Adiós al Pequeño gigante de la canción
* Especiales, Espectáculos lunes 6, Ene 2014- Nelson Ned falleció a los 66 años de edad, sufría de diabetes, hipertensión y estaba desarrollando Alzheimer. En 2003 sufrió un accidente vascular cerebral que le hizo perder la visión del ojo derecho y se desplazaba en silla de ruedas
Gloria Carpio
Luego de haber viajado por el mundo y de ser reconocido en decenas de países el cantante brasileño Nelson Ned murió ayer en un hospital de Cotía, en la región metropolitana de Sao Paulo, Brasil, como consecuencia de una neumonía grave, informaron fuentes oficiales, que de manera inmediata circularon la noticia.
Con 66 años de edad, el cantante se encontraba desde hace varios meses internado en dicho hospital de aquella región, de hecho, La Asesoría de Prensa de la Secretaría de Salud del Estado de Sao Paulo indicó que el artista murió víctima de “complicaciones clínicas”, como consecuencia de una neumonía grave, una infección respiratoria aguda y problemas en la vejiga.
Fue desde el pasado 24 de diciembre cuando Ned fue internado en una clínica de reposo de Granja Viana, en el municipio de Cotía, pero la noche del pasado sábado ingresó al Hospital Regional de la ciudad.
En 2003 Nelson comenzó a presentar problemas de salud, tan sólo meses después de que el cantante sufrió un accidente vascular cerebral. Como consecuencia, perdió la visión del ojo derecho y se desplazaba en silla de ruedas. También padecía diabetes, hipertensión arterial y Alzheimer en fase inicial.
Nelson Nesd fue conocido como el pequeño gigante de la canción, como era conocido por su estatura de 1.12 metros, se consagró en la década de 1960 como una de las voces románticas más famosas de Brasil y su éxito internacional llegó con la grabación de varios discos en español.
De sus canciones figuran “Si las flores pudieran hablar” y “Recuérdame”, que se convirtieron en los éxitos más románticos en América Latina.
El brasileño tuvo una vida de excesos por lo cual estaba sumergido en varios vicios, aunque años más tarde se convirtió a la religión evangélica y desde entonces, interpretó música religiosa en portugués y español.
Diversas fuentes indican que fue el pequeño gran artista latinoamericano en vender un millón de discos en Estados Unidos, así como 45 millones de copias de discos en todo el mundo y se presentó al lado de grandes cantantes como Tony Benett y Julio Iglesias.












