian una problemática que va más allá del gremio y requiere atención urgente.
“Esto no es solo un tema de taxistas. Como ciudadano, me preocupa que la violencia esté permeando todos los sectores”, expresó Carrillo Buenfil, quien también forma parte del Frente Único de Trabajadores del Volante (FUTV).
El nuevo programa contempla:
– Cámaras de videovigilancia al interior de los taxis, para registrar cualquier incidente durante el servicio.
– Sistemas GPS que permitirán rastrear en tiempo real la ubicación de las unidades.
– Coordinación con el Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo (C5) para integrar las cámaras al sistema estatal de monitoreo.
– Estas medidas buscan disuadir delitos, facilitar investigaciones y brindar mayor tranquilidad tanto a los operadores como a los pasajeros.
Carrillo reconoció que la Fiscalía General del Estado investiga el grado de infiltración del crimen organizado en los sindicatos de taxistas. Aunque no ofreció cifras concretas sobre posibles vínculos del gremio con actividades ilícitas, insistió en que se debe esclarecer cualquier implicación para recuperar la confianza ciudadana.
La iniciativa se suma a otras acciones emprendidas por el sindicato, como la conexión de 84 cámaras de seguridad en sus instalaciones al sistema C5, y la implementación de filtros más estrictos para la contratación de operadores, incluyendo pruebas psicológicas, antidoping y revisión de antecedentes penales.
Con este programa, el gremio de taxistas de Cancún busca revertir la percepción de inseguridad y contribuir a la protección de quienes dependen del transporte público. La medida representa un esfuerzo por recuperar la confianza ciudadana y garantizar que el servicio de taxi sea una opción segura en uno de los destinos turísticos más importantes del país.











