Se tropieza con la misma piedra
¬ Augusto Corro jueves 19, Sep 2013Punto por punto
Augusto Corro
Claro que son momentos difíciles los que vive México, luego de las inundaciones por las lluvias que provocaron “Ingrid” y “Manuel” a su paso por el territorio nacional.
Los dos meteoros afectaron todo lo que encontraron a su paso. En algunos sitios los daños fueron mayúsculos, como en Acapulco.
Concretamente, en el puerto “Manuel” se ensañó. Los daños fueron tan demoledores, que ya se habla de la reconstrucción de un nuevo Acapulco. Después de la tormenta retorna la calma que trae consigo las reflexiones sobre la tragedia que azotó varios estados y principalmente a Guerrero.
Nuevamente, la figura del gobernador Ángel Aguirre reaparece en el escenario de la tragedia, para otra vez calificarlo de ineficaz para contrarrestar los efectos destructivos de “Manuel”.
Los especialistas señalan que ante la amenaza de la tormenta tropical “hubo aplicación insuficiente” de medidas preventivas para cuidar a la población.
En algunos medios de información, los expertos en materia de protección civil señalan que “las autoridades subestimaron los efectos de una tormenta tropical”, y con este antecedente, sobrevino la “falta de coordinación”. Alguien tendrá que llamar a cuentas al gobernador Aguirre, quien, dicho sea de paso, ya enfrentó un problema similar con el huracán “Paulina”, cuando se desempeñaba como mandatario estatal interino.
Por cierto, los especialistas que revisan los daños a la flamante Autopista del Sol encontraron que la carretera fue construida con materiales de baja calidad y debilidad en los túneles.
Sin embargo, lo importante ahora es brindar ayuda a los miles de damnificados que tuvieron que soportar estoicamente los embates de “Manuel”. Ya habrá tiempo para llamar a cuentas a los ineptos y abusivos que agudizaron la situación de miles de guerrerenses y turistas porque no tomaron a tiempo las medidas preventivas del caso.
JUSTICIA CAPRICHOSA
Como en el caso del ex gobernador Andrés Granier, de Tabasco, en Aguascalientes, también le tiembla la mano a la justicia.
Nos referimos al asunto del ex mandatario estatal, Luis Armando Reynoso Femat, un tipo que debía estar tras las rejas y sin embargo sigue libre burlándose de la ley.
La jueza Margarita Zapata Vallejo giró orden de formal prisión contra el ex gobernador Reynoso Femat, luego de que éste no se presentó a depositar una fianza de 10 millones de pesos que le ordenó el Juzgado Tercero de Distrito, al haberle concedido un amparo con la condición de pagar la garantía.
El hecho es que el ex mandatario ya encontró la manera de burlarse de la justicia y será muy difícil verlo preso. Son varios delitos por los que se le acusa a Reynoso Femat, entre otros la venta de un predio propiedad del estado a un precio más bajo del real a la Constructora Urbi, en el 2009. El precio real del terreno era de 16 millones de pesos y lo vendió en 3.4 millones de pesos.
El ex gobernador citado también tiene un proceso por peculado y uso indebido del ejercicio público al estar vinculado con la simulación de la compra de un tomógrafo por valor de 13.8 millones de pesos.
Como señalamos arriba, Reynoso Femat y Andrés Granier se encuentran en espera de recibir el castigo de la ley; pero ésta a veces se vuelve muy lenta cuando se trata de ex funcionarios públicos.
UNA BUENA CAUSA
En la Cámara de Diputados se busca impulsar una iniciativa de Ley de Amnistía que permita liberar al profesor indígena Alberto Patishtán, quien se encuentra preso desde hace casi 13 años por delitos que no han sido comprobados.
Los promotores de dicha iniciativa la encabezan el comisionado para el Diálogo con los Pueblos Indígenas de México, Jaime Martínez Veloz, y el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles.
El diputado Aureoles buscará el respaldo a una legislación que no sólo contemple la liberación del profesor Patishtán, sino que también implique el apoyo necesario para los miles de indígenas que se encuentran presos por razones injustificadas en las cárceles del país.