Medicamentos para diabetes no son para adelgazar, alertan especialistas
* Destacadas, Salud lunes 30, Jun 2025- Aumenta venta sin control en internet
- Muchas personas usan el Mounjaro sin indicación ni seguimiento médico, al igual que fármacos como el Ozempic y el Wegovy
Aumenta en internet la oferta de medicamentos para la diabetes tipo 2, como el Mounjaro, Ozempic y el Wegovy, pero que son utilizados por muchas personas para bajar de peso debido a que son publicitados por influencers de todo el mundo, sin medir las consecuencias.
“Vendo insulina Mounjaro. Tengo cuatro de 5 mg/0.5 mL”, se lee en una publicación donde se ofrece a mil 800 pesos, precio similar al que tiene en algunas farmacias comerciales que lo presentan como un medicamento no controlado y que no requiere receta para su venta.
Otros lo ponen a 900 pesos en menudeo y 800 a partir de 10 piezas, y, además, explica cómo debe usarse: Es una dosis por semana de 2.5 mg durante un mes, (pero debe) ir a su chequeo médico y ver si sube la dosis a 5 miligramos
Así de sencillo es como se consigue este medicamento de la farmacéutica Eli Lilly, que algunas personas ya han comenzado a usar sin indicación ni seguimiento médico, al igual que como sucede con el mencionado Ozempic.
Fue a finales del año pasado cuando Mounjaro -cuyo principio activo es la tirzepatida- obtuvo la aprobación de Cofepris como tratamiento de la diabetes tipo 2 en México y para mayo de este 2025 Eli Lilly anunciaba tener también la autorización para comercializarlo como fármaco para control de peso.
En su sitio en línea, no obstante, aún se le describe como «medicina inyectable recetada que se usa junto con dieta y ejercicio para mejorar los niveles de azúcar (glucosa) en la sangre, en adultos con diabetes mellitus tipo 2». Y salta a la vista el mensaje: «Mounjaro no es una medicina para perder peso».
Alerta de especialistas
“Lo veo todos los días; lo veo en muchos pacientes, lo veo en las redes sociales y lo veo en comentarios de reuniones con amigos. Todo el tiempo estoy escuchando acerca de cómo la gente se automedica”, señala el doctor Ricardo Luna, presidente fundador y miembro honorario de la Sociedad Mexicana de Obesidad.
“Escuchan en las redes sociales que las Kardashian, que Elon Musk y que los artistas lo utilizaron como si fuera una vacuna, se inyectan y ya, creen que eso es todo. Y no, la obesidad tiene un tinte más complejo”, agrega.
“Estos medicamentos se utilizan para el control de peso como enfermedad. No son un producto estético, no son un producto milagro, no deberían de ser vendidos sin recetas médicas”, subraya Luna.
A su vez, el doctor David Ampudia Chávez, cirujano gastrointestinal con especialidad en endoscopía y subespecialidad en cirugía bariátrica, advierte que “en este esfuerzo desesperado de la gente por tratar de bajar de peso, sí puede haber un uso indiscriminado con esto”.
Acción y riesgos
Al igual que la semaglutida, la tirzepatida es parte de los llamados agonistas de los receptores del péptido-1 similar al glucagón (GLP-1), y lo que hace es imitar la hormona GLP-1 que los humanos producen naturalmente en el tracto gastrointestinal en respuesta a la ingesta de alimentos.
Además de incitar al organismo a producir más insulina, lo cual reduce la glucosa en la sangre, se ha observado que este péptido tiene una función importante en los procesos relacionados con la saciedad; “estas sustancias apagan, por así decirlo, el switch del hambre a nivel de hipotálamo en el cerebro”, expone Ampudia.
“Eso es algo muy poderoso porque si a nivel central, a nivel de sistema nervioso, el apetito es menos y la saciedad se estimula, ya no vas a comer», continúa el experto.
Pero no sólo eso, sino que este medicamento también retarda el vaciamiento gástrico. El cirujano bariatra Jesús Montoya Ramírez explica que usualmente el estómago debe estar vacío a las dos horas después de comer.
“(La tirzepatida) lo que hace es disminuir la motilidad gástrica de manera importante, y entonces el retardo del vaciamiento gástrico es por muchas horas más. En vez de ser dos, puede ser hasta cuatro o seis horas”, detalla el especialista.
Aquí es donde el uso de este fármaco puede empezar a ser una experiencia complicada para quienes lo toman, pues a ese sentirse lleno durante más tiempo pueden sumarse náuseas y vómitos, lo cual es apenas el inicio de una serie de potenciales malestares a nivel gastrointestinal.
Diarrea, estreñimiento, dolor abdominal, inflamación, gastritis, reflujo, flatulencias y eructos, son algunos de los efectos adversos más comunes que enlista el doctor Ampudia, quien por ello recomienda que haya vigilancia por parte de un médico.
“Como cualquier medicamento, no son efectivos para todos y no son seguros para todos. Son medicamentos, tienen contraindicaciones”, remarca Luna, enfatizando que Mounjaro está contraindicado en pacientes con antecedentes de pancreatitis, así como de carcinoma medular de tiroides.
Casos de pancreatitis aguda por el Ozempic
Los medicamentos Ozempic, Mounjaro y Wegovy están siendo analizado muy cerca por las autoridades sanitarias de Reino Unido, pues son cientos de informes de pancreatitis aguda y crónica en personas que los han tomado.
La Agencia Reguladora de Medicamentos y Atención Sanitaria del Reino Unido ha solicitado a las personas que los suelen tomar y que han sido hospitalizadas por pancreatitis que se pongan en contacto con la agencia, con el fin de llevar a cabo un estudio para tratar de predecir quienes corren un mayor riesgo de sufrir este tipo de reacciones.