Una comentocracia camaleónica
¬ Luis Ángel García lunes 24, Jun 2024Por la Derecha..!
Luis Ángel García
A reserva de parecer contradictorio, incluso contestatario, es importante resaltar la transformación que han sufrido los medios, los opinadores y los analistas ante el anuncio de parte del gabinete. Y no es porque uno quiera asumir la crítica por la crítica misma. Si algo deseo, como ciudadano, es que le vaya bien al gobierno legítimamente electo, porque vamos en el mismo barco y el deseo de cualquier mexicano bien nacido es que sus autoridades tengan la sapiencia para establecer las políticas públicas y de buen gobierno para sacar adelante al país y resolver la mayoría de los grandes problemas nacionales. Pero el anuncio de unos nombramientos no significa que se pueda conocer un plan sexenal ni que los personajes propuestos tengan la independencia política para llevar a cabo estrategias efectivas, más allá de los buenos deseos.
Por eso llama la atención el cambio que experimentaron los medios de comunicación. A la derrota incuestionable de la oposición, muchos recurrieron a las dotes de prestidigitador que vaticinaban el triunfo de la 4T y vieron en la Presidente Electa las virtudes y no los vicios que le atribuían. Como su verdadero elector resalta, ahora la ven como científica y sus estudios en el extranjero, cuando criticaban sus licencias como profesora de la UNAM y ya olvidaron sus feroces ataques contra la Máxima Casa de Estudios por ser supuestamente elitista y amenaza con llevarla a la educación humanista que no es otra cosa que la mediocridad, con lo que dejará ser una de las cien instituciones de educación superior mejores del mundo. El propio rector descalificó el trabajo de investigadores sobre la reforma judicial y avaló el golpe de Estado a la Corte.
Contrario sensu a la idea de que los nombramientos tranquilizaron a los mercados, en cuanto se supo de la ratificación del titular de Hacienda, el peso se desplomó y salieron capitales. Los panegiristas auguraban el retorno a la paridad de 17 pesos, pero no baja de los 18. Tampoco parece que el nombramiento del ex canciller —descalificado moralmente por su abdicación política—, para ocupar la Secretaría de Economía sea del todo bienvenido, sobre todo porque amenaza con renegociar el T-MEC, si no pudieron evitar el embargo de aguacate y mango, sólo hasta que Estados Unidos aceptó regresar a la inspección de los frutos por parte de sus empleados, aunque eso costó 50 millones de dólares semanales en pérdidas para los agricultores. Recordemos que Donald Trump se ufanaba de exhibir la bajada de pantalones del gobierno mexicano en el tema migratorio. No son buenos negociadores.
Pero ahora todos ven cualidades inexistentes. Que, si es muy bueno el secretario de Agricultura, aunque haya anunciado que tampoco ellos aceptarán el maíz transgénico. Ven en la nueva Presidente a una excelente ambientalista, pero acabamos de pasar una enésima contingencia ambiental, lo que indica que durante su administración poco o nada se hizo para mejorar el medio ambiente de la capital de la República.
No es que sea contestario, deseo de todo corazón que el sexenio que está por comenzar sea exitoso; si les va bien, nos irá bien a todos los mexicanos, incluidos los que no votamos por ella. México merece un futuro promisorio e incluyente, donde se escuchen todas las voces y se acepten las críticas. Más allá de resolver las asignaturas pendientes que deja este régimen, se debe abrir México a la inversión extranjera, cumplir con los compromisos a que está sujeto nuestro país en materia de comercio internacional, mejorar el medio ambiente y aceptar el uso de las energías limpias, impulsar el verdadero conocimiento científico y tecnológico y no hacer de la UNAM rehén del gobierno para acabar con la libertad de cátedra y socavar la autonomía. Ese es el país que deseo y por ello quiero un gobierno eficaz más allá de un modelo populista.