Tarde gris en la Real Maestranza de Sevilla por la lluvia y el pésimo encierro de la ganadería
* Destacadas, Nacional lunes 29, Sep 2025
- Gran expectación por la presentación del maestro José Antonio Morante de la Puebla y el joven peruano Andrés Roca Rey el pasado 28 de septiembre

Tarde gris en la Real Maestranza de Sevilla por la lluvia y el pésimo encierro de la ganadería
Por José Luis Montañez
Hablemos más bien y concretamente del cartel del domingo 28 de septiembre en la plaza de toros la Real Maestranza de Sevilla, en el cerrojazo de La Feria de San Miguel.
Los nombres de José Antonio Morante de la Puebla y Andrés Roca Rey convocaron desde meses atrás a miles de aficionados taurinos de España y de muchas partes del mundo, a éste, que es uno de los ruedos más hermosos del planeta tierra.
La expectación por ver en el ruedo, frente a frente, a las dos más grandes figuras del toreo mundial, resultó un fracaso total, por decir lo menos, por el pésimo encierro de la ganadería de Núñez del Cuvillo, manso, con poca fuerza y que no permitió a los coletas hacer gala de su arte y oficio.
Será que se ha manipulado ya tanto la genética del toro de lidia en las ganaderías españolas, que va a las plazas con una estampa bella, pero con gran falta de bravura o trapío y todo aquello que debe de tener un animal de esta especie.
El tan comentado pique o rivalidad que, según los diarios españoles, existe entre el maestro cigarrero José Antonio Morante de la Puebla y el joven peruano Andrés Roca Rey terminó como esas peleas boxísticas arregladas del “Canelo” Álvarez en Las Vegas, Nevada, que siempre dejan un mal sabor de boca.
Ya al final del festejo, en la lidia del sexto toro, quien por cierto tomó la alternativa esa tarde de manos del maestro sevillano, tanto Roca Rey como el propio José Antonio Morante de la Puebla rompieron la distancia en el ruedo, que según los cronistas taurinos guardan por el celo profesional que se tienen, y con un tanto de resignación, comentaron, palabras más palabras menos, que nada se puede hacer cuando la ganadería seleccionada para un cartel tan importante resultan un fiasco.
Por cierto, en México y, concretamente en la Plaza de Toros México de la capital del país, la corrupción de la empresa, aunada a la falta de honestidad y vergüenza de ganaderos, toreros y apoderados, dieron como resultado el cierre de este gran coso, triunfo que finalmente se adjudicaron un puñado de dizque ecologistas a quienes les abrieron la puerta para sus fines políticos.











