En la pobreza, 16% de migrantes mexicanos que viven Estados Unidos
Mundo jueves 14, Ago 2025- Población de 40.6 millones de personas
- El aumento de la tasa de desempleo registrado en julio añade un matiz de preocupación

De acuerdo con un estudio elaborado por el Consejo Nacional de Población (Conapo) y grupo BBVA México, al menos 16 de cada 100 personas de origen mexicano que viven en Estados Unidos lo hacen en condiciones de pobreza.
La Oficina del Censo de Estados Unidos considera en pobreza a una familia de cuatro integrantes con ingresos anuales menores a 30,900 dólares, es decir, 2,575 dólares mensuales.
En el país vecino radican alrededor de 40 millones 600 mil personas de origen mexicano, divididos entre primera, segunda y tercera generaciones. De ese universo, 6.6 millones, que equivalen a 16.25 por ciento –uno de cada seis– enfrenta condición de pobreza, según el anuario de migración y remesas.
Se debe considerar como persona de primera generación a quienes nacen en México, llegan a Estados Unidos y conservan su cultura original; como segunda generación, aquellos nacidos en Estados Unidos de al menos un padre originario de nuestro país, y como tercera generación, a los nacidos en el país vecino de padres también nacidos ahí, pero que se identifican como mexicanos.
Según los datos, de los 6.6 millones que viven en esta situación, 2 millones 199 mil 266) pertenecen a la primera generación; 2 millones 383 mil 449, a la segunda, y un millón 995 mil 16, a la tercera.
La condición de pobreza entre la población mexicana en Estados Unidos ha disminuido independientemente de su generación: la tercera generación presenta en 2024 el valor más bajo (mujeres y hombres), y la segunda históricamente ha soportado la mayor carga económica debido a su elevado índice de dependencia. Sin embargo, en los últimos años hay convergencia con la tercera generación.
Distribución de connacionales
Del total de mexicanos que viven en esta situación y pertenecen a la primera generación, 39.1 por ciento (859 mil 318) radican en la región oeste (Far West), que incluye los estados de California, Washington, Nevada, Oregon, Hawái y Alaska.
Cabe destacar que, según el anuario, 21 por ciento de todos los migrantes que llegan a Estados Unidos arriban a California.
En tanto, en el suroeste hay 663 mil 629 mexicanos de primera generación (30.2 por ciento) que viven en situación de pobreza y en el sureste hay 346 mil 424 (15.8 por ciento).
En el anuario, el suroeste incluye los estados de Texas, Arizona, Oklahoma y Nuevo México, y el sureste comprende Georgia, Florida, Carolina del Norte, Tennessee, Carolina del Sur, Virginia, Alabama, Luisiana, Arkansas, Kentucky, Misisipi y Virginia Occidental.
Ingresos promedio
El documento divide entre hombres y mujeres los salarios que obtiene la población de origen mexicano en Estados Unidos.
Según la información, en promedio y al cierre de 2024, las mexicanas de primera generación ganaron 35 mil 612 dólares anuales; las de segunda generación, 43 mil 915 dólares al año, y las de tercera generación, 46 mil 433 al año.
En cuanto a los hombres, los de primera generación ganaron en promedio 43 mil 810 dólares al año; los de segunda generación, 52 mil al año, y los de tercera, 61 mil 213 dólares anuales.
Crece el desempleo en Estados Unidos
El informe de empleo de julio, publicado por el Departamento de Trabajo, reveló que Estados Unidos sumó 73,000 empleos ajustados estacionalmente, una cifra que se sitúa por debajo de las 100,000 plazas que anticipaban los analistas. Este resultado, junto con la revisión a la baja de los datos de los meses previos, ha intensificado la discusión entre quienes ven señales de resiliencia y quienes advierten fisuras en la economía.
El aumento de la tasa de desempleo a 4,2% desde el 4,1% registrado el mes anterior añade un matiz de preocupación. Además, las cifras de mayo y junio fueron corregidas de forma significativa: los empleadores generaron 258.000 empleos menos de lo que se había estimado inicialmente para ese bimestre, según el mismo informe del Departamento de Trabajo. Esta corrección refuerza la percepción de que el mercado laboral enfrenta una desaceleración más marcada de lo que sugerían los datos preliminares.
“Todos intentan descifrar hacia dónde se dirige la economía”, afirmó Jonathan Pingle, economista jefe para Estados Unidos en UBS, en un contexto donde los datos recientes del mercado laboral han encendido el debate sobre la solidez real de la recuperación.
El trasfondo de estos números es una economía que, según estima The Wall Street Journal, se debate entre dos narrativas contrapuestas:
- Por un lado, persiste la visión de una sorprendente capacidad de resistencia. Las amenazas arancelarias han comenzado a reflejarse en algunos precios, pero aún no han provocado una inflación generalizada. El consumo, que se había mostrado contenido en los primeros meses del año, muestra ahora signos de mayor confianza, lo que sugiere que la demanda interna sigue sosteniendo parte del crecimiento.
- En contraste, se multiplican las señales de vulnerabilidad. Empresas como Procter & Gamble y Chipotle Mexican Grill han reportado que sus clientes muestran una sensibilidad creciente ante los precios. Este fenómeno es especialmente notorio entre los consumidores jóvenes, quienes han reducido sus gastos en productos y servicios no esenciales. Además, el dinamismo económico parece concentrarse en los sectores de mayor poder adquisitivo, lo que plantea dudas sobre la amplitud y sostenibilidad de la expansión.
La incertidumbre sobre el rumbo de la economía se refleja en la diversidad de opiniones entre los expertos. Mientras algunos, como Guy Berger, investigador principal en el Burning Glass Institute, sostienen que la economía mantiene su estabilidad, otros advierten que las debilidades detectadas podrían profundizarse en los próximos meses.










