En la postmenopausia, riesgo de sufrir “síndrome del corazón roto”
Elsa Rodríguez Osorio, Salud viernes 19, May 2017Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- El 80% de los accidentes por intoxicación ocurren en el domicilio
Las mujeres en la postmenopausia tienen más riesgo de sufrir “síndrome del corazón roto”, conocido como miocardiopatía de Takotsubo, a consecuencia de los cambios hormonales, niveles altos de estrés y depresión asociada con el fallecimiento o pérdida de la pareja. Este trastorno afecta el corazón y le provoca movimiento anormal e incontrolado, además de cambios en la microcirculación, que consiste en el movimiento de la sangre en el sistema vascular, explica el cardiólogo de IMSS, Pavel García Salgado. El síndrome ocurre de manera imprevista en pacientes de la tercera edad. Se manifiesta con dolor en el pecho y dificultad para respirar, síntomas parecidos a los del infarto. Por lo general, el dolor se presenta por una situación emocional, inicia en el pecho y se extiende hacia el brazo izquierdo, por lo que se realiza un electrocardiograma y de acuerdo con el resultado, se define o descarta un cuadro de cardiopatía isquémica. En el IMSS se brinda tratamiento para el “síndrome del corazón roto” mediante manejo trombolítico, que consiste en el uso de fármacos para romper o disolver los coágulos dentro de las seis horas siguientes al inicio del dolor. Se trata igual que un infarto agudo de miocardio: la paciente es hospitalizada, se le realiza un electrocardiograma, además de valoración de enzimas cardiacas y ecocardiograma, se va estabilizando y clasificando hasta llegar al cateterismo para verificar el estado de las arterias. Enseguida se inicia el tratamiento anti-isquémico, con vaso-dilatadores coronarios; también un estudio de medicina nuclear para corroborar la función de la microcirculación. Posteriormente, pasa a rehabilitación cardiaca durante dos meses, con ejercicios en bicicleta fija o caminadora, para mejor su condición médica y cardiológica. El síndrome puede prevenirse, evitando factores de riesgo: tabaquismo, depresión, obesidad y sobrepeso y mantener una alimentación baja en grasas de origen animal.
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Por su disponibilidad, bajo costo y alta eficacia, los plaguicidas son usados frecuentemente con fines suicidas y en caso de no fallecer, provocan secuelas permanentes. La doctora María del Carmen Socorro Sánchez Villegas, jefa del Departamento de Toxicología Clínica del Centro Médico Nacional La Raza, del IMSS, señaló que 80% de los accidentes por intoxicación ocurren en el domicilio. Recomienda un control estricto en el uso de estas sustancias tóxicas en casa. La atención a personas por intoxicación por plaguicidas ocupa el cuarto lugar en materia de envenenamientos agudos en este servicio. Hay que evitar el consumo de productos que pueden ser tan letales como el fosfuro de zinc, que se utiliza para matar ratones y que en el mercado puede encontrarse a muy bajo costo. Otra sustancia potencialmente nociva es la sosa cáustica, su compra es de fácil acceso y se vende a granel en altas concentraciones. Otros productos potencialmente tóxicos y que pueden estar en el botiquín de cualquier familia son: fármacos como paracetamol, carbamazepina y medicinas para el control de la diabetes que deben estar resguardados y bajo vigilancia, sobre todo si en casa hay niños o adolescentes. Afirma que existen situaciones predisponentes para el intento de suicidio de este grupo de edad: por enfermedades crónico degenerativas, disfunción familiar: el divorcio o la separación de los padres, problemas de comunicación, agresiones y violencia. En el ámbito académico: bajo rendimiento escolar, reprobar una materia o un año completo; la imposibilidad para acceder a una institución superior o el fracasar en un examen de admisión. También el “bullying” es una condicionante importante en el paciente adolescente para favorecer el intento de suicidio. La especialista enfatizó que en caso de intoxicación, no se debe administrar ningún medicamento ni neutralizantes como agua con bicarbonato con jugo de limón, leche u otros remedios. La administración de leche favorece la absorción más rápida de los productos e incluso perjudica el tubo digestivo de los pacientes cuando han ingerido un corrosivo y aumentan la evolución de una quemadura. Al momento de descubrir la ingesta de algún medicamento o sustancia tóxica, ya sea de manera incidental o por intento de suicidio, es vital que el afectado sea llevado de inmediato a los servicios de urgencias del IMSS para recibir valoración médica y atención oportuna que puede salvarlo.