Va de nuez…
Roberto Vizcaíno jueves 20, Jun 2013Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- Enrique Peña Nieto habló de su proyecto general, dentro del cual está la reforma energética
- En cada párrafo, planteamiento sobre esta enmienda, dejó en claro que Pemex es del Estado y los mexicanos
- La guerra sin fin entre maderistas contra calderonistas-corderistas, siguió ayer sin tregua
Cómo si no hubiera más México que el que representa Pemex, los defensores permanentes del petróleo mexicano desenfundaron sus espadas, limpiaron sus cañones y anunciaron de nuevo la guerra santa ante un par de notas –en The Financial Times y en The Wall Street Journal–, donde el presidente Enrique Peña Nieto se refritea a sí mismo en lo de su reforma energética y donde vuelve a hablar de que hay que abrir la paraestatal al financiamiento de la iniciativa privada.
Vale aclarar que en ninguna parte de esas notas informativas se plantea lo de la privatización de la paraestatal y mucho menos de los yacimientos de hidrocarburos.
Tampoco se afirma que habrá reformas al 27 constitucional que contiene el candado mayor para evitar la privatización de Pemex y el petróleo mexicano.
En una conferencia magistral donde explicó las 5 metas y los objetivos centrales de su gobierno, reconoce que su administración transita sin mayorías en el Congreso y frente a una gran pluralidad, diversidad y divergencias de grandes segmentos sociales, Peña Nieto se congratula de la participación de las principales fuerzas en el Pacto por México que ha hecho posible ya la reforma educativa, que tiene en curso la reforma financiera y que incluye presentar las iniciativas para la reforma hacendaria, la reforma energética y la reforma política.
Respecto de la reforma energética Peña dijo:
“… está inscrita una reforma energética, donde partimos de importantes coincidencias, fuerzas políticas y el gobierno de la República.
– Primero. Que los hidrocarburos deben seguir siendo propiedad del Estado mexicano, que la rectoría de la empresa nacional Pemex debe ser del Estado mexicano, pero que hay necesidad de elevar la productividad y de ampliar la infraestructura instalada para explotar otras fuentes generadoras de energía.
“¿Con qué alcance?
– Para que los insumos energéticos, especialmente el gas natural sea más barato; que realmente la electricidad, la energía eléctrica que consumen los mexicanos y por la que pagan los mexicanos, también sea más barata.
– Y para lograr este objetivo será importante impulsar una reforma energética que permita la participación del sector privado para ampliar esta capacidad productiva de nuestro país.
Hasta aquí lo señalado por Peña Nieto respecto a esta reforma. ¿Hay alguna parte donde se plantee la privatización de Pemex?
Bueno, por si no hubiese quedado claro, al final respondió varias preguntas y en cuanto a la que le hicieron precisamente sobre la posibilidad de que su reforma energética escondiera algún mecanismo para privatizar a la paraestatal o los hidrocarburos, Peña respondió:
“Creo que lo he señalado. Lo que buscamos es ampliar la capacidad de Pemex bajo la base y sobre un consenso que tenemos con las fuerzas políticas y que tiene el propio gobierno de la República.
“El Estado debe mantener la propiedad de los hidrocarburos, el Estado debe seguir siendo, mantener la rectoría sobre Pemex, pero necesitamos ampliarla.
“Y creo que es claro que en la modernización y transformación de Pemex está el posibilitar la participación del sector privado. Ésta es, sin duda, una de las metas y los alcances.
“No es, y aquí quiero dejarlo claramente señalado y subrayado: no se trata de privatizar. Algunos han creído que la participación del sector privado es privatizar. Al contrario. Una y otra vez he insistido y he declarado: el Estado seguirá siendo propietario, dueño de los hidrocarburos del país, dueño del petróleo, pero necesitamos ampliar su capacidad.
“Pemex por sí mismo no tiene los recursos económicos suficientes para detonar y desarrollar infraestructura para generar más energía.
“Y ya dije cuál es el objetivo. Si queremos tener gas más barato, si queremos asegurar que la energía eléctrica sea más barata, que el gas natural para la producción de nuestro país sea más barata, tenemos que ampliar nuestra generación de energía y, por eso, tenemos que asegurar la participación del sector privado, en mecanismos que además están probados ya en otras partes del mundo, que sin perder la propiedad del Estado, el Estado sobre los hidrocarburos, den esta facilidad y esta oportunidad”, concluyó. (negritas y subrayados, nuestros)
Los hechos, la experiencia como país nos dicen que pese a todas las aclaraciones que haga Peña, siempre habrá suspicaces que vean que detrás está el gato encerrado de la privatización.
Un punto interesante es que ni Gustavo Madero del PAN, ni Jesús Zambrano del PRD, miembros esenciales de la mesa del Pacto por México salieron a cuestionar a Peña. A lo más uno de ellos pidió al Presidente que explique a fondo su visión de esta reforma. Pero hasta ahí.
De todas formas los defensores de siempre están ya en guerra, así que preparémonos para marchas y gritos, debates y contrargumentos.
RUPTURA SIN REMEDIO
Donde no hay marcha atrás es en la ruptura de maderistas y calderonistas-corderistas.
Todo advierte que hagan lo que hagan, firmen lo que firmen, se prometan lo que sea, no hay posibilidad de que vuelvan a actuar como hermanitos o al menos como políticos profesionales con las mismas ideologías, objetivos, intereses y dentro del mismo partido.
Las puñaladas y las zancadillas entre unos y otros surgen apenas toman aire, y no van a amainar mientras haya uno de ellos en pie.
Así el pleito va para durar años. La experiencia más cercana fue la del pleito AMLO-Los Chuchos dentro del PRD, que duró casi 8 años –quizá de 2004 a 2012–, y que medio disminuyó cuando López Obrador decidió irse con su Morena y Batres a formar otro partido. En el seno del PRD quedaron Bejarano con su Izquierda Democrática Nacional y otras tribus lopezobradoristas que se resisten a dejar de morder el tobillo de Los Chuchos.
En ese pleito ayudó que AMLO tenía el colchón del PT y del Movimiento Ciudadano, pero maderistas y calderonistas no tienen nada parecido, así que se van a dar duro de aquí al 2018.
Y no hay que confundirse con la imagen que presentaron antenoche los calderonistas y los maderistas al anunciar el acuerdo para justificar lo del depósito de los 430 mil pesos a cada uno de los 38 senadores del PAN.
En esa imagen aparece por primera vez Luisa María Calderón, la hermana del mismísimo Felipe, a la izquierda del nuevo coordinador de la bancada, el maderista el colimense Jorge Luis Preciado, quien a su derecha tenía al senador corderista Jorge Lavalle.
El acuerdo entre los dos grupos fue más favorable para los maderistas ya que estos dejaron que los senadores del PAN se quedaran con los 430 mil pesos, siempre y cuando los justifiquen. Lo que no justifiquen les será descontado de sus dietas.
Fue un acuerdo donde Preciado y Gustavo Madero reconocen que Ernesto Cordero y los suyos repartieron por sus pistolas 16 millones 340 mil pesos de los 18 millones de pesos que le entrega el Senado cada mes a esta fracción, pero que su uso final deberá ser revisado y aprobado por ellos.
Es decir, nadie de quienes lo recibieron podrá usar ese dinero para cuestiones particulares y menos para caprichos, sino sólo para gastos generados por su función como legisladores.
En cuanto a la confrontación, Preciado les pidió a los calderonistas-corderistas parar el pleito.
“El detalle está en (que) un asunto interno (se está llevando) al exterior y creo que eso le hace mucho daño al partido. Yo invitaría a todos los compañeros (contrarios) que todo lo que tengamos que dilucidar pues lo hagamos internamente, como lo hemos hecho siempre en la historia de Acción Nacional.
-¿Qué cierren el capítulo Senador?
“Sí, sí; yo pienso que ya debe cerrarse esto, le hacemos mucho daño al Partido. Creo que el Partido Acción Nacional no merece, ni la gente que votó por nosotros, no merece que nos estemos desgastando en cuestiones internas cuando realmente lo verdaderamente trascendente para el país pues viene en puerta, ¿no?, y se tiene que discutir del 15 al 19 de julio”, concluyó.
Apenas unos minutos después Ernesto Cordero arremetió de nuevo contra Preciado. Y anunció que seguirá adelante en su intención de aprobar un nuevo reglamento interno… contra Preciado y Madero.