Insensatez
Augusto Corro jueves 9, Ago 2012Punto por punto
Augusto Corro
Los perredistas volvieron a utilizar sus métodos tradicionales de echar gasolina al fuego y luego intentar lavarse las manos. A raíz de sus inconformidades por el proceso electoral presidencial, a la dirigencia izquierdista se le ocurrió culpar a medio mundo de su derrota.
Se lanzaron contra la cadena de tiendas de autoservicio Soriana. Los seguidores de López Obrador se sintieron convocados al desorden e inmediatamente iniciaron agresiones contra la cadena comercial mencionada.
Ante esa ola de manifestaciones violentas, los empresarios condenaron, a través de un desplegado, los ataques y “actos irracionales” en contra de empresas vinculados a inconformidades luego de las elecciones presidenciales.
También las centrales obreras, entre otras la CROC, de Isaías González, reprobaron la ola de agresiones contra Soriana.
Ante esta situación, el presidente del PRD, Jesús Zambrano, anunció que la coalición Movimiento Progresista no realizará acciones que generen inestabilidad política o social en el país. La actitud del “Chucho” Zambrano es tardía y su discurso cae dentro de la insensatez pura. ¿Cómo situarse en un clima de tranquilidad si un día y otro también la dirigencia izquierdista le echa leña al fuego de la inconformidad política?
En la base, los supuestos militantes de la izquierda son una fuerza incontrolable que actúa impulsada por la pasión partidista, y nadie los exhorta a manifestarse de acuerdo a los lineamientos legales. Así pues, que Zambrano no pretenda darse baños de pureza, cuando él y sus cuates, llenos de ambiciones, estimulan el desorden y la violencia.
¿A quién le quiere ver la cara de tonto el Chucho Zambrano? Solo los necios no quieren entender que López Obrador perdió nuevamente, porque no corrigió los errores del pasado. En el 2012, el tabasqueño volvió a repetir la película que ya vimos en el 2006. Esta vez, con nuevos personajes. Uno de ellos, el senador Ricardo Monreal, quien se apropió de la mentira para defender sus intereses mezquinos. Tal es el caso de Scotiabank.
Se cuenta con pruebas suficientes para calificar a Monreal de mentiroso.
LA REUNIÓN PERREDISTA
El próximo 15 de agosto se reunirán los perredistas en Acapulco. El cónclave de los amarillos será muy interesante, porque definirán la línea política que seguirán en el próximo sexenio.
Entre otras cosas, tendrán que dejar claro su apoyo a López Obrador o su alejamiento del tabasqueño.
Si para esa fecha ya se emitió el veredicto del tribunal electoral, que confirmará el triunfo del priísta, Enrique Peña Nieto, los perredistas buscarán definir su papel de primera fuerza de oposición. Será muy importante conocer el proyecto de la izquierda que deberá aprovechar el capital político, nada despreciable, que obtuvieron en las elecciones pasadas.
En Acapulco estarán presentes senadores y diputados, así como gobernadores que obtuvieron el triunfo en los comicios de julio pasado.
Se podría decir que estarán presentes los ganadores que, indiscutiblemente, no les interesará tanto la línea del lópezobradismo. En su oportunidad el gobernador electo de Morelos, Graco Ramírez, no se anduvo con rodeos y dejó entrever que actuará, institucionalmente, en coordinación con Peña Nieto.
También el virtual jefe del gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, un hombre respetuoso de la legalidad, optó por emitir su opinión hasta conocer las definiciones del tribunal electoral sobre los comicios recientes.
El senador amarillo, Carlos Navarrete, manifestó que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) acatará el fallo del Tribunal Electoral sobre las elecciones presidenciales, “aunque no lo compartamos”. Repito, el escenario de Acapulco, al que suponemos que asistirá López Obrador, no le será muy favorable a la causa del tabasqueño.
¿Y JOSEFINA?
Los panistas se encerraron en Querétaro para empezar a analizar los motivos de su derrota mayúscula.
Estuvo presente la plana mayor, encabezada por Felipe Calderón Hinojosa. No se llegó al fondo de las causas políticas que dejaron en la lona al Partido Acción Nacional, en calidad de muerto.
Aunque Calderón Hinojosa no perdió la oportunidad para señalar, ante sus correligionarios, el camino a seguir para rediseñar el partido. (Ojo: rediseñar, no refundar) y recuperar la Presidencia de la República en el 2018.
Los elementos para volver a la senda del triunfo, según el panista, son: dinero, estructura y mejores candidatos. Nada nuevo. O sea, que Calderón arrojó la piedra directamente contra Josefina Vázquez Mota.
Sin darle mayor vuelta al asunto, Vázquez Mota fue calificada como una mala aspirante a Los Pinos.
A todas luces, se ve que Calderón intenta curarse en salud. Ningún candidato panista estuvo en condiciones de ganar la presidencia de la República, por la simple y sencilla razón, de que está confirmado que los panistas no saben gobernar.
México comprobó que los gobiernos blanquiazules no pudieron resolver los problemas que lo agobian, como son la pobreza y el desempleo; además, en este sexenio, el país vive una violencia inusitada debido a la guerra contra la delincuencia organizada, promovida por el gobierno federal panista.
A la reunión de Querétaro no asistió Vázquez Mota, cuya ausencia ya se empieza a sentir. Quizá la más interesada en saber qué opinan los panistas es la propia candidata derrotada; pero sigue de vacaciones en Europa. Tal vez aun no supera las traiciones de que fue víctima por parte de quienes prometieron apoyarla y a la mera hora la abandonaron a su suerte.