Donald Trump toma posesión como en un clima de incertidumbre global
* Destacadas, Mundo lunes 20, Ene 2025- Inicia nueva era en el gobierno de Estados Unidos

Este lunes 20 de enero, Donald Trump toma posesión como el presidente número 47 de Estados Unidos, para convertirse en el segundo mandatario en la historia del país en servir dos mandatos no consecutivos.
En medio de un clima de incertidumbre global, principalmente en la región de América del Norte, este lunes 20 de enero, Donald Trump toma posesión como el presidente número 47 de Estados Unidos, para convertirse en el segundo mandatario en la historia del país en servir dos mandatos no consecutivos, después de Grover Cleveland en el siglo XIX.
Esta jornada, que representa la 60.ª inauguración presidencial en la historia de la nación norteamericana, estará llena de simbolismo y tradiciones. La ceremonia oficial de toma de posesión de Donald Trump está programada para las 12:00 p. m. (hora del este), como establece la 20.ª Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos.
La jornada comienza con un servicio religioso en la iglesia de St. John’s, conocida como la “Iglesia de los Presidentes”, seguido de una reunión privada que tendrá lugar en la Casa Blanca en el que participarán el presidente Joe Biden, su esposa Jill Biden, el presidente electo Donald Trump, y su esposa Melania Trump.
La ceremonia principal tendrá lugar en el interior del Capitolio, donde Trump jurará su cargo con la mano sobre la Biblia, “un acto lleno de simbolismo en el que el mandatario expresa su compromiso con la Constitución y el país”.
Posteriormente, pronunciará un discurso inaugural, “en el que esbozará los objetivos de su administración y su visión para el futuro”.
Tras el juramento, se llevará a cabo una ceremonia de firma en la Sala Presidencial del Capitolio, en la que Trump rubricará sus primeras acciones como presidente.
Tras la juramentación, manos a la obra
Tras la toma de posesión, Donald y Melania Trump se instalarán en la Casa Blanca y la nueva administración pondrá manos a la obra.
Trump ha trabajado en más de 100 órdenes ejecutivas que, dijo, aprobaría en su primer día como mandatario, entre las que destacan las de seguridad fronteriza y deportaciones, debido a la incertidumbre que representa para muchos migrantes que viven en EU.
El equipo de Donald Trump preparó una agresiva serie de decretos en materia de inmigración que se espera que se hagan públicas sólo unas horas después de que el presidente electo jure el cargo, dando inicio a una campaña de represión de la inmigración que tendrá implicaciones para la población de todo el país, según dos fuentes familiarizadas con las conversaciones.
El paquete de medidas supone un cambio drástico en la política de inmigración que afectará a los inmigrantes que ya residen en Estados Unidos y a los solicitantes de asilo.
El plan incluye barridos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas en las principales áreas metropolitanas, el envío de más recursos del Pentágono a la frontera sur de EU, la imposición de restricciones adicionales sobre quién tiene derecho a entrar en EU, junto con el retroceso de las políticas de la era Biden.
“Veremos aviones de expulsión, informes de detenciones, acciones del ICE en jurisdicciones santuario”, dijo una fuente. “A medida que pasen los 30 días y los primeros 100 días, ahí es donde se verá un repiqueteo consistente”.
Las fuentes sostienen que la administración entrante se centrará, al menos al principio, en los inmigrantes indocumentados con antecedentes penales susceptibles de ser expulsados en las principales áreas metropolitanas, como las ciudades de Washington, Denver y Chicago.
Deportación masiva, algo sin precedentes
El enfoque de Trump en la deportación masiva, probablemente utilizando personal militar, algo sin precedentes en la historia moderna de EU, podría expulsar a millones de personas mediante redadas, internamiento en campamentos y deportaciones a gran escala. Un renovado programa “Quédate en México” podría enviar a decenas de miles de solicitantes de asilo a esperar su trámite en México, si el gobierno mexicano se ve obligado a aceptarlo.
Las organizaciones sin fines de lucro y las entidades que defienden a las personas migrantes podrían enfrentar ataques legales coordinados. La construcción del muro fronterizo se reanudará. Las tragedias evitables, desde separaciones familiares hasta vidas destrozadas y maltrato en custodia y detención, probablemente se multiplicarán.
Si bloquear la migración se convierte en la principal prioridad de la política exterior de Estados Unidos en las Américas, la relación entre Estados Unidos y la región se distorsionará aún más.
México y otros países a lo largo de la ruta migratoria podrían enfrentar mayor presión para bloquear a personas migrantes y aceptar más deportados de otros países.
Efectos en México
Trump ha propuesto una acción militar de EU en México, a través de un despliegue de fuerzas especiales de EU en territorio mexicano, como posible respuesta al narcotráfico, una idea que ha ganado apoyo dentro del Partido Republicano. Es difícil subestimar los riesgos para los derechos humanos de tales propuestas o el impacto potencialmente catastrófico de una acción militar unilateral de EU en la relación entre EU y México.
Pero incluso si no se materializa una acción militar de EU, tales propuestas presagian una relación en la que las amenazas de medidas unilaterales podrían ser el punto de partida para el diálogo en áreas cruciales como seguridad y migración, lo que podría llevar a resultados contraproducentes en lugar de soluciones políticas efectivas.
Después de décadas de una guerra contra las drogas en México no se ha logrado proteger de la violencia a la población mexicana ni frenar el consumo ilícito de drogas en EU, en cambio, ha resultado en graves violaciones a los derechos humanos .
En la medida en que la administración Trump 2.0 priorice acciones militares nocivas que aparenten ser “duras” contra el crimen o en la frontera, quedará poco espacio para la cooperación en las áreas que realmente son relevantes para fortalecer el Estado de Derecho, proteger a la población y reducir la migración forzada.